PRIMERA IMPRENTA EN EL ECUADOR
Enviado por Erika S • 23 de Enero de 2016 • Resúmenes • 746 Palabras (3 Páginas) • 140 Visitas
Mikaela Guanoluisa.
Historia de la Comunicación. 22 de Diciembre 2015.
PRIMERA IMPRENTA EN EL ECUADOR
La primera imprenta que ingresó al ecuador fue en el año de 1754, de manos de los jesuitas y se instaló en Ambato en 1755 y, a quito llego en 1759. La imprenta marcó el inicio de la cultura en los pueblos americanos que, sumidos en el coloniaje, recibieron estas máquinas como fabulosas deidades que llevarán en su seno el secreto de la liberación; desde su descubrimiento, se constituyó en el elemento más poderoso para la cultura de los pueblos. De ahí la importancia que tiene su establecimiento en América y particularmente en el Ecuador y fue traído por primera vez a América en 1526 por Antonio de Mendoza, virrey de México, cuando aún no se generalizaba ni en la misma Europa.
Los Jesuitas en 1778 adquirieron la primera imprenta y fue instalada en Ambato y se llamó "IMPRENTA DE LA COMPAÑÍA DE JESÚS". Entonces el padre José María Maugeri, era Superior del Colegio de Ambato. Fueron los jesuitas los más empeñosos en adquirir estos aparatos para la difusión de sus ideas religiosas. Lo hicieron, sucesivamente en México, Perú, Guatemala, Paraguay, Ecuador, Argentina, Cuba, Uruguay, Chile, Brasil, Panamá y Bolivia.
El aporte que significó la primera imprenta para la cultura, la religión, y la difusión del conocimiento es digno como algo muy importante en el desarrollo de nuestro pueblo. Tuvieron dificultades para ponerla en funcionamiento por falta de tipógrafos e impresores, por lo que sabe acudieron a un profesional desde Alemania, el Coadjutor Juan Adán Schwartz, natural de Dilinga, para que se hiciera cargo de la Regencia de la Imprenta. Schwartz llegó a Guayaquil el 25 de octubre de 1754 y al finalizar el año arribó a Ambato. La imprenta fue destinada en forma exclusiva para la publicación de obras relativas a la religión.
Es que para los Jesuitas les era muy importante la imprenta. Juan Pío Montúfar, Miguel de Ugarte, Ignacio Flores, Pedro Vicente Maldonado, el padre Javier de Santamaría, Tomás de León y Jijón, entre otros autores, se vieron obligados a publicar sus libros en el exterior o a conservarlos inéditos. Entonces comenzó oficialmente su funcionamiento en 1755 con la publicación del libro ‘Piisssima Erga Deo Generatrices Devotio al Imperandan Gratiam por Articulo Mortis’.
En 1759 se produce un hecho inesperado. Luego de la publicación de 12 obras, todas ellas relativas a la religión, el Padre Maugeri fue trasladado a Quito, junto con el Regente Hno. Schwartz, llevándose la imprenta para instalarla en el Colegio de San Luis pero lo que pasa es que el Padre Maugeri fallece el 22 de octubre de ese mismo año. En Quito se hicieron 16 ediciones, hasta la expulsión de los jesuitas, cuando se la confiscó y se la guardó.[1]
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