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Complejo termoelectrico ventanas

Felipe orellana mandujanoEnsayo11 de Septiembre de 2018

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Complejo

Termoeléctrico

Ventanas

Felipe Orellana Mandujano

 Agosto de 2018

Pedagogía en Historia y Geografía

Universidad de Playa Ancha campus San Felipe

Empleo de TICS para la vida académica

Abstract

En este trabajo, se presenta a grandes rasgos en que ha consistido la problemática de la actividad del complejo termoeléctrico ventanas, tanto para la comunidad aledaña como también para determinar el impacto tanto ambiental, político y social por el rol de la central termoeléctrica.

Es por ello que se determinara un resumen del conflicto a lo largo de los años, su desarrollo, características, impacto y otros puntos peculiares de este.

Así, se podrán caracterizar tanto a los actores involucrados en dicha disputa, como el impacto generalizado, así como otros puntos a destacar.

Contenido

Resumen y Antecedentes del conflicto        1

Actores involucrados        3

Derechos en juego        5

Conclusión        8


Figura 1        2

Figura 2        5

Figura 3        6

Resumen y Antecedentes del conflicto

La central Termoeléctrica Ventanas, ubicada en la Bahía de Quinteros, comuna de Puchuncaví, provincia de Valparaíso, Quinta Región, está conformada por 4 termoeléctricas de la empresa AES Gener. Ventanas 1, puesta en servicio en 1964, Ventanas 2, en 1977, las cuales cuentan con una potencia combinada de 340 MW. Posteriormente se incorpora la unidad “Nueva Ventanas” (Ventanas 3), que inicia su tramitación ambiental en Julio del 2006, la cual produciría 250 MW y consideraba una inversión de US$317 millones, la cual comenzó a operar en 2010. Finalmente se sumó la central Campiche (Ventanas 4) en el 2013, que significó una inversión de US$550 millones, y aportaría 270 MV. De esta manera, el complejo Ventanas se convierte en el más grande de Chile, con una potencia de 885 MW.

Puchuncaví es una de las comunas más contaminadas de Chile y de mayor incidencia de cáncer, particularmente a causa de la presencia de metales pesados como arsénico y plomo, tanto en el aire, agua y suelo. La zona fue declarada saturada por anhídrido sulfuroso en 1993.

Ventanas 4 en particular, y el Complejo Ventanas de AES Gener en general, no han estado exentas de polémica, pues se desenvuelven en una de las zonas del centro del país que presentan mayores niveles de contaminación ambiental, donde conviven numerosas empresas de gran envergadura y de diverso tipo. De hecho, dado los numerosos episodios de emergencias ambientales por polución, parte importante de la comunidad de Ventanas y otras localidades puchuncavinas aledañas se han manifestado permanentemente contrarias al desarrollo de nuevas plantas de procesos en el lugar.

Mediante un comunicado de prensa, la empresa reparó en el cumplimiento de la norma ambiental por parte de Ventanas 4. “En línea con el compromiso de la Compañía con el medio ambiente y de acuerdo con la legislación vigente, Ventanas IV cumple con todos los requisitos exigidos por la autoridad respecto de las nuevas normas de emisión de para termoeléctricas, cumpliendo con los más alto estándares en tecnología de abatimiento de emisiones”.

Y agrega que: “se ha desarrollado un profundo trabajo con la comunidad para consensuar mejoras en la infraestructura comunitaria, capacitaciones labores, contratación de mano de obra local y fomento a la educación y el deporte, en torno al proyecto y al Complejo en general. Con esta nueva unidad, AES Gener da una muestra más de la consolidación de su plan estratégico de crecimiento, construcción y operación, contribuyendo al crecimiento del país”[1]. Destacando esto último como un comunicado de la empresa en el año 2013, en vistas de la conformación de Ventanas 4.

