Ley Monsanto

Ley Monsanto

Nidia Paola Martínez Blanco

Uno pensaría que la monopolizaciones solo existieran en el mundo industrial o en productos que quieren controlar un mercado. Pero en el documental titulado Ley Monsanto se analiza dos puntos de vista desde el país Chileno y el país Colombia. La resolución 9.70 de Colombia entrego de manera de negociación para beneficios del TLC sus semillas a empresas transnacionales. Las exigencias del gobierno American a países latinoamericanos como Chile y Colombia de que sus productos fueran cultivados con semillas producidas en sus países. Esto obligo a muchos indígenas, campesinos y afro descendientes a cultivar semillas certificadas. Por ende el grupo Agropecuario colombiano implanto la ley 9.70 que obligaba a que las cosechas fueran con semillas certificadas. Aquellos que no acataran dicha regulación tendrían prisión de 4 a 8 años. Lastimosamente nuestro país acepto esta exigencia para mantener un mercado libre con estados unidos. Anteriormente los campesinos usaban técnicas ancestrales de siembra que reservaba la mejor parte de la semilla para la próxima cosecha. Ahora estas semillas y siembras se volvieron capital Estadunidense. Los campesinos hacían la compra de semillas en tiendas y campos vecinos y reusaban la semilla para su próximo cultivo. Pero dado a la biopiratería, monopolización y patentes de las semillas ya ellas hacen parte de grupos transnacionales el cual prohíbe la reutilización de la semilla por parte de los campesinos. Es decir que ellos deben de comprar semillas cada año. Esta medida afecta aproximadamente unos 3.500.000 campesinos en toda Colombia que se dedican al cultivo de frutos y vegetales. En un contexto reutilizar las semillas viola los derechos de autor de estas grandes empresas transnacionales que se han apoderado de las semillas tanto en Colombia como en Chile. El fin de empresas como Bayer y Monsanto es privatizar la semilla y la siembra. Pero lo que no se dan cuenta estas grandes empresas es que afectan la seguridad alimentaria y soberanía alimentaria de los países que cultivan. Por su avaricia y control de monopolio han causado un desnivel económico de gran proporción, en parte afectando a los pequeños y medianos campesinos. Vegetales como el tomate y la lechuga esta entre las semillas ya patentadas, ahora el campesino pierde el derecho a reutilizar sus semillas para el uso de su futura cosecha. Lo irónico del asunto es que estas transnacionales creen haber innovado cuando en verdad han robado años de experiencia ancestral en el arte de la cultivación. Ahora bien estos mismos campesinos tienen que comprar estas semillas patentadas para realizar sus cultivos de no hacerlos habrá consecuencias como multas y años de cárcel. Muchos de ellos no tienen ni como pagar estas altas multas que se les quieren imponer. Es el tercer negocio más rentable en el mundo y representa el 77% del mercado global. Empresas como Dupont, Syngenta y Monsanto tienen el 47% de este mercado. En Colombia solo un 8% lo maneja.

Si los campesinos, indígenas y afro desencintes cultivaran el negocio bajaría para estas grandes multinacionales y es por ello estas grandes penalidades para evitar a toda costa que esto suceda. Consecuencias como extinción de sus tierras y quitarles sus cosechas han sido la solución para el gobierno para regular el cultivo. Pero a la final ellos cultivaban con el miedo de no ser descubierto escondiendo sus cosechas para poder así talvez traer un sustento a sus hogares. Los grandes acaban con los pequeños obligándolos a comprar las semillas hasta paquetes donde les toca comprar hasta el abono. Todo enfocado en centralizar un mercado y monopolizarlo. Creo que estas leyes deben de ser abolidas para dar vía libre a los campesinos a ejercer su trabajo sin tener que ser regulados por transnacionales.

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