ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Problemas Morales Actuales

dagonv5 de Agosto de 2013

4.596 Palabras (19 Páginas)10.530 Visitas

Página 1 de 19

Problemas Morales actuales y Problemática ética en el ejercicio laboral

Contenido

Introducción 3

Problemas morales actuales 3

La discriminación social 3

La eutanasia 4

La clonación y el uso de células madre 7

Problemática Ética en el Ejercicio Profesional 10

La corrupción 10

Acoso sexual 12

Discriminación 13

Conclusiones 15

Introducción

En este informe se platearan diversos problemas morales y éticos que se han presentado actualmente, tanto en nuestro ámbito laboral como en la humanidad.

Se tratara de explicar en detalle de que trata cada problema, como lo ve nuestra sociedad y el impacto que está teniendo en nuestro ambiente.

La última tarea a la que se enfrenta la ética es la de analizar y reflexionar sobre los problemas que afectan actualmente a la sociedad en la que vivimos. Los problemas morales son una realidad. Inútilmente se ha intentado no sólo en los tiempos actuales, sino en muchas otras épocas explicar los comportamientos humanos por razones exclusivamente económicas, políticas, sociales. El hombre siempre se ha preocupado y se sigue preocupando por las grandes cuestiones del bien y el mal. Los conflictos éticos o morales acompañan la existencia humana desde antes del nacimiento hasta la muerte.

Problemas morales actuales

A continuación se detallan algunos de los problemas morales a los que se está enfrentando nuestra sociedad hoy en día:

La discriminación social

En la Declaración Universal de los Derechos Humanos se establece que toda persona tiene los mismos derechos y libertades sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición. Sin embargo estamos lejos de conseguir que esta proclama sea un hecho real. Por el contrario, la discriminación es un fenómeno arraigado en la sociedad y es, pues, uno de los grandes problemas morales que tiene que enfrentar el mundo actual. La discriminación no tiende a desaparecer; al contrario, a medida que aumenta la mezcla de personas de distintas culturas, también aumenta la discriminación.

La discriminación es un acto de separación de una persona o un grupo de personas a partir de criterios determinados. Creerse superior a otra persona y así, maltratarla física y/o mentalmente causando efectos negativos en la otra persona. En su sentido más amplio, la discriminación es una manera de ordenar y clasificar otras entidades. Puede referirse a cualquier ámbito, y puede utilizar cualquier criterio. Si hablamos de seres humanos, por ejemplo, podemos discriminarlos entre otros criterios, por edad, color de piel, nivel de estudios, nivel social, conocimientos, riqueza, color de ojos diferente, orientación sexual, etc. Pero también podemos discriminar fuentes de energía, obras de literatura, animales.

La Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (1993) considera discriminación a “toda distinción, exclusión o restricción que, basada en el origen étnico o nacional, sexo, edad, discapacidad, condición social o económica, condiciones de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, estado civil o cualquier otra, que tenga por efecto impedir o anular el reconocimiento o el ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas”.

No obstante, en su acepción más coloquial, el término discriminación se refiere al acto de hacer una distinción o segregación que atenta contra la igualdad. Normalmente se utiliza para referirse a la violación de la Ley de igual libertad y la igualdad de derechos para los derechos individuales de los individuos por cuestión sociedad/social, crecimiento humano edad, razas humanas racial, religión religiosa, política, orientación sexual o por razón de género. Tomando una parte del artículo 1º de la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación se clasificarían o se definirían en dos partes.

La eutanasia

La eutanasia es uno de esos temas morales que siempre divide la opinión al ser mencionado pero, ¿acaso nosotros no somos dueños de nuestro propio destino?, si bien Dios nos ha dado este precioso regalo que es la vida, ¿no está en nosotros saber preservarla?

La eutanasia es definida como aquella acción del médico que provoca la muerte del paciente ya sea por acción directa -con una inyección letal- o por acción indirecta es decir, que no proporciona el soporte básico para que el paciente pueda seguir viviendo. Dado que el sufrimiento del paciente va dejar de existir cuando éste pase a mejor vida. La eutanasia se convierte en una forma de misericordia para evitar que el dolor que es intenso lo aniquile lentamente.

