PENSAR Y SENTIR: DOS ASPECTOS FUNDAMENTALS EN UN PROCESO DE LECTOESCRITURA REFLEXIVO Y CREATIVO

Pensar y sentir: Dos aspectos fundamentales en un proceso lectoescritura reflexivo y creativo.

En el proceso de lectoesritura reflexivo y creativo debemos tener presente el significativo aporte teórico que de muestra el nexo existente entre cognición y afecto.

Hemisferio Izquierdo:

Este es el asiento de la inteligencia racional, lo cual nos brinda la posibilidad de razonar y relacionar los pensamientos en forma secuencial y lógica. La inteligencia racional procesa paso a paso, dato a dato de manera lineal y causal. Las habilidades verbales y numéricas tienen su asiento en este hemisferio.

Hemisferio Derecho:

En este reside la inteligencia asociativa o creativa, la cual nos permite producir en nuestra mente toda la relación a asociación por absurda que parezca. Nos brinda la posibilidad de jugar con la hipótesis de relación y transformación que origen acto creativo. Es imaginativo e intuitivo. Prefiere instrucciones no verbales. Procesa holísticamente muchos datos a la vez, en forma simultanea, ni lineal ni causal. Analiza siguiendo una lógica implícita que marcha al margen de la conciencia.

Reciente investigaciones afirman que la diferencia no reside en el tipo de información procesada por ambos hemisferios, si no en la modalidad que cada uno emplea para realizar el procesamiento de la información, modalidades funcionales que lejos de ser excluyentes son complementarias.

Según Séller (1993) El identificar “inteligencia” con pensamiento crítico, lógico, analítico (Hemisferio Izquierdo) nos ha llevado, durante mucho tiempo al olvidar en nuestra práctica educativa procesos y habilidades involucradas en el pensar y en el actuar creativo, impidiendo la ruptura de la dicotomía “Pensamiento Crítico- Pensamiento Creativo” y su trabajo en el aula, como modalidades de pensamiento integradas y recurrentes.

Aun cuando se habla de crear a un individuo crítico y creativo, sabemos que el equilibrio no es fácil y que un niño nace con inclinación a utilizar más las facultades de un hemisferio que las del otro. Cabe destacar que esta inclinación se vuelve un problema cuando estas facultades son reforzadas en el ambiente familiar y escolar, olvidando las otras facultades que aunque potencialmente se tienen se van atrofiando por una subestimación de las mismas.

Si reflexionamos, a la luz de las teorías que confirman la “Plasticidad Neuronal Funcional” no será difícil creer que si no se permite el desarrollo de las distintas funciones de ambos hemisferios estas perderán, en el transcurso del tiempo su capacidad de activación.

La Inteligencia Afectiva

Reside en un área de nuestro cerebro llamada Sistema Límbico. Esta nos capacita para la emoción, la motivación y por consiguiente nos brinda la oportunidad

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