“REGULARIZACIÓN DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN MÉXICO”

INVESTIGACIÓN DOCUMENTAL Y DE CAMPO

INFORME FINAL

TEMA:

“REGULARIZACIÓN DE  LA TENENCIA DE LA TIERRA EN MÉXICO”

FECHA

10 de junio de 2018

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN        3

METODOLOGÍA        4

OBJETIVOS GENERALES:        4

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:        4

RESULTADOS        4

ANTECEDENTES        4

¿QUE ES LA TENENCIA DE LA TIERRA?        6

ASENTAMIENTOS HUMANOS IRREGULARES        7

REGULARIZACIÓN DE LA TENENCIA        8

MECANISMOS DE REGULARIZACIÓN        8

ORGANISMOS QUE REGULARIZAN:        9

CONSECUENCIAS Y BENEFICIOS DE LA REGULARIZACIÓN        11

CONCLUSIÓN        12

RECOMENDACIONES        13

BIBLIOGRAFÍA        13

ANEXOS        14

BITÁCORA DE CAMPO        14

Entrevista a Personal del Insus        17

ENCUESTA        20

GRÁFICOS        22

INTRODUCCIÓN

La tenencia de la tierra ha sido uno de los problemas más añejos en la vida del hombre; la seguridad jurídica de la propiedad en México no se tiene en los lugares donde la tierra es de origen social o comunal debido al crecimiento de las ciudades,  hoy en día, el crecimiento  desmedido y desordenado de los centros de población, se da principalmente en las grandes urbes.

En México con la creación de los ejidos la tierra se convirtió en tierra social o sea del estado, de tal manera que de acuerdo a la ley esta no era vendible y por lo tanto este crecimiento se había venido haciendo en un marco de ilegalidad, esta irregularidad viene acompañada de hacinamiento, robo de energía eléctrica, conexiones de agua irregulares, acumulación de contaminantes por falta de drenaje y fosas sépticas mal construidas,  delincuencia, etc.

Ante esta situación el Estado creó mecanismos para llevar a cabo la regularización de estos centros de población e incluso modificó la ley para permitir la venta de estos terrenos.

Es aquí donde empieza el motivo de este tema, los procesos se vuelven engorrosos, porque un trámite que debería durar meses en ocasiones se vuelven años; la escrituración se da por decreto expropiatorio y la titulación por la firma de un convenio, donde hasta los particulares se convierten en gestores de este proceso, que más allá de verdaderamente resolver un problema, muchas de las veces llevan a la creación de rezagos en algunos núcleos, porque una vez que terminan con la densidad general el remanente queda como propiedad ejidal para su venta o renta según considere, la responsabilidad de vigilancia del RAN concluye.

Es así pues que muchas de la familias que viven en estos cinturones de irregularidad esperan que alguna de las instituciones voltee a verlos y más precisamente se acerque a trabajar para que les de el documento tan deseado que les da la propiedad del terreno que habitan.

METODOLOGÍA

Para este tema se realizó una recopilación documental para su análisis; se llevó a cabo un diario de campo que permitió la observación de los procesos que llevan a cabo las instituciones que se encargan de la regularización en sus diferentes ámbitos; en este mismo estudio se visitó un núcleo en proceso de regularización en la que se entrevistó a algunos de los habitantes del lugar con el fin de saber su perspectiva, se entrevistó a una persona que tiene la responsabilidad de iniciar los procesos de regularización y las modificaciones que se han hecho para beneficio de los ciudadanos, finalmente, se elaboró una encuesta para analizar varios factores importantes de la regularización.

OBJETIVOS GENERALES:

Establecer conciencia sobre la necesidad de generar mecanismos que sean más efectivos en el control y manejo del crecimiento urbano, buscando que ello conlleve un proceso de sustentabilidad y seguridad para el ciudadano.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

Obtener una forma de regularización más ordenada de manera pronta y expedita.

