Medieval

En la formación y desarrollo de Europa medieval, la ciudad desempeño un papel fundamental. Las transformaciones producidas al final de la edad media permitieron que la ciudad se convirtiera en centro del poder, en un motor del desarrollo productivo comercial.

‘’Las reformas impulsadas desde el ámbito urbano se extendieron por el mundo rural; la producción industrial, la comercialización para el consumo, los intereses mercantiles y financieros, los nuevos valores adoptados en la jerarquización de la sociedad, los servicios y funciones dispensados, y los cambios, mentales surgidos a su alrededor, constituyeron los argumentos que iban a definir globalmente a la sociedad occidental durante muchos siglos.’’ ^[1]

1. Producción industrial del comercio:

A fines del siglo XIII todas las ciudades constaban con recursos artesanales para satisfacer las necesidades de los habitantes.

En muchas ciudades se generaban núcleos de trabajo que producían para exportar a lejanos sectores, está activa producción le daba a las calles una imagen de productividad, adornadas de talleres concurridos.

Estos núcleos nacientes de trabajadores tuvieron la necesidad de un espacio propicio para ofrecer sus productos, por lo que habilitaron zonas para el establecimiento de tiendas donde se podía adquirir cualquier tipo de producto, hablamos de las primeras ferias o primitivos mercados que convirtieron los centros urbanos en lugares de actividad económica.

Junto a estos núcleos de trabajadores y ferias surge un nuevo grupo, un grupo de ‘’empresarios’’ que se arriesgaban en invertir, complementaban sus actividades comerciales con otras actividades como cambio de monedas, créditos, etc. Esta minoría ejercería el gobierno en las ciudades más tarde.

1.  Las manufacturas urbanas:  

El incremento del comercio por parte del pueblo impulso a la vez a un incremento de la producción. Para ello los oficios debieron buscar nuevas técnicas para aumentar la eficiencia, para así producir más y a menor costo.

El paso de la artesanía a la industria se centró en intensificar la producción y la organización del trabajo. En un principio la base de la producción siguió siendo el ‘’obrador’’ de tipo artesanal, quien realizaba el ciclo completo, la novedad fue el número de obradores, es decir el número de mano de obra, lo que repercutió en los métodos de contratación y en las condiciones laborales, permitiendo así una cierta especialización por parte de la mano de obra.

La multiplicación de los centros de producción genero mayor oferta para el consumidor. Para evitar los conflictos entre comerciantes se generaron reglamentos de oficios y producción.

1. Aspectos de producción:

Los aspectos de producción que más complejidad alcanzarían serian: la construcción naval  y la industria textil.

La primera, la construcción naval tendría su apogeo en los siglos XIV y XV, con las primeras construcciones hechas para llevar a cabo grandes expediciones mercantiles o para enfrentamientos bélicos, lo que permitiría un gran avance como sociedad.

´´…constituye en la Baja Edad Media una actividad expansiva, dirigida por el poder estatal, en empresas de gran magnitud orientadas según criterios industriales por el número de obreros, la ordenación del trabajo, los medios económicos y las novedades técnicas, situándose en las puertas del moderno Factory System’’^[2]

El segundo ámbito es la industria textil, el cambio en la creación de esta manufactura viene de la mano de tres factores, primero el uso de nuevas tecnologías, José Ángel García nos nombra algunas como ‘’ el molino hidráulico batanero, el torno de hilar, los bobinadores mecánicos etc’’. Segundo la gran cantidad de géneros, su calidad, sus variedades de color y en tercer lugar la inversión de capital de los empresarios mercantiles.

1. Modelos de producción:

El primero corresponde a centros fabriles, se apoyan en el predominio del capital, existía una compañía mercantil que articulaba todo el proceso, desde la compra de la materia, hasta la venta del producto, siempre  buscando abaratar los costos.

El otro modelo corresponde al taller tradicional, que parte de una iniciativa individual o familiar. El trabajador era un maestro artesano que producía una parte del producto para luego recurrir a otros maestros para que siguieran con el trabajo.

1. Maestros, oficiales y aprendices.

La organización laboral se basaba en tres niveles:

1. Maestros: estaban a la cabeza, era el ‘’patrono’’.
2. Oficial: eran trabajadores formados técnicamente para llevar a cabo su labor. Su relación con el maestro se estipulaba en el contrato, junto al salario.
3. Aprendices: era quien aprendía el oficio, era la mano de obra barata de la época. Los jóvenes solían emigrar a la ciudad para ponerse a merced de un maestro que los alojaba, vestía, alimentaba y por sobre todo les instruía su oficio.

1. El desarrollo económico:

Se produce un desplazamiento de la actividad mercantil desde el mediterráneo hacia el atlántico. Este desplazamiento se produce principalmente por el avance Mongol y Otomano.

El comercio oriental se generalizaba en productos de lujo como telas, especias, pieles, seda, etc. La evolución que se produjo en el mercado género que el comercio se centrara más en una clientela menor refinada, y más ‘’popular’’.

El refinado mercado de oriente siguió produciéndose, pero también sustituyeron con productos más asequibles como el alumbre de tolfa, la seda de granada, el azúcar de valencia y Sicilia, etc.

Los grandes puertos del mediterráneo centraron su atención hacia el atlántico, tanto por mar como por tierra.

Inglaterra se transformó en un punto importante, la transformación económica de la isla se basa en tres puntos; primero la exportación de lana para fomentar la industria textil, más específicamente de paños, que luego sería la base de sus exportaciones.

Segundo el establecimiento de un monopolio del comercio interior y exterior, con el acta de Navegación de 1831, excluyendo a los flamencos e italianos, apoyándose principalmente en cambios comerciales en las tierras bálticas.

Y tercero y última la creación de una potente flota naval inglesa.

1.  Rutas y mercados regionales:

La más importante revolución impuesta por el comercio es la implementación de una base social capaz de consumir y producir mercancías, lo que genera el nacimiento de mercados que dan paso a un mecanismo que conecta el comercio a larga distancia con el interior y el de corto alcance.

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