Historia De Un Rescate

La mayoría de los chilenos conocen la historia de auge y posterior decadencia de nuestros ferrocarriles, la falta de financiamiento por parte del estado y malas políticas públicas ayudaron a que la mayoría de los servicios que alguna vez existieron en nuestro país, hoy sean sólo recuerdos.

Una gran cantidad de piezas ferroviarias yacen junto a las estaciones abandonadas en cientos de poblados que alguna vez estuvieron conectados por el tren, sin la voluntad de los últimos gobiernos para reactivarlos… y peor aún, sin la voluntad por parte de la Empresa de Ferrocarriles del Estado a que estos se conserven.

Peor es la historia de esos equipos que hasta hace muy poco aun rodaban por las venas de acero de nuestro país, y que hoy están detenidos silentes a la espera del chatarreo o que alguna agrupación sin fines de lucro le doble la mano al sistema, porque paradójicamente resulta más fácil realizar actos vandálicos en ellos que resguardarlos.

En el año 2001 llega a nuestro país una locomotora DEUTZ modelo KG275BS para realizar labores de mantenimiento en la red ferroviaria de EFE. fabricada en Alemania en 1968 para el ferrocarril de la mina Andaluza de Piritas en España. Originalmente de trocha métrica, prestó servicios sólo 5 años, quedando detenida en las cocheras de la estación Camas hasta 1980, donde pasó a manos de la empresa Constructora G & O. la que en 1995 se integra a la empresa Lain, parte del grupo OHL, y responsables de trasladar esta locomotora a Chile.

Sin embargo, en 2008, la locomotora queda detenida en la antigua estación de Osorno, sufriendo una serie de actos vandálicos, siendo esta pequeña maquina un sitio perfecto para drogadictos, grafiteros, alcohólicos, vagabundos o parejas que requerían un lugar de intimidad.

Observando esta situación, en 2011 se crea en Facebook el grupo “Salvemos la Deutz de Osorno”, preocupados por el deterioro constante que sufría la locomotora y con el objetivo de lograr un resguardo para ella. Este grupo sirvió por años como bitácora para evidenciar las gestiones que se realizaban para su rescate, los que resultaban gritos desesperados a un sistema sordo y despreocupado.

A inicios de diciembre de 2014, la locomotora aparece como tantas veces abierta, esta vez, era su compartimiento de motor y el depósito de combustible… el vandalismo llegaba a un punto en que pronto iba a ser irremediable, y es así, como un grupo de aficionados deciden actuar, pensando en los riesgos de perder como tantas otras veces, una pieza ferroviaria de alto valor histórico, ya que esta pequeña locomotora, es una de las dos únicas existentes en el mundo.

Una noche de Diciembre, a la luz de la luna llena comienza el rescate de la “virgen de la Esperanza”… baterías, focos y elementos eléctricos se compran e incorporan para poner en funcionamiento esta

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