Principio Electroquimico

La corrosión es el deterioro de los materiales por procesos químicos o electroquímicos. Esta comienza en la superficie de la pieza; con ello, en dicha superficie se forma generalmente una capa de un compuesto químico del metal con el elemento atacante, por ejemplo, el oxigeno. Si dicho compuesto no es poroso ni soluble en agua, el mismo actúa como un revestimiento protector, como es el caso del óxido de aluminio sobre el aluminio; con ello termina la corrosión. Si dicha capa es porosa, soluble en agua o incluso hidrófila, como por ejemplo el óxido de hierro, acelera la corrosión.

De acuerdo con Bilurbina Alter (2004) la corrosión:“es la causa principal de la destrucción de los equipos de la industrias químicas. La mayoría de destrucciones pueden prevenirse escogiendo adecuadamente los materiales dentro de la gama muy amplia que dispone el ingeniero.” (p. 141).

En relación a la corrosión electroquímica es la forma más común de ataque de los metales

Consumiendo gradualmente el metal formando un sub-producto del proceso. En este proceso se crea un circuito eléctrico y el sistema se conoce como celda electroquímica. La falta de homogeneidad de los materiales favorece la aparición de celdas de corrosión. Senner (1994) plantea que “los procesos que se presenta en la corrosión electroquímica son similares a los producidos en el interior de un elemento galvánico” (p.73)

Igualmente la corrosión electroquímica puede producirse natural o artificialmente. La segunda es conocida como “electrolisis”, ésta proviene de corrientes eléctricas continuas desviadas que descargan en tierra o agua el (electrolito). Al tomar estas corrientes de un electrolito en un área de la estructura (no perteneciente a la red eléctrica del sistema de protección catódica) y descargarlas en otras áreas de la estructura, trayendo como consecuencia una corrosión electroquímica en el área de descarga (anódica) y un grado de protección catódica resulta en el área colectora (catódica) de la estructura.

Ahora bien, unos de los principios fundamentales de dicha corrosión, es que los metales en ambientes húmedos es de naturaleza electroquímica, una aproximación lógica para intentar parar la corrosión sería mediante métodos electroquímicos. Los métodos electroquímicos para la corrosión requieren un cambio en el potencial del metal para prevenir o al menos disminuir su disolución. Sin embargo, la protección catódica es un tipo de protección (electroquímico) contra la corrosión en el cual el potencial del electrodo del metal en cuestión se desplaza en dirección negativa.

Además, las corrientes de corrosión electroquímica pueden ser invertidas mediante una aplicación adecuada de protección catódica. Esto hace a toda la estructura catódica eliminando las áreas anódicas naturales con corrientes continuas impresas en la estructura desde un ánodo externo de mayor potencia.

Vale destacar, que la celda electroquímica se encuentra compuesta por los siguientes elementos; el ánodo el cual es la porción de una superficie metálica en donde se lleva a cabo la reacción de oxidación (proceso de corrosión) (fig.1.1). En este proceso hay una pérdida o liberación de electrones como consecuencia del paso del metal a su forma iónica. Por otra parte encontramos el cátodo éste es la fracción de la superficie metálica donde se lleva a cabo la reacción de reducción, en la cual los electrones producidos en el ánodo se combinan con determinados iones presentes en el electrolito (fig.1.2). En este proceso hay una ganancia de electrones. Con el objeto que el circuito externo que representa la conexión eléctrica entre el ánodo o cátodo, por lo general de manera física pueda permitir el flujo de electrones del ánodo al cátodo y que la reacción continúe y el electrolito, correspondiente a un liquido que se encuentre en contacto con el ánodo y el cátodo, asegurando un medio

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