Aquellos que no pueden hablar

UNIVERSIDAD NACIONAL DEL CENTRO DEL PERÚ

Aquellos que no pueden hablar

Jhordana Abigaí Aguilar Tinoco

En la actualidad existen muchas personas que ven a los otros seres vivos como objetos, Singer afirma que “muchos de nosotros pensamos únicamente en otros seres humanos cuando hemos de decidir qué hacer” (Warburton, 2013, p. 253), pues solo velamos por la seguridad de nuestra misma especie dejando de lado en este caso a los animales, poco nos importan sus necesidades. Según Warburton (2013, p. 253), haciendo mención a Singer manifiesta que “los animales pueden sufrir, y su sufrimiento debería tenerse en cuenta”, basta ser conscientes de ello para evitar todo tipo de maltrato hacia éstos, sin embargo, muchas personas se muestran insensibles al respecto, Singer denomino a este tipo de personas especeístas (Warburton, 2013). Actualmente en el Perú existe una ley de protección y bienestar animal, pero no debemos confiarnos que dicha ley resolverá el problema del maltrato animal, pues es una ley que no tiene mucha validez pues existen casos en las que no se ha aplicado a pesar de contar con pruebas sobre dicho maltrato animal.

El maltrato animal al ser un acto inhumano debería ser un tema que resulte alarmante, por el contrario, para muchos es normal, por ello debemos tomar conciencia de que no es necesaria una ley para hacer lo correcto, en este ensayo presentaré posibles medidas para evitar el maltrato animal como: conocer las leyes, educar a los hijos, apoyar a refugios de animales y reducir el consumo de alimentos derivados de animales.

En primer lugar debemos tomar en cuenta denunciar, Díaz (2013, sección de desarrollo, párr. 32) manifiesta que “no sigamos haciéndonos los ciegos y denunciemos la violencia animal donde esté ocurriendo, en su casa, en la del vecino, en la de cualquier persona”, no pensemos que nuestra acción no hará gran diferencia y no esperemos a que otro lo haga, por el contrario al hacerlo estaremos dando el ejemplo al resto y a su vez los estaremos incentivando a prevenir el maltrato animal, pues si nos quedarnos de brazos cruzados nos convertiremos en cómplices de dicho acto inmoral, para ello debemos “conocer las leyes sobre el maltrato animal (…), así como conocer el castigo de estas acciones” (Sánchez, 2018, párr. 21), esto ayudará a que nuestra denuncia sea escuchada, al conocer dicha ley podremos hacer valer los derechos de los animales y del mismo modo podremos darle el castigo respectivo a aquella persona que esté realizando este acto tan detestable, para que no vuelva a reincidir, así mismo del alguna forma haremos saber a las demás personas de la existencia de dicha ley y que además esta tiene valor, de esta forma disminuiremos el maltrato animal, pues no basta con acudir a cualquier comisaría, en el Perú muchas veces no te toman enserio, al ser está una ley reciente muchos la desconocen, incluyendo autoridades.

Además, según Olvera (s.f.) “llevar una mascota a casa no es un asunto que se tome a la ligera, ya que hay que brindarles atención, compañía, así como atender sus necesidades físicas” (párr. 8). Esto me recuerda a una pequeña frase que dice que “la educación viene de casa”, pues se ha evidenciado casos donde las personas que realizan actos de maltrato animal han tenido problemas en la infancia, por ejemplo eran hijos de personas abusivas y por ende brindaban el mismo trato que recibían, así mismo como lo hacen con los animales lo pueden hacer con personas e incluso pueden ir aumentando su grado de maldad, y solo por mencionar uno de los tantos ejemplos de que “la educación viene de casa”, por lo tanto si queremos evitar el maltrato animal debemos empezar educando a nuestros hijos, así como inculcándoles la responsabilidad, si ellos tienen animales debemos enseñarles a brindarles los cuidados necesarios, también enseñándoles a tener empatía hacia dichos animales, demostrándoles que al igual que nosotros tienen sentimientos y  haciéndoles entender que también sufren y sienten dolor, pues según Schweitzer (s.f.) solo basta saber que los animales sienten dolor para considerarlos como igual.

Por otro lado, debemos apoyar a refugios de animales. Según Voltaire (s.f.) “Es increíble y vergonzoso que ni predicadores ni moralistas no eleven más su voz contra la bárbara costumbre de asesinar animales (…)”, entonces no solo deberíamos apoyar económicamente, sino también haciéndonos presentes en marchas o por medio de redes sociales y participando en campañas que apoyen a dichos animales. De esta manera fomentaremos la sensibilidad de las personas ante los animales y del mismo modo incentivaremos a que estos también apoyen.

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