      [pic 1]

Figura 1  (www.eldesconcierto.cl)

Una discusión que viene siendo planteada desde hace décadas, pero en la cual encuentra un punto culmine en el año 2005, cuando comienza el proyecto de Ventanas 3 o “Nueva Ventanas”, a lo que trajo consigo un sinfín de problemáticas producto de la ampliación de este complejo industrial.

Entrarían al debate diferentes organizaciones sociales, al igual que entes gubernamentales, políticos como también organizaciones de índole ambiental, así destacando el consejo ecológico de Puchuncavi, OLCA, Oceana y Terram, siendo esta última fundación una de las precursoras de este conflicto, con el siguiente comentario: “El proyecto utilizaría petcoke para producir energía, combustible más barato que el carbón, pero altamente contaminante. Se publica la columna de Paola Vasconi, Coordinadora del Programa de Medio Ambiente de la Fundación Terram titulada “Petcoke: ¿Combustible o residuo peligroso?”[2], destacando el hecho de la presencia de contaminantes utilizados o emitidos por la termoeléctrica.

Una problemática que afecta el diario vivir, en donde la mayoría de los habitantes de la comuna han hecho sentir su malestar, siendo amparados por grupos ambientalistas y por autoridades, pero aun así la empresa haciendo vista gorda justificándose con oportunidades de empleo que puede entregar y otros aspectos, pero que en desmedro chocan con las opiniones de la comunidad que luchan tanto por su salud, como por la descontaminación de su espacio, que afín y al cabo es su más grande fuerte de ingresos, en lo que sería el mar. Se destaca además que cientos de bañistas disfrutan de las aguas de la playa Ventanas durante cada verano, muchas veces desconociendo el riesgo de están tan cerca de las aguas que competen directamente al complejo industrial.

Es un debate que da para mucho más, y que es muy complicado que pueda acabar.

 

Actores involucrados

Dentro de este conflicto, existen diversos actores que se han hecho participes del conflicto, estando en su mayoría en desacuerdo con la implementación de nuevas centrales termoeléctricas en lo que sería el complejo Ventanas. Estos entes han estado constantemente dando a conocer su punto de vista al problema, trayendo consigo diversos puntos que aportan al desarrollo de la pugna, en el cual se evidencia el fervor por el cual se está dando la lucha. Desde sindicatos de pescadores artesanales o inclusive dirigentes vecinales, pasando por fundaciones de protección ecológica, llegando incluso a las autoridades comunales, y claro, sin excluir a la empresa incursora de este proyecto tan aludido, el cual ha sido precursor de la discordia de diferentes sectores de los cuales detallaremos algunos.

