EDUCACION EN LA PANDEMIA

LA EDUCACIÓN EN PANDEMIA

 Dr. GIAN CORRADO PELUSO

La educación es central para cada uno de nosotros, define horizonte de trabajo que la persona pueda desarrollar en cualquier ámbito, la familia, colegio entre otros. La educación es la tarea de toda la existencia. Afirmaba un intelectual: “Si alguien te a educado, a sido con su forma de ser, no por sus palabras”. La educación es permanente.

El 12 de Diciembre del 2019, el papa había incentivando un pacto educativo, para dialogar sobre el modo en que estamos construyendo el futuro del planeta, porque cada cambio requiere un camino educativo, que haga madurar una solidaridad universal en una sociedad más acogedora, y aquí nace la idea de crear un evento mundial el día 14 de Mayo del 2020 que tiene como tema: Reconstruir un pacto educativo global. Con el fin de reavivar el compromiso con las jóvenes generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e incluyente, por una humanidad más fraterna.

Producto de la pandemia, se ha derrumbado aquel optimismo arraigado de la ciencia, provocando incertidumbre, resaltando la crisis que afecta a cada individuo, a todas las naciones y a todo el planeta. Todos formamos parte de esta aventura llena de ignorancia, desconocimiento, locura, razón y misterio, alegría y dolor. El peor año nunca visto. Para ello es importante aprender a leer los tiempos, que hace que uno no se conforme con cualquier cosa, o nos atrevemos a descubrir el mundo entero con nuestros hijos o acabaremos con un miedo paralizador. E incentivando a los jóvenes se cita: “Los chicos se mueven por una razón, hay que buscar, que es lo que los mueve. Hace falta por lo tanto que un educador encuentre a personas que vivan conscientes a las problemáticas globales. “Educar es amar”, esta frase hoy en día parece una frase sentimental , pero sin citar a filósofos actuales de este siglo y porque no a los del siglo pasado que decían: “Que solo pueden educar, quien ama al mundo, quien habita en el espacio de sentido”. Toda esta parte final, con la palabra amar, parece desconcertarnos porque concluyendo con todo, podemos decir que la palabra amar significa afirmar al otro, afirmar a la persona que va contigo al cual explica algo. De la mano de amar, la acompaña la palabra educar, que significa mirar la realidad con la conciencia qué hay un sentido en ella, y por lo tanto dando una esperanza para poder vivir.

Concluyendo con un punto final, con otro texto de Carrón: “Quien será capaz de volver a levantar el punto álgid, el punto candente de los jóvenes, así como el de los adultos”. Este es el desafío que tenemos todos nosotros ante la realidad nuestra generación y las escuelas y familias, partidos,etc.para despertar el “yo” de su apatía, aburrimiento que parece invencible, no basta una lección. Hace falta un adulto que con su vida sea capaz de provocar en los jóvenes un interés por su propia existencia, por su destino, pero concluía Carrón que era imposible encontrar adultos que no sean escépticos.

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