La banca comercial en Venezuela

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD POLITÉCNICA TERRITORIAL DE FALCÓN “ALONSO GAMERO”

PROGRAMA NACIONAL DE FORMACIÓN CONTADURÍA PÚBLICA

UNIDAD CURRICULAR: SISTEMA BANCARIO VENEZOLANO

La Banca comercial en Venezuela

La historia de la banca comercial venezolana se remonta al  siglo XIX. Para el año 1825, se realiza el intento inicial,  para crear el primer banco denominado "Banco de Venezuela", de capital nacional, propuesta que no puedo ser consolidada. Posteriormente 14 años después nace un nuevo proyecto “Revenga” con miras a abarcar los países de la Gran Colombia, el cual también fracasó. En 1839, se fundó el Banco de Colonial Británico, fundado por William Ackers y dirigido por Leandro de Miranda, hijo de Francisco de Miranda, el cual existió hasta 1848. Pasado esto William Ackers junto con otros inversionistas crea el Banco Nacional de Venezuela con la finalidad de recaudar los ingresos aduaneros y cancelar el presupuesto nacional; además de facilitar descuentos y depósitos, pero para 1850 ya este banco había cerrado sus puertas. Durante el periodo de 1861 y 1883 se conforman y fracasan en repetidas oportunidades un Banco de Venezuela y el Banco de caracas, donde este al ser liquidado en su última oportunidad, se funda el Banco Comercial, el cual para el año de 1890 con capital privado pasa a ser el Banco de Venezuela que actualmente existe y es propiedad del estado.

Desde los inicios de la banca en Venezuela una de las necesidades que se buscaba solventar era la acuñación y puesta en circulación de monedas y billetes, ya que durante el periodo de 1821 y 1825 esto se realizaba en la casa de la moneda de Caracas y en Bogotá, tarea que para 1830 pasa a ser de los bancos en uno proporción luego del cierre de la casa de la moneda Caraqueña, pero todavía en su mayoría eran fabricadas en Inglaterra e importadas por Venezuela hasta 1885.

Luego de una pausa de dos décadas a partir de la creación oficial del actual Banco de Venezuela surge una nueva entidad bancaria que fue el Banco Comercial de Maracaibo, y es cuando a partir de 1916 llegan bancos extranjeros como The Royal Bank of Canadá, conocido después como Banco Royal Venezolano, Banco Internacional e Inter Bank hoy fusionado con el Banco Mercantil, The National City Bank of New York (City Bank) y el Banco Holandés Unido, denominado después Banco Continental hasta ser fusionado con el Banco Provincial. Entre 1925 y 1926 son fundados el Banco Venezolano de Crédito y el Banco Mercantil y Agrícola, hoy denominado Banco Mercantil, autorizados para la emisión de billetes ante la ausencia de un Banco Central junto con los Bancos Venezuela, Maracaibo, Caracas y Comercial de Maracaibo.  

Ahora bien para 1928 con una política dictatorial presidida por Juan Vicente Gómez, se crean los primeros bancos especializados que buscaban incentivar el sector agrícola y construcción de viviendas populares;  estos bancos fueron Banco Agrícola y Pecuario y el Banco Obrero. En 1937 se crea por ley el Banco Industrial de Venezuela con el objetivo de financiar e impulsar el desarrollo industrial del país. A este punto se empiezan a fundamentar las bases legales de la creación de los bancos, promovidas y asentadas por el dictador  Antonio Guzmán Blanco, las cuales fueron modernizadas por el ex presidente Eleazar López Contreras, de donde surge el Banco Central de Venezuela y  la Ley de Bancos, la creación de la superintendencia de Bancos (Sudeban) y el Consejo Bancario Nacional.

Al inicio de la década de los 50 surgen nuevas entidades bancarias como banco Provincial y Metropolitano fundados 1952, el Banco del Caribe en 1954, los bancos Occidental de Descuento y Exterior en 1956. En 1977 se aprueba una ley para incentivar la banca privada regional, impulsando en la década de los ochenta el inicio de operaciones de los bancos Agroindustrial Venezolano (actual Banesco) Zulia (luego Banco Progreso), Caroní, Plaza y Sofitasa, entre otros.

Por otra, la banca comercial venezolana no solamente está enfocada en la evolución de las instituciones bancarias, sino en una actividad dinámica que va de la mano con las políticas económicas aplicadas en el país, donde los factores macro y micro económicos crean un panorama que puede ser de mucho beneficio o perjudicial para la banca. Luego de la apertura petrolera de Venezuela al mundo donde se empieza a exportar crudo y se realizan convenios y negocios con capitales extranjeros. Hasta los inicios del año 1983 la moneda venezolana se caracterizaba por tener estabilidad y fuerza, pero es a partir del 18 de febrero de ese año, durante el gobierno de Luis Herrera Campins donde el bolívar sufre su primera devaluación frente al dólar estadounidense, pasando de tener una tasa libre de cambio de 4,30 bs llegando a 12 bs por dólar. A pesar de que el barril de petróleo llego a su clímax en precio colocándose por el orden de los 30 dólares por barril, esta bonanza perjudico gravemente la economía por el establecimiento de un control cambiario RECADI que promovió los actos de corrupción, aumento la fuga de capitales y divisas, imposibilitando que Venezuela cumpliera con los pago de su deuda externa y llevo a la disminución de las reservas internacionales, ayudado por una crisis latinoamericana y una posterior caída en los precios del barril petrolero. A este punto Venezuela presenta endeudamientos en el exterior por lo que años más tarde se vive otro de los episodios polémicos donde se evidencio una economía inflacionaria, generando desconfianza en las inversiones y pérdida de credibilidad de la moneda nacional. Aunado a medidas económicas que para un mercado interno en quiebra, la disminución del poder adquisitivo y la seguridad  alimentaria, se generó una escasez gradual. Todo este conglomerado de variables no estallan sino para el año 1988 cuando es electo Carlos Andrés Pérez quien trae como estrategia de gobierno realizar una serie de ajustes macroeconómicos promovido por el Fondo Monetario Internacional (FMI), al que se le llamó "Paquete Económico", con el que se buscaba realizar progresos en la economía del país dentro del modelo neoliberal. Dentro de las medidas propuestas se planteó para el sistema financiero la liberación de las tasas de interés activas y pasivas hasta un tope temporal fijado alrededor del 30%, así como la unificación cambiaria con la eliminación de la tasa de cambio preferencial y la determinación de la tasa de cambio en el mercado libre de divisas y realización de todas las transacciones con el exterior a la nueva tasa flotante, lo que junto con otras medidas que afectaba a los productos derivados del petróleo como la gasolina resulto en un estallido social, con manifestaciones violentas que mantuvo al país en un estado de incertidumbre por más de 10 días, y represento un golpe para la economía nacional.

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