EDUCACIÓN PÚBLICA EN CHILE

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UNIVERSIDAD DE VIÑA DEL MAR

 INCLUSIÓN EN EL AULA DE CLASES

JORDAN BERRIOS

ASIGNATURA

EDUCACIÓN PÚBLICA EN CHILE

DOCENTE

ROBERTO MERINO OROSTICA

Introducción

La educación chilena es una de las más avanzadas en América Latina, tiene carácter obligatorio y se enfoca en la igualdad de educación y calidad, según el informe de proyecto internacional para la evaluación de estudiantes (PISA). Asimismo, el Ministerio de Educación (MINEDUC) es el organismo responsable de brindar esta educación obligatoria para las personas a partir de los 5 años hasta los 18 y se divide en: a) Preescolar, b) Básica, c) Media y d) Superior.  Este organismo asegura un sistema educativo inclusivo y de calidad que contribuya a la formación integral y permanente de las personas y al desarrollo del país, mediante la formulación de políticas, normas y regulación desde la educación parvularia hasta la educación superior^[1].

Una parte que conforma a la educación chilena es la educación especial siendo esta la recepción y respuesta educativa a todos los alumnos, más allá de sus características intelectuales, psicológicas, culturales, donde trabaja desde el modelo de integración dentro de las políticas educacionales, compuesto por los programas de integración escolar (PIE) Estos programas consisten en atención educativa diferenciada dentro de la escuela, para alumnos con discapacidad intelectual, discapacidades sensoriales y problemas de relación y comunicación. Así mismo, se planteó una política de integración, al presentar a la Educación Especial como una rama dedicada a la atención de estudiantes que presenten Necesidades Educativas Especiales (NEE), con el propósito de asegurar aprendizajes de calidad y equidad a niños/as,  y jóvenes, de manera que  puedan acceder al currículum nacional en igualdad de condiciones y oportunidades. Esto está sujeto a políticas públicas para que se cumpla esta educación que son la Ley General de Educación y la Ley 20.422^[2]. 

A su vez, el MINEDUC señala que “La integración de estudiantes con necesidades educativas especiales en colegios regulares, durante 2014 se incrementó en un 16,3 por ciento el número de estudiantes que participaron de Programas de Integración Escolar, PIE, alcanzando a un total de 251 mil 151 alumnos, distribuidos en cuatro mil 887 establecimientos con convenio vigente. De ellos, 58 mil 331 presentan necesidades educativas especiales permanentes y 192 mil 820 presentan necesidades educativas especiales transitorias” ^[3].

Por otro lado, los estudiantes que tienen Necesidades Educativas Educacionales (NEE) son los que poseen Dificultades Afectivas Conductuales (DAC), que según el DSM-IV son trastornos con una clasificación categorial no excluyente basada en criterios con rasgos definitorios, que se pueden diagnosticar en la infancia, niñez o adolescencia. Es una manifestación individual de una disfunción comportamental, psicológica o biológica, que se manifiesta como resultado de una compleja desviación de la personalidad que entorpece el desarrollo armónico e integral de la persona, (López, A, 2002).

Existen varios trastornos provenientes de DAC, donde el foco de estudio del presente artículo se centrará en el trastorno o síndrome de Asperger y como este se inserta en el aula de clases. El Asperger es un trastorno que se inicia en la infancia y se encuentra dentro de los Trastornos Generalizados del Desarrollo. Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en el 2005 y hasta la fecha la cifra se mantiene entre los rangos de 3,6 a 7,1 por cada 1.000 niños y niñas entre 3 y 17 años, donde la cifra aproximada es de 16.216 niños y niñas sufren Asperger en nuestro país.

En las políticas educacionales en Chile están orientadas hacia una Integración que hace hincapié a adherir al alumno con NEE al grupo escolar sin prevalecer las políticas públicas de acuerdo a estas necesidades y el ambiente escolar donde entrará el alumno, a diferencia de la inclusión que integra de forma inclusiva en el ambiente educativo al alumno, es decir, se prevalece a la igualdad de los alumnos que tienen NEE y que están el programa PIE (Julio, López, Morales, Pérez & Rojas, 2014). Es por esto que es importante para este artículo dar a conocer como se incluye a un niño con Asperger en el Aula de Clase.

Por último, cabe señalar que la a relevancia psicológica del presente artículo se basa en hacer hincapié en la calidad de educación que se les entrega a los alumnos y alumnas con Asperger, el bienestar psicológico de ellos mismo dentro del aula de clases, y la inclusión igualitaria en el marco de respeto y empatía por el grupo directivo del establecimiento y por sus otros compañeros.

¿Qué es la integración escolar?

El enfoque de integración escolar incorpora a los estudiantes con discapacidad, educados en la escuela especial, a la educación regular, con la idea de entregarles un ambiente educativo “lo menos restrictivo posible” (Informe Warnock, 1978, citado en Julio et al., 2014), cuyas posibilidades dependían de como el alumno lograba adaptarse a una escuela que no cambiaba bruscamente su ambiente educativo (Thomas, 1997, citado en Julio et al., 2014).

