Periodismo, Poder Y Corrupción
maribelchapra22 de Octubre de 2012
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Introducción
El periodismo es una labor que trasciende fronteras con el ideal de informar verazmente lo que sucede día tras día a nivel mundial, por ello es importante resaltar que un profesional de la comunicación debe ser una persona íntegra y llenar un perfil ético, logrando así que se le considere como una persona que posee valores morales frente a la sociedad.
Sin embargo, al momento de ejercer esta profesión muchos comunicadores se encuentran con un sinfín de restricciones y obstáculos en el camino, ya que algunos entes públicos y privados se niegan a dar información y declaraciones del algún tema que este en actualidad y no sea de su conveniencia exponer, otra dificultad a diario es la prohibición de cierto contenido noticioso en los medios de comunicación, debido a que el gobierno y elites de poder se encargan de amedrantar y callar a periodistas bajo represiones y amenazas.
Los periodistas en la actualidad son victimas de la corrupción en toda Latinoamérica, las cifras escandalizan al mundo puesto que un gran número de comunicadores sociales hoy sufren consecuencias por mostrar la verdad.
Durante la elaboración de esta investigación se conoció a fondo la corrupción por parte de algunos gobiernos, sobre los medios de comunicación y el poder que están ejerciendo los comunicadores al informar el acontecer del mundo, aunque esto signifique llevar sobre sus hombros un gran peso.
1. La Naturaleza del Poder en América Latina
El continente americano día a día va dejando huella de sus heterogéneos valores y de su diversa cultura, gracias a que cada nación consta de distintos habitantes y particulares gobernantes, destacándose la gran mayoría de ellos por su gran apego al poder, quienes buscan consolidar un mejor país con el transcurrir del tiempo.
Juan Bautista Alberdi, destacado abogado, diplomático, escritor, autor de la Constitución Argentina de 1853, tenía una concepción de patria muy trascendental para las sociedades, este decía que "la patria es una institución de origen y carácter religioso y santo… el hombre individual se debía todo entero a la patria; le debía su alma, su persona, su voluntad, su fortuna, su vida, su familia, su honor", basándose en esto expresaba que "los antiguos no conocían, pues, ni la libertad de la vida privada, ni la libertad de educación, ni la libertad religiosa"; este pensamiento tan antiguo de patria alude específicamente a que en países como Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela los escándalos de corrupción, realmente no afectan la popularidad o credibilidad del líder, ya que los mismos están libre de todo acto que tenga como consecuencia una imagen negativa.
Enrique Krauze, ensayista y escritor mexicano, autor del libro el poder y el delirio, enfoca dicho escrito en la ambición de poder que tiene Hugo Chávez, hace relevancia en lo que ha sido toda su gestión presidencial y en cierto modo deduce lo que sucederá en un futuro si Venezuela sigue apoyando a dicho mandatario, esta obra literaria tiene sus orígenes en el año 2007 cuando su escritor en una visita a Caracas presenció lo que el presidente nunca se imaginaria, es decir perder unas elecciones.
Cabe destacar que en Venezuela luego de casi dos siglos de guerras militares y de caudillos llego la democracia, allí es donde se establece Chávez con su innovador proyecto del socialismo del siglo XXI, paradójicamente, su posición allí no todos los ciudadanos la consideran de la misma manera, puesto que para muchos venezolanos esto es lo mejor que les pudo pasar, piensan que teniendo a este ciudadano en el poder habitan en un país lleno de oportunidades, y que dicho gobierno no se compara con nada, pero para otra parte de la población no es así, no comparten de ninguna manera ese pensamiento, incluso desean marcharse de la entidad, por ello es necesario citar a Krauze, quien dice:
“Dentro y fuera del país, la simpleza está de moda… tanto los que creen que Chávez es un santo resucitado, la rencarnación sagrada de Simón Bolívar, como los que sostienen que Chávez es el demonio, una nueva versión caribeña de los dictadores sudamericanos, se pierden una inmensa historia, llena de matices y contradicciones”
Chávez sin lugar a dudas lleva las riendas de un gobierno completamente personalista, transcurren los años y son millones de personas quienes aun aprueban y apoyan sus planes de quedarse por muchos más años en el poder, porque como el mismo dice “hasta que Dios quiera”, asimismo es de abordar que todo lo que sucede en el país debe estar en total proporción con él, ejerce roles polifacéticos queriendo lograr con ello más apoyo y reconocimiento positivo del venezolano, se ha visualizado como cantante, jefe militar, diplomático, jugador de beisbol, entre otras actividades a las que se ocupa para estar en sintonía con las actividades diarias de los ciudadanos, Krauze afirma esto diciendo:
