La planificación en el Perú

LA PLANIFICACIÓN EN EL PERÚ

La planificación en el Perú ha pasado desde sus inicios por cambios graduales o también bruscos provenientes del exterior y por la necesidad de planear el desarrollo, estos cambios han permitido la evolución del pensamiento económico y social de nuestro país. Hoy en día se cuenta con un organismo institucional autónomo el “Centro Nacional de Planeamiento Estratégico” que es la instancia gubernamental rectora del Sistema Nacional de Planeamiento Estratégico peruano.

En la década de 1950 se crea el instituto de planeamiento de Lima, al interior de la Universidad Nacional de Ingeniería que reúne a profesionales como los primeros promotores de la actividad planificadora. Años después se dictan disposiciones legales que permiten una práctica de planificación.

En el país hubo una pugna sobre la necesidad y tipo de planificación que tenía que aplicarse por parte de dos grupos, uno de ellos quería asignar nuevos roles al Estado que determine reformas y disponga de instituciones que garanticen la viabilidad y continuidad de las decisiones políticas; y el otro, se mantenía el principio del Estado liberal que afirmaba que el mercado era el único capaz de garantizar una adecuada asignación de recursos.

A nivel internacional con el interés de apoyar el nuevo ordenamiento internacional se crea la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), que cuenta con la misión del estudio, la búsqueda de soluciones a problemas e influye en la práctica del gobierno peruano y el pensamiento económico social del país.

Hay una orientación que me llamo la atención y creo que cambiaría el rostro del actual modelo de crecimiento económico, esta orientación es del economista Rostow que nos dice que la historia puede repetirse; ósea, que es posible que reproducir las condiciones que permitieron el proceso de industrialización de los países europeos. Concluye que si se repiten las condiciones económicas que permitirán la industrialización de esos países se pueden das las etapas de creación de condiciones previas al impulso inicial, el despegue y la marcha hacia la madurez antes de lograr  la  etapa  final expresada en el alto consumo en masa.

Volviendo a la planificación en el Perú, el 25 de junio de 1948 se expide un Decreto Supremo creando la Comisión de Estudios Y Coordinación de Planes de Desarrollo Económico, con la misión de coordinar todos los planes que contemplen la financiación de préstamos con bancos del exterior, y estimular el celo de las reparticiones oficiales encargadas de preparar proyectos que han de financiarse por medio del crédito internacional.

Dos décadas después en 1962, a través de la experiencia de las Fuerzas Armadas se crea el Instituto Nacional de Planificación, este mismo año se fija como el inicio de la actividad planificadora con la suscripción de la Carta de Punta del Este y con la creación de la Oficina Central de Estudios y Programas (OCEP). De ahí es donde se establece el Sistema Nacional de Planificación y como máxima autoridad de esta; el Consejo Nacional de Planificación, teniendo las siguientes funciones: formular la política de desarrollo económico y social, señalar las directivas para la elaboración de los planes, aprobar los planes y acordar la política de financiamiento de los mismos.

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