 La estrategia de integración se implementó inicialmente a través de los Proyectos de Integración Escolar (PIE) los cuales consisten en atención educativa diferenciada dentro de la escuela para alumnos con discapacidad intelectual, discapacidades sensoriales y problemas de relación y comunicación. Este programa PIE no es obligatorio, es decir tiene un carácter optativo. “Existen cuatro modalidades de acción educativa, también optativas: a) Modalidad 1: el alumno participa de todas las actividades del curso regular y recibe atención especializada en el aula de recursos, a cargo de profesores especialistas, en forma complementaria; b) Modalidad 2: el alumno participa en todas las actividades del curso regular, pero en aquellas áreas o subsectores de aprendizaje en que requiere de adaptaciones curriculares más significativas, recibe apoyo especializado en el aula de recursos; c) Modalidad 3: el alumno participa en algunos subsectores de aprendizaje con su curso regular, pero desarrolla en el aula de recursos las áreas o subsectores de aprendizaje donde desarrolla un currículum adaptado a sus necesidades educativas especiales (NEE); y d) Modalidad 4: el alumno participa de un currículum especial asistiendo a todas las actividades en el aula de recursos y compartiendo con los compañeros de la escuela sólo en recreos, actos y otras ceremonias oficiales y actividades extra programáticas (Decreto Supremo 01, 1998 citado en Julio et al., 2014, p.3) ”. La política define un sistema de financiamiento a través de la subvención especial para los estudiantes que participan en los PIE y para inscribir a un estudiante en un PIE, éste debe contar con un diagnóstico clínico emitido por un profesional certificado por el Ministerio de Educación.

A pesar de los esfuerzo de la integración escolar por lo programas pie, estos cuentan con limitaciones que afectan directamente a los alumno PIE con NEE. Según el estudio de Barreras Culturales para la Inclusión: Políticas y Prácticas de Integración en Chile arroja percepciones negativas. Los docentes, directivos y estudiantes identificaban e individualizaban a los estudiantes que participaban en los Proyectos de Integración. La distinción entre ellos y el resto de los estudiantes se basaba en la discapacidad. “Pero sí se hace la diferencia, por ejemplo, ya por el nombre, a los niños se les dice tú eres PIE, y ellos están catalogado como PIE, todo el mundo sabe quiénes son los PIE, porque se les nota por las características” (Docente Especialista PIE TEL y Grupo Diferencial, Escuela B) (Julio, et al., 2014).

¿Qué es la inclusión?

La inclusión es un movimiento orientado a transformar los sistemas educativos para responder a la diversidad del alumnado. Es fundamental para hacer efectivo el derecho a la educación con igualdad de oportunidades y está relacionado con el acceso, la permanencia, la participación y los logros de todos los estudiantes, con especial énfasis en aquellos que, por diferentes razones, están excluidos o en riesgo de ser marginados. La inclusión significa hacer efectivo para todos y todo el derecho a una educación de calidad, con igualdad y participación. Para esto, es preciso transformar la educación general de los establecimientos educativos en instituciones que respondan equitativamente y con calidad frente a la diversidad, adoptando un cambio profundo en las percepciones y concepciones del profesorado frente a la inclusión y los PIE que se implementan en los establecimientos educativos con el fin de adaptar un aprendizaje para aquellos alumnos que tienen Necesidades Educativas Especiales y consigo las actitudes y prácticas pedagógicas, mediante las cuales se pase de la homogeneización a la diversidad. (Aldana, Sepúlveda & Torres, 2013).

El modelo de trabajo inclusivo en el aula

Para llevar a la práctica y concretar la inclusión en los colegios de los niños y niñas con NEE, se requiere:

1)  Una evaluación integral, que considere información sobre salud y educación.

2) Una evaluación que aporte información relevante para favorecer el desarrollo y aprendizaje de los alumnos/as con NEE. En todo este proceso es importante la participación de la familia.

Este modelo de trabajo inclusivo es más amplio que tan sólo la integración de estudiantes al aula regular. La Inclusión Educativa implica una mirada de la educación desde un enfoque participativo y de educación de calidad para todos y todas. La inclusión busca superar las barreras de diversa índole que tengan algunos sectores de la sociedad y que tengan relación con exclusión y desigualdad (UNICEF, 2001). Este enfoque no sólo se centra en NEE sino también en las necesidades de todos los miembros de la comunidad educativa, sin discriminar. Hoy se hace necesario cambiar la forma en que se integra a un estudiante con características distintas en los colegios regulares. Para el logro de procesos educativos inclusivos, el colegio debe responder a las diversas necesidades de sus estudiantes de manera diferente. De acuerdo a lo propuesto por Booth, la tendencia va desde la integración escolar (el alumno debería adaptarse a las características de la escuela) hacia la Inclusión Educativa (la escuela se adapta para dar respuesta a las necesidades educativas diversas de los alumnos).

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