PORQUE EL PAIS NECESITA UNA REFORMA ESTRUCTURAL

¿QUÉ TIPO DE REFORMA NECESITA EL PAÍS?

Es evidente que el país necesita urgentemente una reforma Institucional, ya no se puede sostener un país donde el rubro más alto es el de gastos de funcionamiento que es de 56.1% mientras que las cifras de pobres no disminuyen en la actualidad el del 30.6% según el DANE.

No se puede tapar el sol con un dedo, la corrupción también es una de las fuentes de desangre más grandes que tiene el país. Hoy está de moda hablar de ‘carruseles’, ‘pulpos’, ‘carteles’, ‘mafias’, ‘venas rotas’ y ‘ollas podridas’. El de la salud, el de las pensiones, el del polémico programa Agro Ingreso Seguro, por solo nombrar algunos, cada caso es más grave que el anterior. Ahora el turno es para la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN).

Pocos se atreven a decir cuánto pierde el país por corrupción, más cuando nuevas ‘ollas podridas’ comienzan a destaparse. El ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, en su defensa del proyecto del Estatuto Anticorrupción que ya fue sancionado por el presidente, estimaba que las pérdidas alcanzaban los 6 billones de pesos. Sin embargo, es la punta del iceberg.

El desfalco por recobros en el sector de la salud, el presidente Juan Manuel Santos habló de 300.000 millones de pesos, pero advirtió que serían “billones” los saqueados al Estado. Falta ver cuántos recursos más se han perdido por los 116 puntos de alto riesgo de fuga que tiene detectados la Contraloría. Las cifras son sorprendentes y vergonzosas.

Para entender el impacto social que tiene el robo de los recursos públicos, basta mirar los resultados de una encuesta que la Universidad Externado realizó a 530 empresarios, quienes admitieron que, en promedio, el 13 por ciento del valor de un contrato se destina al soborno o las ‘mordidas’, un equivalente a 3,9 billones de pesos.

Según Óscar Ortiz, el zar anticorrupción, con ese dinero se podrían construir 2.000 alcantarillados o 1.800 acueductos de sexta categoría, pagarles la universidad a 80.000 jóvenes (a 5’000.000 el semestre) o construir 200.000 viviendas de interés social.

Para el presidente Juan Manuel Santos, ese billón de pesos que está en el bolsillo de los corruptos por devoluciones ilegales del IVA es construir “un transmilenio al año”.

Pero son varias las razones para que la corrupción sea el pan de cada día en Colombia y en todos los niveles: desde la casa, hasta las más altas instancias de un país. Todos los expertos advierten que la corrupción es más sofisticada y que van unos pasos adelante a la capacidad de previsión y de reacción de los entes de control.

“En los últimos años, Colombia ha sido catalogada como uno de los estados con mayor nivel de corrupción en el sector público en el mundo. La corrupción es un problema de índole internacional que

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