NACIONALIZACIÓN EN ARGENTINA DE LA PETROLERA ESPAÑOLA YPF

NACIONALIZACIÓN EN ARGENTINA DE LA PETROLERA ESPAÑOLA YPF

1. INTRODUCCIÓN

Como ya es conocido en gran parte del mundo, la Presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, anunció la nacionalización de la petrolera española YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales). Los españoles, respaldados por la Unión Europea, y empresas y países de todo el globo han expresado su disgusto en los diferentes medios de comunicación y han augurado para Argentina sanciones, aislamiento y graves consecuencias económicas, consecuencia de un acto que en Europa se ve como una arremetida contra el comercio internacional y contra la seguridad jurídica que debe darse a los inversionistas.

Argentina, por su parte, ha asegurado desde su cancillería y desde distintos ministerios y estancias del Gobierno que “Gozarán las consecuencias”, frase que ha resonado en los diferentes medios del país y de la región latinoamericana, y que muestra con claridad que el país del cono sur poco le presta atención a las críticas y amenazas y se siente seguro de la acción tomada por la líder del Ejecutivo.

En medio de todo este panorama, otros países de la región aprovechan lo sucedido para mostrarse como lugares ideales y propicios para la inversión extranjera, mientras que inversionistas y empresas, están a la expectativa entre la controversia, calculando cada vez mejor sus movimientos.

El presente trabajo pretende analizar, a grandes rasgos, lo sucedido en torno a la nacionalización de la petrolera YPF, se explicará en qué consiste, quiénes son los dueños de la petrolera y los involucrados en la nacionalización, qué se busca con ésta, cómo reaccionaron España y la Unión Europea y cuáles serán las consecuencias para América Latina.

2. ¿EN QUÉ CONSISTE ESTA NACIONALIZACIÓN?

En primer lugar, debe aclararse que para poder nacionalizar la empresa petrolera YPF, tuvo que ser privatizada primero. Esto ocurrió hace veinte años bajo la presidencia de Carlos Menem. Hoy en día, el plan que tiene Argentina, en cabeza de la Presidente, Cristina Fernández de Kirchner, es nacionalizar el 51% de las acciones de YPF, amparada en el artículo 31 de la ley de Hidrocarburos N° 17 319, del año 1967, a través de un proyecto de ley de la República. Este porcentaje de las acciones estaban bajo el control de la petrolera española Repsol. La empresa petrolera YPF, dedicada a la exploración, explotación, destilación, distribución y venta de petróleo y sus productos derivados, es adquirida por el Estado argentino, quien asume su control.

La empresa nacionalizada comienza a operar bajo el amparo del Estado, esta situación hará que la empresa empiece a perder una posición privilegiada dentro del mercado, no estará en óptimas condiciones para responderle a éste. También, como es común en la economía, en el caso de las empresas pueden ocurrir efectos desfavorables: Puede pasar, que los cálculos arrojen cifras que son negativas para esta empresa, en cuyo caso probablemente, ésta se arriesgue a la quiebra y cierre de actividades. Si ocurre esto probablemente se escucharán voces de privatizarla.

3. ¿QUIÉNES SON LOS DUEÑOS DE LA PETROLERA YPF?

Con esta expropiación por parte de Cristina Fernández de Kirchner, los dueños de YPF quedarían así: 26% del Estado Nacional Argentino; 25% de las ocho provincias argentinas productoras de petróleo; 24,5% del grupo financiero local Eskenazi, íntimamente ligado a los Kirchner; 6,0% de la Banca Lazard Freres; 5% de Eton Park: Goldman Sachs, Minsich, Rosemberg; 2% del Grupo Werthein y 6,5% de Repsol.

Resulta interesante observar que esta estructura accionaria dejaría el 44% de YPF en manos de entidades salidas del más íntimo riñón áureo de las finanzas internacionales, que mantiene notorios apetitos geopolíticos y territoriales sobre la Argentina.

Tal como están las cosas, el Estado nacional y el Grupo Petersen (Eskenazi) son los dueños reales de YPF, dado que son los dos accionistas con mayor poder dentro de la nueva composición societaria, dado que las provincias se quedaron con el 24,97%. Ahora, después de que las acciones de YPF cayeran al piso, comenzará el repunte en la Bolsa, lo que incrementará sustancialmente su capital.

Una pregunta que algunos se hacen es: ¿no será que cuando las acciones estén altas, Eskenazi va a decidir vender su parte al gobierno (25,46%)?. Si a esto le sumamos que esta familia entró al petróleo sin saber nada y sin poner un peso en la compra de los activos de YPF, el negocio es más que redondo. Si esto llegara a suceder, quedaría claro que no hay nada casual en la decisión de no tocar las acciones de Esquenazi en este momento.

4. ¿QUÉ SE BUSCA CON ESTA NACIONALIZACIÓN?

El principal objetivo de la nacionalización de YPF es el autoabastecimiento, explotación, industrialización, transporte y comercialización de hidrocarburos para Argentina y aumentar las reservas de petróleo, razón principal, según el Gobierno, para la expropiación de la petrolera, pues durante la gestión de Repsol, los niveles de dichas reservas cayeron.

Se busca "garantizar el desarrollo económico con equidad social, la creación de empleo, el incremento de la competitividad de los diversos sectores económicos y el crecimiento equitativo y sustentable de las provincias y regiones"; convertir los recursos hidrocarburíferos en reservas comprobadas, integrar novedosas tecnologías, la explotación y restitución de reservas; la integración del capital en alianzas estratégicas para explorar y explotar hidrocarburos convencionales y no convencionales; y la maximización de inversiones y recursos con miras al autoabastecimiento y proteger los intereses individuo con relación con el precio y calidad de los hidrocarburos

La expropiación también comprende al 51% de las acciones que Repsol posee en YPF Gas, la principal firma de comercialización y fraccionamiento de gas en garrafas. Las acciones expropiadas se distribuirán en un 51% para el Estado nacional y el 49% restante entre las provincias integrantes de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI). La distribución de acciones entre las provincias que acepten su transferencia se realizará en forma equitativa, teniendo en cuenta sus respectivos niveles de producción de hidrocarburos y de reservas comprobadas.

5. ¿CÓMO REACCIONARON ESPAÑA Y LA UNIÓN EUROPEA?

REACCIÓN ESPAÑOLA

España reaccionó

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