Un Caso Comun Nada Especial

Nos habla de un joven universitario que mostraba un gran interés por los estudios pero por una decepción que sufre pierde el interés por los mismos, podría decirse que este joven no era de los que avergonzaran a los de más cuando se hacen participaciones en las clases es decir el principal obstáculo al que nos enfrentamos en esta situación son los propios estudiantes, es decir que cuando un miembro de un grupo opina sobre un punto importante de la clase los demás hacen comentarios inadecuados y poco agradables hacia la persona que está hablando, podemos afirmar que en nuestra sociedad se siguen repitiendo estos patrones de conducta entre los estudiantes dentro del salón de clases y fuera de el.

En este tema encontramos una frase muy importante que nos menciona que “La universidad no es otra cosa que una fabrica para entrenar aprendices y procesar certificados académicos”… (goodman, 1962) Es decir que solo se les da la teoría pero sin llevarla a la práctica es solo para adquirir un documento, en otras palabras los docentes solo preparamos a los alumnos para que respondan a situaciones imaginarias y no a las reales. A pesar de que el tiempo sigue avanzando y cambiando la concepción de la universidad que tiene la sociedad es la misma de una escuela de educación básica aun que para los estudiantes no es válida ya que para ellos es una forma libre en la cual pueden aprender de la manera que mas prefieran.

Pero que qué pasa en la escuela que los niños y jóvenes se ven en la necesidad de aprender respuestas mecánicas para pasar pruebas aún más estandarizadas? Sucede que los contenidos que ofrece se han desvalorizado a los ojos de los estudiantes, se antojan desligados de su contexto y sin aplicación práctica en su vida presente y futura.

Los alumnos, por no calificarlos como estudiantes, se enteran que al día siguiente hay exámenes. Esa noche se ponen a repasar los temas abordados, revisan todo lo que no hicieron en un bimestre, incluso formulan mecanismos para aprenderse las respuestas de manera textual, y después de que ven su boleta, una sonrisa se

dibuja en su rostro. Pero cuestionémosles sobre los contenidos y es muy probable que no lo recuerden, ese fenómeno no es culpa de ellos sino de los docentes y del mismo sistema que exige ese tipo de contestaciones.

Los docentes debemos propiciar un ambiente donde la reflexión y la crítica sean la panacea del nuevo ciudadano. Un hombre capaz de cuestionarse, deliberar y ofrecer soluciones a sus problemas personales y contextuales. ¿Cómo lograrlo? Empezando a reflexionar y comprender en uno mismo.

goodman, p. (1962). UN CASO COMUN, NADA ESPECIAL. En P. GOODMAN. compulsory misedecation .

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