ENSAYO SOBRE LA CONFERENCIA DE YOKOI KENJI

ENSAYO SOBRE LA CONFERENCIA DE YOKOI KENJI

Siempre hemos pensado que los países latinos son inferiores a las grandes potencias, por ejemplo, el que aborda en la conferencia Yokoi Kenji que es Japón. En realidad, somos igual o más inteligentes que ellos, no necesitamos de tanta teoría para poder hacer la practica con solo ver e imitar lo que están haciendo los demás podemos hacerlo y hasta superarlo. El problema es que nos hace falta diciplina a la primera cosa que nos orden ponemos excusas para no hacerlo, en cambio en países tan disciplinados como los asiáticos complementan su inteligencia con su diciplina, y es por lo que sus empresas son las líderes en el mercado mundial.

La diciplina en exceso según nos expone Yokoi es mala. Esto se debe a que en japón uno de sus pocos problemas es el suicidio, ellos están tan preocupados por cumplir con sus deberes que se les olvida disfrutar su vida, en cambio, los latinos siempre buscamos distraernos cada que tenemos la oportunidad. Entonces podemos decir que nuestra cultura es el antídoto para esa pobreza emocional del japones y el japones tiene la solución para ese problema de diciplina del latino.

Esta inferioridad de inteligencia que pueden tener los japoneses lo compensan con la diciplina. Por ejemplo, si ellos no le entienden a algo lo escriben y practican varias veces hasta que lo logren comprender, en cambio, los latino si no le entendemos a algo ni lo copiamos ni lo hacemos y esto lo vemos en la escuela cientos de veces. Los pilares de la diciplina japonesa son la organización, limpieza y puntualidad.

Otro problema de los latinos es la falta de integridad. Nos dejamos llevar por lo que aparentan las personas por fuera y nos llevamos una sorpresa cuando nos damos cuenta. Y también pasa con nosotros mismos somos unas personas que aparentamos ser alguien diferente con la gente que no nos conoce bien y cuando no nos sentimos observados por ellos nos descontrolamos para hacer lo que nosotros queremos. Y lo peor es que las generaciones más pequeñas que observan ese mal comportamiento de nosotros lo van imitando.

Este problema de imitar a los demás se ha hecho una práctica común en la cultura latinoamericana y por eso mismo es que no podemos tener esa disciplina que se necesita para complementar nuestra inteligencia. Nos quedamos con los malos hábitos de las personas y olvidamos los buenos hábitos que nos han enseñado.

En conclusión, los países latinos podríamos ponernos a la par de los países de primer mundo si supiéramos aprovechar la inteligencia de nuestra gente. En nuestro país podemos observar que por falta de compromiso y diciplina hemos visto tanto a familiares como a conocidos perder grandes oportunidades de cambios en su vida. Lo que busca la conferencia es tratar de cambiar esa forma de pensar conformista que tiene el latino promedio. Pero no todo es malo hay que destacar

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