PROYECCIÓN DE LA IMAGEN DEL ORIENTADOR A TRAVÉS DE SU DESEMPEÑO LABORAL EN LOS PLANTELES EDUCATIVOS DEL ÁREA METROPOLITANA

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD RÓMULO GALLEGOS

AULA MÓVIL BARCELONA ANZOÁTEGUI

PROYECCIÓN DE LA IMAGEN DEL ORIENTADOR A TRAVÉS DE SU DESEMPEÑO LABORAL EN LOS PLANTELES EDUCATIVOS DEL ÁREA METROPOLITANA

PUERTO LA CRUZ, ESTADO ANZOÁTEGUI.

Tutora:                                                                                   Autora:

Dra. Doris Campos                                                  Lcda. Belki Simancas

San Juan de los Morros, 2011

INTRODUCCIÓN

     La educación es un proceso de vida que se inicia desde el nacimiento y se prolonga a lo largo de toda la existencia del ser humano. Por tanto, dentro de ella están involucradas las instituciones más importantes en la vida del individuo, tales como la familia, como principal formadora y promotora del desarrollo pleno e integral de la personalidad del educando; luego la escuela, por ser ella la organización responsable de estimular la expresión integral del sujeto y la comunidad, porque el humano es un ser social que hace vida en ella.

     Es en el contexto escolar donde se dispone de servicios dirigidos a orientar a docentes, padres, representantes, responsables, integrantes de la comunidad, así como a los y las estudiantes para llevar a cabo un proceso educativo de calidad, que responda a las necesidades y exigencias de la sociedad venezolana, en cuanto a la formación de un ciudadano apto para la vida y para el ejercicio de la democracia, así como para la expresión plena de su condición como ente biopsicosocial.

     Esta labor está a cargo de orientadores profesionales, quienes en conjunción con las instituciones educativas, es decir, la familia y miembros de la escuela y la comunidad, deben promover acciones dirigidas a garantizar la calidad educativa y la plena expresión de las facultades humanas en los y las educandos. Por tanto, se exige de ellos una imagen adecuada hacia el ejercicio de sus funciones orientadoras, para que ello redunde de manera positiva en el desempeño que tienen en el ámbito social y escolar.

     Basamentada en estos planteamientos, se entiende que la imagen del orientador debe ser la de un profesional con vocación, comprometido con su labor, con autoestima adecuada, con formación académica acorde al cargo que desempeña, entre otros aspectos, que de una u otra manera van a redundar positivamente en el desempeño y ejercicio profesional de la orientación.

     Atendiendo a lo antes planteado, se puede señalar que la inadecuada proyección de la imagen del orientador surtiría efectos negativos en el desempeño laboral. Pues, quienes cumplen tales funciones, no siempre manifestarían una autovaloración propicia para generar modelos propios de un orientador, otros pudieran sentirse poco motivados hacia el ejercicio profesional, dada una deficiente percepción de la labor que realizan, así mismo, hay casos en los cuales no están suficientemente actualizados o capacitados para cumplir con eficiencia su labor, lo que desmejora su sentido de pertenencia, responsabilidad laboral, su participación en las actividades de la institución y la eficiencia en el trabajo que deben llevar a cabo en el plantel donde presta sus servicios profesionales.

     Lo antes dicho ha motivado verificar la realidad existente en el Estado Anzoátegui, por tanto, se hizo una investigación cuyo propósito fue Determinar la imagen de los  Orientadores y Orientadoras a través de su desempeño laboral/profesional, en los planteles educativos del área metropolitana de Puerto La Cruz  del  Estado Anzoátegui, en atención a los planteamientos señalados.

     Como estructura de esta indagatoria, se ha planteado la siguiente: Capítulo I. El Problema. Describe el planteamiento del problema, objetivos de la investigación, justificación. Capítulo II. Marco Teórico. Aborda los antecedentes, la fundamentación y basamento teórico que le da sustento científico. Capítulo III. Marco Metodológico. Acá se especifica la metodología a utilizar para desarrollar la investigación, compuesto por el diseño, tipo, modalidad, población, técnicas e instrumentos de recolección de datos, así como la validez y confiabilidad de la información, con la consecuente identificación de las técnicas de análisis de los resultados. Capítulo IV. Presentación y Análisis de Resultados. Allí se presentan y analizan los resultados. Capítulo V. Conclusiones y Recomendaciones. Donde se plantea una síntesis de los hallazgos y las sugerencias para su corrección. Luego, se ofrece el cuerpo de referencia y los anexos correspondientes.

CAPITULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

     La Orientación es una disciplina aplicada de las ciencias de la educación  dirigida al desarrollo de las potencialidades del estudiante durante su proceso de formación, a través de la  consulta y asesoría psicosocial en forma individual y/o grupal, con el objetivo de ayudarles al logro de sus metas educativas, profesionales y socio-personales.  Su puesta en práctica  implica hacer uso de un  conjunto de funciones y tareas cuyo propósito  es generar en ellos, el desarrollo de habilidades y destrezas  en cualquier campo de acción, así como, propiciar  su proceso de adaptación y acción de manera operativa  en  los contextos donde se desenvuelve.      

     Es considerada una función medular en el proceso de enseñanza-aprendizaje, constituye el recurso de apoyo por excelencia con que cuenta la población estudiantil para elevar su calidad socio/personal y el desarrollo de sus competencias,  mediante  la ejecución de programas que propicien la auto- comprensión, la relación efectiva con su ambiente y toma de decisiones, mediante la  facilitación de los procesos de desarrollo humano en  el contexto personal, familiar y comunitario  con la finalidad  de lograr su  bienestar integral  y el de las comunidades donde se encuentran inmerso.

     Bajo esta perspectiva, le corresponde al profesional de la orientación asumir el  reto de manera responsable, ejerciendo sus funciones docentes ordinarias o especiales de manera operativa, efectiva y de calidad, a través de los diferentes roles que debe desempeñar: mediador, asesor, promotor, consultor, planificador e investigador, en función de la realidad existente, objeto de intervención, aprovechando de manera inteligente los recursos tanto humanos, institucionales, materiales y financieros presentes  en las instituciones educativas y comunidad  en general donde labora.

     Una mirada en la fase operacional de la labor del orientador en las instituciones educativas evidencia la crisis de identidad de sus actores principales, particularmente los profesionales de este sector de  la educación, quienes por una parte abogan por mayores logros no sólo apoyos económicos, sino reconocimiento  y mejores condiciones para el desempeño adecuado en sus funciones, así como también, demandan de la asistencia continua para mejorar sus habilidades y destrezas  para la ejecución de las actividades que les permitan una mejor labor  y desarrollo en lo personal y en lo profesional.

     Específicamente, en el Estado Anzoátegui, son diversas las debilidades  que se pueden apreciar en la puesta en marcha de los programas de Orientación por parte del cuerpo de funcionarios que laboran en los diferentes planteles educativos de esta entidad. Las mismas se traducen  en: falta de recursos tanto humanos, como económicos y materiales, así como también, escaso apoyo institucional, por parte de las autoridades educativas a nivel regional y, en especial, la manera disgregada en que se encuentra el gremio de la Orientación, por no contar con un organismo que dirija, organice y establezca las pautas que conlleven al mejoramiento continuo de tan significativa labor educacional.

      El impacto de  toda esta situación, se refleja en la proyección de una imagen en déficit, tanto en lo personal, como en lo  profesional del trabajador de la Orientación. Por tanto, pueden presentarse orientadores con una autovaloración deficiente, que poco estimule su formación académica y su actualización permanente, como vía para mejorar su desempeño en el plantel donde presta sus servicios; así mismo, un inadecuado desarrollo profesional, reflejado en escasa motivación laboral para cumplir el trabajo que realizan, una percepción inadecuada como profesional de éxito, poco sentido de pertenencia y responsabilidad laboral.

     Como causas de esta situación pudieran encontrarse la escasez de recursos para llevar a cabo su trabajo, el escaso apoyo institucional para desarrollar programas efectivos de orientación, así como la poca importancia que algunos miembros de la comunidad escolar pueden asignar a la labor orientadora y, por ende, del orientador. Esto ocasionaría un inadecuado desempeño, que no responda a las necesidades y expectativas de algunos integrantes de la comunidad escolar en relación con la función del orientador educativo.

     Por lo expuesto, se realizó un estudio para determinar la imagen de los  Orientadores y Orientadoras a través de su desempeño laboral/profesional, en los planteles educativos del área metropolitana de Puerto La Cruz del  Estado Anzoátegui. Ello con la finalidad de plantear recomendaciones dirigidas al fortalecimiento del rol que deben desempeñar y proyectar su imagen como trabajador responsable del servicio de orientación para elevar la calidad de la educación que se le brinda a los y las estudiantes insertos dentro del sistema educativo venezolano, concretamente en el sector donde se hizo el estudio. Para ello se plantearon las siguientes interrogantes:

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