Teatro Y Sociedad

El teatro y la Sociedad

Analizando la sociedad nos encontramos muchos problemas con los cuales nos toca vivir y aparte de lidiar con ellos poder encontrar la forma de sobre llevarlos.

Desde el teatro podemos encontrar una forma de decir lo que no nos gusta de la sociedad y liberarnos de una u otra forma, de todos esos “problemas”, que ahora nos acogen. El concepto de teatro constituye un fenómeno sociocultural de gran importancia desde su nacimiento en la Grecia Clásica, tanto como reflejo de las inquietudes de cada época como por su potencial generador de cambio social. A lo largo de su trayectoria histórica, el fenómeno teatral ha ido adoptando diversas formas y contenidos. En nuestro contexto actual, el teatro contemporáneo de carácter vanguardista y alternativo, constituye un espacio de creación de nuevos discursos, ideas, símbolos y representaciones, que poseen la aspiración de proporcionar respuestas propias a los problemas y conflictos que se les plantean

a los individuos en las sociedades contemporáneas. Lejos de ser un fenómeno marginal, se trata de un espacio simbólico de construcción de nuevos significados y sentidos, que busca encontrar un lugar desde el cual consolidar y legitimar su propio discurso. En el actual teatro se conjuntan las últimas tendencias presentes en las distintas artes, adaptandose en este espacio de creación escénica la fusión de artes plásticas, medios audiovisuales, danza, música, etc., en la línea de los nuevos géneros artísticos de las instalaciones. Por todo esto, el teatro alternativo dentro del contexto social actual es un buen ángulo de visión para investigar procesos que caracterizan a la sociedad contemporánea.

El teatro es una forma por la cual podemos transmitir y recibir valores, además es una forma de crítica sana a una sociedad.

Por todo lo anteriormente expuesto, la crítica social se ha convertido en una de las temáticas más fuertes del teatro contemporáneo, porque dentro de una sociedad que a diario se aqueja, las formas artísticas se convierten en la “voz del pueblo”.

En este genero se manejan las emociones, un poco más, que en el género poético, por que aquí no solo cuenta la emoción del público asistente a la obra de teatro sino también el trabajo con las emociones que requiere la interpretación del actor, está también en conexión con su modo de relacionarse con el mundo en general. De ahí la importancia que posee para los actores el desarrollo de su capacidad de ser consciente de, además de sí mismos, de su cuerpo y emociones, también de su entorno, de las personas y de las cosas que les rodean, para poder estar perceptivos ante ellas, para poder “dejarse afectar” por ellas y reaccionar. En este sentido, los profesores de interpretación insisten en la necesidad de dar importancia a las cosas

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