“Chávez quisiera ser –en su fuero más íntimo– el héroe del siglo XXI. Se ha acostumbrado a vivir inyectado de adrenalina histórica, de una heroína que él mismo genera. Esa heroicidad, piensa él, le da derecho a la ubicuidad, la omnipresencia, la omnipotencia y la propiedad privada de los bienes públicos”
De este modo, es necesario reseñar que Krauze ahonda ineludiblemente en lo que ha sido toda la gestión del mandatario venezolano, una de sus concepciones más trascendentales es la que dice: “Venezuela: dictadura aderezada con petróleo, régimen con concentración absoluta del poder, país totalitario, democracia sin partidos políticos, autocracia electa con formas democráticas, metrópoli de un imperialismo con virreyes petro-comprados” sin duda alguna es la realidad de todos los nativos de esta nación, puesto que el poder supremo que ejerció dicho mandatario ante Venezuela y Latinoamérica no todos los humanos lo han logrado, su táctica ha sido muy buena pero como también expresa Krauze: “la historia latinoamericana demuestra que eventualmente el pueblo se cansa”
1.1Factores culturales que influyen en la elección de líderes
Venezuela es un país carente de significantes culturales, es por ello que al momento de elegir quien se encargue de gobernar, los venezolanos buscan a una persona con el estereotipo de héroe, aquel ser humano que creen capaz de darle solución a todos sus problemas, ya que los individuos no se proponen un cambio desde sí mismos, por el contrario piensan que el cambio lo dará el mandatario nacional, razón por la cual el poder lo alcanzan personas de este índole, y al momento de ocupar puestos importantes dentro de la sociedad como la presidencia de una entidad, estos se trazan como un personaje ilustre, destacando que “la preocupación por la gloria es el rasgo fundamental del temperamento heroico. El héroe personifica el impulso individualista del ser humano, la necesidad particular de distinguirse, de sobresalir, de ganar renombre y honra” (Capriles, 2008, pág. 29). También es importante hacer mención a una de tan cruciales frases de Enrique Krauze donde se refiere en primera instancia a Hugo Rafael Chávez, Krauze expresa: “Su hechizo popular es tan aterrador como su tendencia a ver el mundo como una prolongación, agradecida o perversa, de su propia persona. Es un venerador de héroes y un venerador de sí mismo”
No obstante, la palpable existencia del héroe en el país arroja consigo la presencia del antihéroe mejor conocido como el pícaro, el audaz, quien consigue todo sin esfuerzo, por ello es conveniente citar las siguientes palabras:
“Si el héroe remite a códigos de honor y dignidad, a gestas valerosas e ideales excelsos, el pícaro nos lleva a lo más bajo, nos hunde en la miseria, en el engaño, en la mentira y la deshonra. Ambos coexisten, sin embargo, como cara y revés de una misma moneda de intercambio psíquico” (Capriles, 2008, pág. 47).
Para ahondar más en el tema es importante resaltar que en el momento de la conquista venezolana al país sólo llego lo más bajo de España, puesto que llegar a América significaba un castigo, una desgracia, por ello la entidad la poblaron en sus inicios tres linajes exiliados, el habitante autóctono, el indígena y el negro, las cuales no eran los primogénitos, eran los segundones, el que no servía, el aventurero, quien no venía a trabajar, venía para hacerse rico, ya que la verdadera vida estaba en España éste era un país de paso; razón por la cual es necesario preguntarse ¿Qué cultura de trabajo se puede esperar de estos tres orígenes, donde el trabajo no tiene pasión, ni razón para tenerla?; es por esto que la gran mayoría de venezolanos sólo trabajan por una recompensa, se les caracteriza por perezosos, que aprueban y se enorgullecen de leyes que reducen la horas laborales y aumenten salarios, a diferencia de muchos países del continente donde sus habitantes trabajan incesantemente y no aprueban leyes que resten horas de trabajo.
Por las razones mencionadas anteriormente el venezolano se cataloga como pícaro, quien está hecho para romper las reglas, siempre quiere ser más vivo que el del lado, pero ¿es realmente pícaro el venezolano? Sinceramente no lo es, si fuese un país audaz no permitiera tanto despilfarro de dinero anual por parte del gobierno para satisfacer otras naciones, no aceptara que extranjeros manejen gran parte de los bienes nacionales, no se conformara con esa imagen heroica e insustituible del mandatario nacional, no se adaptara a un salario mínimo o una mensualidad por parte de los entes
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