Cuento
Ignacio Muñoz TorresEnsayo27 de Septiembre de 2015
940 Palabras (4 Páginas)207 Visitas
LA MALA DECISIÓN.
Todo comenzó esa noche de invierno, mis hijos esperaban con ansias que navidad llegara, querían esos juguetes modernos que todo niño desea con todo el corazón, para el colmo yo era un hombre desempleado, son muchos problemas económicos, mi compañía cayó en la quiebra y era casi imposible poder hacer algo al respecto, mi esposa es una simple ama de casa y mi casa estaba a punto de ser embargada por adeudos que tenia, en si estaba en quiebra.
No tenía el valor suficiente para decirle a mi familia que era lo que sucedía por lo tal me sentía tan cobarde y no sabía qué hacer, no encontraba soluciones, además era cuestión de días para que la navidad llegara… ¡Tengo que encontrar una solución rápido!
Todas las tardes como estaba desempleado fingía que salía a trabajar para que mi familia no se preocupara, y en ese tiempo pensaba sobre lo que pasaría y reflexionaba la situación.
Llegue a la decisión una de esas tardes tristes para mí en las que me tenía que esconder fingiendo que trabajaba perdiendo solo el tiempo que tenia, visitar a un viejo amigo de mi infancia que no lo veía en muchos años, cuando lo encontré la sorpresa que me llegue a dar.
Ese amigo que no terminó sus estudios porque era pésimo en las clases se dirigía en su camioneta último modelo hacia el colegio más caro de la ciudad y de él bajaba un pequeño niño.
Acelere mi paso para poder encontrarme con él y poder charlar para ver si me podía ayudar en algo, y cuando me pude acerca inmediatamente me reconoció, me invito a subir a camioneta.
Después de una larga platica sobre cómo nos iba en nuestras vidas y sobre la desafortunada situación en la que me encontraba y la desesperación que llevaba sobre mis hombros. Inmediatamente una gran sonrisa algo extraño apareció en su rostro, y me dijo: Yo podría ayudarte.
Me explico que él era traficante de drogas de un gran cartel del crimen organizado, y que así es como se ganaba su gran vida llena de éxitos y riquezas para poder tener un buen nivel de vida y para sacar a su familia adelante sin tener que preocuparse de cualquier cuestión económica.
Para ese momento era tanta mi necesidad de obtener dinero y mi desesperación era demasiada porque estaba preocupado por mi familia que sin dudarlo acepte, para lo cual él me llevo con uno de sus jefes.
Después de una buena presentación y amabilidad con su jefe, me explico que se trataba el negocio y de las reglas que tenía que cumplir dentro de la organización delictiva y así me dieron mi primera misión.
Fue el trabajo tan simple que pronto me llene de dinero, todo consistía en entregar cargamentos de drogas y armas por toda la ciudad, lo cual no era tan complicado y me pareció muy fácil.
Pasaba los días y conseguía miles de pesos en semanas ya que en ese empleo te pagaban demasiado dinero por las entregas, al pasar el tiempo llego la navidad y no solo le di los juguetes que mis hijos deseaban por mucho tiempo, mi esposa se llevó mejores regalos de mi parte. Pero pronto ella sospecho de que algo sucedía, no fue nada difícil decir que a la empresa le iba demasiado bien pero a la vez me sentí mal ya que le estaba mintiendo a mi esposa.
Pero lamentablemente después los trabajos se volvieron cada vez más riesgosos, por lo cual intente retirarme de la organización delictiva, a cambio recibí una golpiza por que tenían reglas las cuales eran si entras al negocio ya no sales y yo tenía que respetarlas.
El jefe me dijo que no me preocupara que si me arrestaban el me sacaría de la cárcel que tenía todo controlado que nada malo me pasaría si continuaba con ellos, pero que si no cooperaba mi familia iba a desaparecer y yo sabía que con esas personas no se jugaba.
Cada momento me desgastaba más seguir adelante pero pues no había otra forma de salir de esta situación no hallaba la forma de poder salir de eso por lo cual cada día era mas frustrante.
A los dos meses mi jefe me obsequio una gran camioneta por haber continuado en la corporación, era hermosa nunca imaginaba que tendría un coche así pero tenía el temor de que le diría a mi esposa no sabía cómo explicarlo por lo cual decidí mentirle de nuevo, inmediatamente se me ocurrió decirle que es de la empresa para la que trabajo y que a todos nos dieron una.
...