CRITERIOS DE MOVILIDAD URBANA ANTE LOS CONFLICTOS GENERADOS POR LA TUGURIZACION DE ACTIVIDADES COMERCIALES

UNIVERSIDAD NACIONAL DE TRUJILLO[pic 1]

FACULTAD DE INGENIERIA

Escuela Académico Profesional de Arquitectura y Urbanismo

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Título de Ensayo

CRITERIOS DE MOVILIDAD URBANA ANTE LOS CONFLICTOS GENERADOS POR LA TUGURIZACION DE ACTIVIDADES COMERCIALES

Autor:

NARRO ESQUIVEL, Bryan Jean Piere

Curso:         Prácticas Pre Profesionales II

Asesor:         Arq. Carlos A. Moreno Ahumada

TRUJILLO – PERÚ

2018

CRITERIOS DE MOVILIDAD URBANA ANTE LOS CONFLICTOS GENERADOS POR LA TUGURIZACION DE ACTIVIDADES COMERCIALES

En los últimos años la expansión de las actividades comerciales en el Centro Histórico de Trujillo como caso especial y en otras ciudades han tenido un comportamiento que responde a la simple causa - efecto de: si un equipamiento o infraestructura arquitectónica se ubica en algún punto de la trama, en todo su contexto inmediato se implantan actividades comerciales que puedan satisfacer algún requerimiento de esta o actividades que tengan algún fin común, esto ha llevado que en muchos sectores del Centro Histórico se  pierda el concepto de ciudad pensada para el peatón y por ende de los criterios de diseño que permiten lograr la mejora de la movilidad urbana. Aparte de ello es necesario resaltar que este ordenamiento ha venido generando que los diferentes ejes se caractericen por una tipología comercial establecida como: ópticas, farmacias, imprentas, restaurantes, consultorios, venta de ropa, etc. Del mismo modo la cantidad de establecimientos comerciales que pueden existir en cada eje esta normado bajo la gran demanda y competitividad comercial que existe en cada zona de estructuración, llegando en algunos sectores a considerarse desmesurado o tugurizado generando muchos problemas urbanos, ambientales y sociales pero sobre todo de atascos vehiculares; cuya no actuación o inadecuado manejo implicaría un agravamiento muy importante de la situación; estos numerosos problemas se evidencian cuando uno realiza alguna visita al Centro Histórico de Trujillo.

Dentro de la problemática existente se tiene la proliferación del comercio informal en sus alrededores de los ejes comerciales, lo cual trae consigo una interferencia de la circulación tanto peatonal como vehicular; también se evidencia que los carriles o vías de tránsito vehicular son utilizados como estacionamientos por el deficiente servicio de este en el centro histórico. El incremento de las actividades comerciales en edificaciones que poseen carácter monumental, poniendo en muchos casos su estado en conservación en niveles de vulnerabilidad, ya que estas edificaciones no cuentan con la infraestructura adecuada para los rubros existentes de comercio haciendo omisión de las normas anti-incendios y de seguridad, ni tampoco se provee su correcto mantenimiento.

Esta problemática que se desencadeno está afectando a la degradación de la movilidad urbana cuyo afectado principal es el peatón; debido a que las personas transitan por el centro de la ciudad con el fin de realizar una serie de actividades de su interés como trabajar, estudiar, hacer compras, conocer y visitar. Pero que en nuestros días y realidad se dan con la sorpresa que estas actividades no se pueden realizar en las mejores condiciones, ni tampoco lo hacen a gusto ya que no encuentran confort en estos lugares por la carencias o degradación de los criterios que engloba la movilidad urbana.

Existen muchos autores que definen el concepto de movilidad urbana, pero todos concuerdan en que se basa en las relaciones entre peatones, automóviles y vías públicas, como elementos constituyentes del espacio público. El concepto de movilidad es amplio y complejo. Introduce una serie de variables que van más allá de los desplazamientos. A diferencia del transporte, la movilidad aborda no es solo infraestructura y vehículos, sino que incorpora condiciones sociales, políticas, económicas y culturales de quienes se movilizan (Arrue, 2009), para ser más específicos involucra o hace participe al peatón. Aunque “las ciudades se alimentan, cambian y se reproducen a partir de la movilidad de su habitantes” (Kaufmann, 2008), la construcción de este concepto no ha sido simple. Por el contrario, existen varias aproximaciones con significados y abordajes diversos como la del Arquitecto Jan Gehl.

Jan Gehl viene realizando urbanismo conforme a sus postulados de movilidad urbana desde los años 60, cuando las ciudades comenzaban su crecimiento imparable y la producción en serie y el automóvil tomaban el mando en el diseño urbano pero siempre con la escala humana en mente llevo a cabo una auténtica revolución en Copenhague alrededor de la bicicleta y la peatonalización del centro urbano. Su principal idea de diseño urbanístico gira en torno a retomar a la persona como unidad de medida, en vez de utilizar el llamado “modelo Brasilia”, en el que la ciudad se diseña desde el aire. En este contexto, el arquitecto abordó cinco consejos que explican sobre cuál cree que es el camino a seguir para tener ciudades habitables, saludables, seguras y sostenibles.

Primero se plantea “Detener la construcción de arquitectura barata para la gasolina”, este consejo se basa en que siempre se han hecho ciudades de tal manera que las personas estén casi obligadas a sentarse todo el día en sus autos, en sus oficinas o en sus casas, lo cual ha causado graves problemas de salud. Afirmándose en un estudio donde se obtuvo que quienes viven en el centro de las ciudades tienen una mayor esperanza de vida que quienes viven en la periferia porque durante su vida tienen la posibilidad de caminar en una mayor cantidad de veces para hacer sus trayectos diarios.

El segundo consejo plantea “Hacer de la vida pública el eje del diseño urbano”, definido en tres ejes principales: caminar más, pasar más tiempo en el espacio público y salir de los refugios privados; todo esto con espacios públicos que inviten a las personas a tener una vida única y variada como en una ciudad sostenible. Como tercer punto tenemos el “Diseñar experiencias multi-sensoriales”, basado en que las ciudades para aprovechar nuestras capacidades deberían ser construidas en torno al cuerpo y los sentidos de los seres humanos para que puedan vivir su ciudad en una escala acorde a sus capacidades máximas para así mantener los sentidos activos y por ende sentir una sensación agradable.

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