Los pequeños rumiantes han estado en manos de los productores más marginados

RESUMEN

Los pequeños rumiantes han estado en manos de los productores más marginados, de bajos recursos económicos y alejados de los beneficios de la asistencia técnica y la tecnología. La producción ovina cada vez es más alentadora en el flujo capital financiero, dando origen a una producción pecuaria empresarial muy importante

En la actualidad, la ovinocultura sigue sin satisfacer cada vez más la grande demanda de esa especie. Con un volumen promedio de 45,816 toneladas de carne en canal durante el periodo 2003-2007, la ovinocultura contribuye en forma modesta a la producción nacional. Es importante desde el punto de vista social ya que presenta un medio de ingreso y fuente de alimento para numerosas familias campesinas.

La mayoría de las unidades productivas se conforman de pequeños rebaños manejados directamente por un pastor, el cual realiza de todas las actividades de manejo con ayuda de la familia, estas unidades son escasas en infraestructura y sus niveles de productividad son muy bajos. Existen otros factores que afectan a la actividad ovina; es el bajo nivel tecnológico, canales de comercialización mal desarrolladas, infraestructura de sacrificio inadecuada, consumo regionalizado, poca diversidad en el consumo.

 La producción ovina en muchos casos, es una actividad secundaria o complementaria, pues difícilmente un ovinocultor puede subsistir íntegramente de los ingresos que le genere esta actividad.

I.-INTRODUCCION

En México al cierre del año 2005 existe un inventario 7 millones 207 mil 406 ovinos: esto dice que la población ovina en los últimos 10 años a estado entre 6 y 7 millones de cabezas con una tasa media de crecimiento 1.78%. La orientación de la ovinocultura mexicana es primordialmente hacia la producción de carne, obteniéndose altos precios en pie y en canal en comparación con otras especies pecuarias.

La producción ovina seguirá enfrentando a un panorama interesante, ya que el volumen de carne demandado difícilmente podrá ser cubierto de manera total solo con la producción nacional. En 1991 alrededor del 60% de la carne obtenida de las importaciones fue aportada por ganado en pie, hacia 1999 tal proporción relativa fue disminuida a menos del 20%. Esto significa que los barbacoyeros han aprendido a comercializar un producto elaborado con carne conservada, haciendo posible que esta última sustituya la carne fresca.

No puede ser propuesto que sean restringidas la importaciones de carne de ovino ni de animales en pie para el abasto ya que ello implicara sacrificar más del 80% del rebaño actual para satisfacer solo por un año el volumen de esa demanda.  A pesar de la situación es preocupante, en termino de los precios resultantes, ese panorama es altamente atractivo para los ovinocultores nacionales, siempre y cuando estos últimos sean capaces de garantizar el incremento productivo de los inventarios actuales.

Antes del TLC el mercado será de vendedores, hoy es de consumidores.-antes había muchos proveedores de carne de ovino de bajo volumen, hoy la tendencia es hacia pocos  de alto volumen. Antes la base de una competencia era un mercado protegido, hoy es el precio, servicio y calidad. Los mercados en México concentran cada día los mayores volúmenes de venta, tendencia que debe dar otro enfoque a la manera en que los productores de ovino comercializan sus productos.

La presencia de carne de importación creo cambios en el consumidor. Hoy el mercado demanda carne tierna con un menor contenido de grasa, esta situación crea la tendencia a finalizar el ganado en corral ocasionando una caída en el precio del ganado de campo.

• Producir cordero que permita competir con ventajas ante las importaciones de carne de borregas de desecho
• Fomentar el consumo de carne fresca de cordero
• Elevar la productividad del rebaño nacional
• Estructurar programas para la exportación de cortes caros
• Aprovechar el inventario y potencial que presenta el ovino

Debido a todos estos puntos y características que presenta la ovinocultura nacional me es importante de hablarles de los siguientes problemas que pasa un productor para poder ofrecer lo antes mencionado.

PRINCIPALES ENFERMEDADES EN LA PRODUCCION OVINA

El proceso de reproducción es importante no solo para aumentar la cantidad del ganado de que se dispone en el rebaño, sino también para incrementar su calidad y su rendimiento, ya sea de lana o de carne. Pero hay que tener en cuenta los siguientes problemas y más que nada tenerlos bajo control para que así sea más favorable la producción.

        De los principales problema que se hablara en este proyecto son los siguientes:

• Nutrición
• Control de enfermedades infecto-contagiosas
• Abortos
• Distocias
• Retención placentaria
• Prolapso uterino

2.1.- Nutrición

La buena alimentación, la buena genética, la buena salud y el buen manejo de los ovinos son la clave para una producción abundante y un buen negocio. Todo debe ir junto: ni un ovino de excelente calidad genética pero mal alimentado producirá lo que debe, ni un rebaño bien alimentado pero de poca calidad lograra mejorar la producción determinada, precisamente, por su genética.

1. Alimentación a hembras en celo

La alimentación extra debe empezar unas tres semanas antes del empadre. Esta práctica se llama flushing. Las hembras deben aumentar su peso en un kg por semana durante el flushing. Así el número de crías aumenta de un 15 hasta un 20%. (koeslag & kirchner salinas, 2001) (Lesur, 2005)

Lo mejor es que las ovejas ganen peso antes y durante la época de empadre. Esto no solo aumenta el número de ovulaciones, sino que también mejora las posibilidades de concepción. Dependiendo del tamaño del de los rebaños, la época de empadre dura de dos a tres semanas, durante las cuales se debe continuar con la sobrealimentación. Al final de este periodo, 80% de las hembras quedan preñadas. (Lesur, 2005)

        Para lograr la sobrealimentación en pastoreo se puede cambiar a las ovejas de una pradera con pasto de excelente calidad. Alas hembras estabuladas se les debe suministrar forrajes con alto valor alimenticio ya sean frescos o conservados, combinados con concentrados. (Liseur, 2005) 

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