Para la gran mayoría de cristianos, la ética está en contra de la eutanasia porque significa quitarle la vida a un ser humano, pero hagámonos las siguientes preguntas: ¿Sabremos conscientemente que un enfermo terminal tendrá atisbos de ética y moral frente a la muerte? ¿Acaso no deberíamos darle una muerte digna? ¿Somos tan insensibles que debemos alargar la agonía de un paciente, todo porque esto implica ir contra la iglesia y la sociedad?

No tendría sentido mantener con vida a un ser humano que se encuentra en agonía, teniendo en cuenta el dolor que le causaría a dicho individuo seguir viviendo, porque finalmente solo estaríamos alargando su sufrimiento.

Esa interrogante nos lleva a preguntarnos ¿Merece el ser humano seguir viviendo en esas condiciones? O por el contrario ¿Estaríamos prolongando e incrementando su sufrimiento? Entonces: ¿La eutanasia trasgrede lo moral?

La eutanasia se considera un acto moral para la persona que padece el sufrimiento y no para quien la juzga.

Se entiende por acto moral, a las acciones humanas adecuadas o inadecuadas de acuerdo a las normas morales que rigen a una persona, teniendo una responsabilidad civil, por lo tanto la eutanasia se considera una acción moral en la realización del bien para evitar un sufrimiento, como claramente era defendido por Sócrates y Platón ya que se aferraban a la idea de que una enfermedad dolorosa sería una buena razón para dejar de vivir.

Un caso muy conocido es el Ramón Sampedro reflejado en la película Mar adentro, basado en hechos reales. Un joven marino español de 25 años de edad lleno de vida, escritor de poemas; que queda tetrapléjico por un accidente en el mar. Pasa 28 largos años postrado en una cama, convirtiéndose esta en su mundo, ¿acaso no sería este un caso frustrante? Pues para muchos decir que “No” sería muy fácil, ya que no padecen el dolor y sufrimiento exterior e interior que logra esta enfermedad. Ramón, desarrolló una larga y complicada actividad de petición judicial para poder morir sin que las personas que lo ayudasen fueran culpadas, dado que su estado lo incapacitaba para hacerlo sin apoyo. Después de muchos años junto a su abogada y amiga, su familia, y una mujer que se enamora de él, continuaron mucho tiempo de su vida luchando para que le den la eutanasia pero no se la concedieron. Decidió quitarse la vida con ayuda de Rosa, la mujer que se enamoró de él, dejando un video en el cual afirmaba que él y solo él era el único responsable de su muerte.

Aquí podemos decir que los que le rodeaban sentían pena por el al verlo incapacitado y vulnerable, un hombre joven que no podía valerse por sí mismo y que necesitaba necesariamente la ayuda de los demás, claro lo ayudaban aun sabiendo que era una carga que debían llevar por todo el entorno económico que esto llevaba, tal vez si hubiesen conseguido seguir manteniendo su cuidado pero lo que no soportaban era verlo sufrir y fiel testigo son las lágrimas que derramaban todos.

Un caso real también fue presentado al tribunal supremo italiano por Beppino Englaro. Pide desconecten a su hija Eluana de la máquina que la mantiene en agonía y sufrimiento por 15 largos años. El padre de Eluana sigue luchando por más de 10 años sin conseguir que le den una muerte digna a su hija; este caso es comparado con lo que le sucedió a la joven estadounidense Terry Schiavo, que falleció después de que un Tribunal decidiese que fuese desconectada la sonda alimenticia solicitado de manera insistente por su esposo a lo largo de 12 años.

Nadie más que uno mismo tiene derecho a decidir sobre su vida; así como en los casos que hemos mencionado podríamos decir que una persona tiene derecho a la vida, pero también tiene derecho a una muerte digna y si es a pedido y consentimiento de la propia persona se debe respetar su voluntad; por otro lado si los familiares son los que toman esta decisión es porque se encuentran en toda su capacidad física y mental, además de haber conocido al enfermo pudiendo saber que sería lo mejor para él o que hubiera decidido.

Francisco de Quevedo sostiene que vivir sin tener pleno uso de tus facultades es como si no vivieras, es mejor que no poseas vida de verdad. “Mejor vida es morir, que vivir muerto”.

Hablar de este tema es complejo y complicado. Pero retomando el ejemplo de Sócrates podríamos entender por qué él murió

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (30 Kb)
Leer 18 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com