Nuestro Destino ¿escrito O Libre?

Nuestro destino ¿escrito o libre?

La humanidad lleva siglos debatiéndose entre dos vertientes contrapuestas: si el destino está escrito o es libre.

Para nuestra mente resulta más sencillo pensar que de alguna forma el destino está escrito y que, aunque puedan existir pequeñas variaciones, una pitonisa u oráculo pueden leer lo que va a sucedernos en el futuro como en “Edipo Rey” e incluso podemos viajar a éste porque ya existe. Estar predestinado es muy cómodo: se eliminan responsabilidades. Yo ya no soy culpable de mis maldades, ni responsable de mis actos, sino el destino y aquél que escribió un plan maestro y me dio ese papel en la obra. Yo, al fin y al cabo, ni quería. En cambio gracias al libre albedrío vuelvo a ser responsable de mis comportamientos y puedo ser castigado por ellos, ya sea aquí o en otra vida.

El libre albedrío implica que cada persona es capaz de elegir voluntariamente sus actos y que es esa persona la que elige cuál es su camino y construye su destino. Se trata de decisiones tomadas de forma conciente no marcadas por instintos, ni por la influencia de otros agentes internos o externos. Llevamos escrito adentro gran parte de nuestro destino. Además, aunque en cada momento seamos capaces de elegir y tengamos la ilusión de ser dueños de nuestro camino, puede que siempre elijamos las mismas cosas, las que tenemos costumbre de elegir. Aquéllas con las que nos sentimos más cómodos porque ya conocemos. Repetimos nuestras elecciones en un patrón constante. En cualquier caso, sea realmente uno mismo el que elige o alguna especie de “destino” escrito el que marca nuestras decisiones, con cada decisión de cada ser vivo se va construyendo el presente, en una relación causa efecto constante con multitud de causas.

“ http://www.aunclicdelastic.com/destino-esta-escrito/”

Intuitivamente, la mayor parte de los humanos están convencidos de la idea de que somos libres, que tomamos decisiones libremente y que podemos hacer una cosa porque lo hemos decidido. Sin embargo, esa idea ha sido puesta en duda por muchos neurocientíficos que dicen que el libre albedrío y la libertad es una ilusión, que en realidad no existe porque todo está determinado, todo efecto tiene una causa en que no queda espacio para el destino libre.

Mi idea es que existe una conciencia en el cerebro que ligada con elementos externos que serían la cultura y lo simbólico trabajan juntos posibilitando que exista el libre albedrio un ejemplo es el juego que tiene una actividad muy libre pero también con reglas muy estrictas esa combinación nos ayuda a tomar decisiones libres.

Se habla de que hay un cerebro moral; que todas nuestras normas éticas y morales ya incorporadas

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