RESULTADOS

ANTECEDENTES

Desde que los diferentes pueblos indígenas eran los únicos dueños de las tierras de nuestro país existe el conflicto respecto de la tenencia de la tierra, en la época colonial  la corona española entregó a los españoles las denominadas “mercedes reales” en pago a la conquista material y espiritual de los indios, estas eran concesiones, sin embargo, con el tiempo se transformaron en derechos de propiedad los bienes “realengos” o baldíos y por supuesto el acaparamiento de tierras, los famosos “Encomenderos o Señores Españoles” a quienes los indígenas debían pagar un tributo, sus tierras no podían enajenarse, el “Fundo Legal” era una pequeña extensión de tierra que debía tener un pueblo de indios, las demás tierras eran tierras de uso común, las parcelas de común repartimiento se daban en usufructo vitalicio o sea que no eran propietarios de ella. (ARCHIVO HISTÓRICO Y MEMORIA LEGISLATIVA, 2003).

En el siglo XVII se pretendió regularizar los títulos entregados por la corona, en terrenos baldíos o bienes realengos, dando propiedad para los españoles.

Después de la Independencia, se entregaron tierras a mexicanos que sirvieron en ella y españoles para que elevarán el nivel de los indígenas (ARCHIVO HISTÓRICO Y MEMORIA LEGISLATIVA, 2003). Esta costumbre se siguió hasta el gobierno de Porfirio Díaz, se colonizaron tierras baldías otorgadas a europeos. Este fue sin duda el elemento que permitió la desaparición de las tierras comunales y género los latifundios en nuestro país. 

En 1857 el art. 27 constitucional desconoció la personalidad jurídica de la Iglesia  y de las comunidades indígenas al extinguir su derecho a la posesión de sus propiedades.

La Tenencia de la tierra, fue uno de los principales detonantes de la revolución mexicana, que una vez lograda, el Plan de Ayala instruye la restitución de las tierras, montes y aguas para formar nuevos ejidos y comunidades, en la Constitución de 1917 se establece el ejido como base fundamental para la entrega de tierras, se establece la propiedad privada, se respeta al pequeño propietario, las tierras y aguas del territorio son propiedad de la nación. Ejidos y Comunidades tendrían derechos inalienables. (ARCHIVO HISTÓRICO Y MEMORIA LEGISLATIVA, 2003).

Es así que a partir de que se constituyeran como tierras comunales las zonas baldías de los pueblos y la posibilidad de solicitar la ampliación de sus ejidos basados en la necesidad de asignarlas como parcelas a los miembros del ejido o de uso común, su territorio fue en aumento, pero otra situación se estaba presentando a su vez - el crecimiento de la masa urbana - es así que después de la revolución se hizo la primera  regularizaron: las colonias “Proletarias” (Tomas & Azuela, 1996). Sin embargo este “problema” creció de manera sistemática, de manera descomunal e indetenible, sin mecanismos para ordenar este aumento de irregularidad. Situación presentada en todas  las periferias de las principales ciudades de nuestro país.

Al principio se asentaron como invasores y de esta invasión surgieron las ventas de lotes, por supuesto ilegítimas ya que la tierra es de la nación, dando origen a los Asentamientos Irregulares.

Este tema por su naturaleza jurídica es complejo y en nuestro país ha estado rodeado de miles de intereses por lo que a lo largo del tiempo la tenencia de la tierra sigue siendo uno de los problemas más fuertes en México, la falta de generación de oportunidades reales de obtener un patrimonio con las prestaciones otorgadas por el mismo estado, ha creado un círculo de irregularidad en todas las urbes de las ciudades y pueblos. La falta de interés de aquellos que ostentan el poder ha permitido el crecimiento de un problema de antaño.

¿QUE ES LA TENENCIA DE LA TIERRA?

Para poder abordar de fondo este tema primero debemos explicar que es la Tenencia;  de acuerdo a la FAO “La tenencia de la tierra es una institución, es decir, un conjunto de normas inventadas por las sociedades para regular el comportamiento. Las reglas sobre la tenencia definen de qué manera pueden asignarse dentro de las sociedades los derechos de propiedad de la tierra. Definen cómo se otorga el acceso a los derechos de utilizar, controlar y transferir la tierra, así como las pertinentes responsabilidades y limitaciones. En otras palabras, los sistemas de tenencia de la tierra determinan quién puede utilizar qué recursos, durante cuánto tiempo y bajo qué circunstancias.” (ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACIÓN, 2003)

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