  • AES Gener: AES Gener es la segunda empresa generadora más importante de Chile en términos de capacidad instalada, con 5.795 MW en operación a diciembre de 2016, incluyendo coligadas y filiales en el extranjero.  Es una empresa que aprovecha sus plataformas de electricidad y conocimiento para proporcionar soluciones energéticas y de infraestructura en los mercados que opera: Chile, Argentina y Colombia. Pertenece a Inversiones Cachagua Ltda., filial de AES Corp., empresa global de energía e infraestructura que desarrolla negocios en los cinco continentes y que cuenta con oficinas centrales en Estados Unidos[3]. Esta empresa ha estado en el ojo del huracán durante mucho tiempo debido al polémico proyecto de ampliación de la termoeléctrica Ventanas, así como de las emanaciones de esta y residuos que puedan arrojar al mar debido a su actividad. Por lo cual la empresa en su mayoría desmiente.
  • Oceana: Es la mayor organización internacional dedicada exclusivamente a proteger los océanos del mundo. Oceana fue creada en 2001 por un grupo de fundaciones: The Pew Charitable Trusts, Oak Foundation, Marisla Foundation (anteriormente Homeland Foundation) y el Rockefeller Brothers Fund. Desde su fundación, Oceana ha logrado más de 100 victorias y protegido más de 1 millón de millas cuadradas del océano[4]. Esta organización ha estado fuertemente activa en el conflicto, con diversos estudios y trabajos que dan cuenta del daño que está ocasionando este complejo industrial en las costas de Puchuncavi.
  • Fundación Terram:  Fundación TERRAM nace en 1997 fruto del esfuerzo de un grupo de profesionales provenientes de distintos ámbitos, los cuales motivados por la necesidad de plantear nuevos desafíos para el país y encontrar respuestas, políticas, democráticas, sociales  y económicas a problemas públicos los que hasta entonces no habían sido adecuadamente abordados, respetando además los intereses ciudadanos. Fundación TERRAM se inspira en la idea de que los problemas ambientales, punto de partida de la reflexión sobre sustentabilidad, son antes que todo problemas públicos cuya solución no será posible sin una base democrática, expresada en un debate amplio y participativo. Movida por estas ideas, Fundación TERRAM tiene como objetivo reflexionar sobre políticas públicas adecuadas a los nuevos desafíos, inspiradas fuertemente en la afirmación y la promoción de la democracia y la justicia, el posicionamiento de la perspectiva ecológica, la sustentabilidad y la eficiencia como criterio central de los asuntos económicos, aportando desde una instancia profesional y técnica, capaz de construir nuevas bases para las políticas públicas y de confrontar el discurso tradicional, asumiendo plenamente la complejidad de nuestra época[5]. Esta fundación, al igual que Oceana, se ha visto fuertemente involucrada en este conflicto principalmente elaborando estudios en el sector de la Greda, dando a entrever de la toxicidad en el aire debido a las emanaciones de esta planta.
  • Ilustre Municipalidad de Puchuncaví: Se ha vuelto participe, debido a los diversos reclamos de los habitantes de la localidad, pidiendo el cese de las funciones del complejo Ventanas. El alcalde Agustín Valencia, junto a concejales diputados.
  • Consejo Ecológico de Puchuncavi: Este consejo está integrado por ingenieros ambientales, abogados, dirigentes vecinales, empresarios turísticos, concejales entre otros; en donde se buscan mejorías en términos de problemáticas ambientales que puedan estar ocurriendo en la zona.
  • OLCA: Esta organización  asesora a comunidades en conflicto, para potenciar sus capacidades de gestión a favor de sus derechos ambientales. Realiza un seguimiento de conflictos ambientales, desarrolla instrumentos de gestión de éstos; investiga y difunde aspectos relacionados con la protección ambiental y los derechos ciudadanos; realiza catastros a nivel sectorial, investigaciones específicas y promueve la transferencia metodológica en la gestión de conflictos[6]. Para ello entregan capacitación a las comunidades, asesoría, entregan información y perfeccionan metodologías para mantener informada a la comunidad.
  • Organizaciones Sociales: En este punto cabe destacar a todo el patrimonio social de la comunidad en donde se pueden encontrar sindicatos de pescadores artesanales, juntas vecinales, agrupación “mujeres zona de sacrificio”, movimientos sindicales de caletas, entre otros tantos. Estos grupos ya serían los mismísimos habitantes de estas zonas afectadas, los cuales tienen mayor conocimiento in situ de la problemática en cuestión. Como también el Comité de defensa de la Greda.

[pic 2]

Figura 2

Derechos en juego

Este conflicto ha traído, como se ha mencionado a lo largo de este trabajo, un sinfín de problemáticas. Anteponiendo esto, se ha de enfatizar que las demandas en general de la comunidad puchuncavina alude relación al desmedro de derechos necesarios para el desarrollo de una vida en comunidad de una forma acorde. Estos derechos recaen en necesidades básicas de las cuales la sociedad pueda desenvolverse en plenitud, derechos que serían básicos para cualquier actividad del diario vivir, dando más énfasis en este conflicto de carácter ambiental. Principalmente estos serían dos derechos en cuestión.

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