Pedagogos Latinoamericanos

Les proponemos una actividad de participación obligatoria. Les pedimos que reflexionen acerca de las siguientes ideas: “mito” de José Carlos Mariátegui, “escuela única” de Saúl Taborda y “educación para la vida” de José Martí; en articulación con el contenido de la clase, la bibliografía y fundamentalmente con su práctica cotidiana. Elaboren sus conclusiones y compártanlas en el foro de debate.

El mito en Mariátegui, funciona como un elemento de perfección en el hombre. Mientras haya un mito habrá una razón para vivir para crear, para transformar el mundo. En un trabajo de este autor podemos interpretar el sentido filosófico que le impone al “mito” cuando expresa: “Es una creencia super humana… Sólo los pueblos con mitos multitudinarios son capaces de grandes victorias”. De ahí la idea de una escuela única y de una democracia social como el mito que resolviera las profundas diferencias sociales de su patria, particularmente la del indio. Siguiendo esta línea de pensamiento, en nuestro país durante las primeras siete décadas del siglo XX, “ser argentino” designaba tres cualidades: ser alfabetizado, ser ciudadano y tener trabajo asegurado” y si bien esto podría ser de alguna manera cierto, fue un mito que tránsito por las esferas educativas y sociales, constituyéndose en el desarrollo de la argentinidad y consagrado como verdades incuestionables. Estos “mitos” propulsaron la maquinaria política tanto interna como externa para mostrar una realidad de país que no era.

El concepto de “escuela única” de Saúl Taborda propone una pedagogía facúndica alejada del modelo europeo que tomando distancia del entorno nacional oligárquico desmontara los principios positivas y darwinistas en el que se sustentaba la enseñanza universitaria. Saúl Taborda busca desmitificar el proyecto hegemónico de Sarmiento (Instrucción pública de raigambre europeo- norteamericano) y sentar las bases de una “escuela única” amplia (desde el jardín de infantes a la Universidad) e integrada a las demás expresiones culturales de la comunidad. Aboga por la autonomía en todos los niveles educativos y rechaza la educación para el trabajo y la producción al considerarlas como excluyentes de la misión educativa. Propugna una pedagogía nacional integrada a la cultura popular.

José Martí considera que “educar es preparar al hombre para la vida” y en esta frase está contenida la importancia que tiene la escuela quien debe extender su influencia a todos los escenarios donde el educando realiza el proceso educativo. La escuela puede y debe estar en todos los momentos de la vida de un individuo. Por lo tanto la educación no debe responder a intereses académicos o reproductivos, sino a crear una cultura científica y social que supere el Curriculum y se inserte en función de las necesidades y motivaciones sociales de los alumnos.

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