DURMIENDO CON LOS ZAPATOS PUESTOS

DURMIENDO CON LOS ZAPATOS PUESTOS

“Cuando mataron a mi padre ahí estábamos rezando el rosario en el corredor y le agachan la cabeza a mi mamá, le pegan el disparo y luego un bandido llega y lo decapita ahí delante de todos nosotros” 1, es crudo el testimonio que da Pastora Mira, habitante de uno de los municipios que más se ha visto envuelto en el conflicto armado de Colombia: San Carlos, Antioquia.

Según el Centro Nacional de Memoria Histórica-CNMH desde ahora-, el periodo donde más se empeoró el conflicto armado y su posterior producto, el desplazamiento, es a finales noventas y principios del año 2002 sin embargo, esta forma de violencia se venía presentando desde hace más atrás, en 1965 con la construcción de centrales hidroeléctricas, los sancarlitanos se ven obligados a moverse, pero no por hostilidad como tal, de allí que se hable de un desplazamiento negociado (2011: p.46)

En paralelo a la fundación de las centrales hidroeléctricas, se debe tener en cuenta la consolidación de los actores armados antagonistas de esta trágica historia: las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-desde ahora FARC- en 1966, estos grupos se ven a sí mismos como una medida de precaución para contrarrestar el movimiento de dictaduras militares en America Latina que estaba entrando en vigor como una medida frente al comunismo (CNMH,2013: p.40).

El desplazamiento forzado se prolonga hasta 1978, desde tal año, la hostilidad armada se hace presente en zonas como el bajo Magdalena y los grupos paramilitares inician un proceso de asesinatos a políticos y desplazamientos forzosos de individuos e inclusive de familias completas, lo cual tomaría lugar hasta 1986, que de forma muy sucinta se podría llamar la “boca del lobo” de la hegemonía guerrillera (CNMH, 2011: p.46).

Ya que se tiene un conocimiento general del origen de los desplazamientos en la región de San Carlos, se puede analizar las dinámicas del periodo más crudo de su historia:

Valiéndonos de una de las principales instituciones nacionales en cuanto a la recopilación de la historia del conflicto armado en Colombia, el CNMH, podemos hacer un recuento de los principales pormenores ocurridos durante 1986 y 1997, descrito como un “desplazamiento preventivo y silencioso”(2011:p.60):durante este periodo se tiene conocimiento del desplazamiento forzado de 207 personas por parte de los grupos paramilitares , en contraposición, líderes cívicos de la zona buscan una opción que cesara las hostilidades de estos grupos y los incluyera en la política ,lo cual da lugar al asesinato sistemático de los pertenecientes a este grupo cívico(2011,Pp.60-63), tengamos esto en cuenta porque el asesinato o desplazamiento de estas figuras dan lugar a la siguiente etapa, conocida como “éxodo”(2011,p.67).

La etapa del éxodo comprende entre 1998 y finales del 2006, este periodo puede ser descrito con base a las siguientes masacres: en primer lugar tenemos la ocurrida en 1998 en el corregimiento del Jordán, que se caracteriza por un desplazamiento forzado por los grupos militares y algunos asesinatos; más adelante en 2001 tenemos las masacres de la cabecera municipal, caracterizadas por la irrupción de los paramilitares al casco urbano y el asesinato de varios integrantes de la comunidad; por último, en 2002,se los paramilitares atacan a una ambulancia y una volquta,dejando un saldo de 5 muertos.(CNMH,2015).

“La base de datos de conflicto armado en San Carlos procesada por MH permite constatar que los niveles de actividad guerrillera más altos de la historia regional se registraron entre 1997 y 2004. Se reconoce una tendencia hacia el escalamiento medianamente sostenida entre 1997 y 1999, que luego decrece progresivamente entre 2000 y 2004 con el avance territorial de los grupos paramilitares.” (CNMH,2011: p.71)

Contrastando el recuento que se ha hecho de la violencia armada y los desplazamientos forzosos con los tiempos más recientes de este municipio, queda clara la intención de los sancarlitanos de rendir un homenaje a las víctimas de la barbarie, un símbolo de lo anterior es el jardín de la memoria, aquí se encuentran dispuestas varias flores artificiales de distintos colores que dentro llevan el nombre de una de las numerosas víctimas de la violencia(CNMH,2015).

El Jardín de la Memoria puede ser entendido como una invitación a los jóvenes y viejos para que no olviden su pasado, desafortunadamente, éste es una herida que sigue abierta mas no una cicatriz, las votaciones del 2 de octubre lo dejaron ver así: según la Registraduria Nacional Del Estado Civil, en San Carlos, Antioquia, 5.242 habitantes(un 37,59% de los habilitados) se presentaron a las urnas para votar entre el SI o NO a los acuerdos de paz, de los cuales 2.390 votaron a favor del SI, 2.679 a favor del NO,60 no marcaron su tarjetón y 95 fueron declarados nulos.

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