Antecedentes de Drenajes quirúrgicos

. 22 de Febrero del 2017

Definiciones.

Drenar se refiere a la acción que tiene como finalidad la eliminación de líquidos, gases, secreciones o derrames naturales o patológicos de una herida, de un absceso incidido, aunque no completamente vacío, o de una cavidad a través de un instrumento denominado dren.

Drenaje es aquel sistema en el que se utiliza un dren para eliminar líquidos y gases patológicos o naturales que se producen en exceso y cuya extracción se requiere como método terapéutico, así como aquel que el cirujano deja con la intención de incrementar la seguridad de su cirugía, llamado drenaje profiláctico.

Antecedentes históricos.

Son muchos los personajes en la historia de la medicina que han utilizado el sistema de drenaje o drenes, por lo que seguramente faltará nombrar a alguien. [pic 1]

Se ha referido que el primer reporte de uso del drenaje fue hecho por Hipócrates (460-377 a. de C.) Describió en los Tratados hipocráticos, la colocación de un drenaje en el tórax para drenar un empiema. Posteriormente en 1867 se introdujo los tubos de vidrio, cerrados en su extremo distal, pero con orificios en las paredes laterales. Los resultados no fueron los esperados, ya que estos drenes se tapaban con epiplón o asas de intestino.

Aurelio Celso (25 a. de C.-50 d. de C.), enciclopedista romano que refirió haber estudiado los escritos de Hipócrates, utilizó tubos cónicos de plomo o latón con tapones ajustables para el tratamiento de la ascitis.  [pic 2]

Guy Chauliac, el más prominente cirujano de la Europa medieval, describió en su obra Chirurgia Magna los drenes hechos con tiras de lino dentro de un cilindro metálico en forma de mecha para mejorar el drenaje, evitar el cierre de la herida y favorecer la dilatación de su trayecto.

Ambrosio Paré (1510-1590), cirujano francés con mucha actividad médica y quirúrgica en guerras, entre muchas aportaciones incluyó el cuidado de las heridas y la utilización de tubos para drenar abscesos. Los tubos eran tanto de oro y plata como de plomo y latón; eran curvos y con agujeros; dejaba un hilo tutor para evitar la migración del dren a la cavidad abdominal.[pic 3]

Joseph Lister (1827-1912), cirujano inglés y quien desarrolló la cirugía antiséptica, estuvo muy de acuerdo con la colocación de drenes; dijo: “es imposible extremar la importancia de los tubos de drenaje”.[pic 4]

Recomendó el uso de pelo de caballo alrededor del tubo de drenaje para facilitar su extracción. Lord Lister, posteriormente, comenzó a utilizar tubos de caucho, les hizo agujeros en su trayecto, sustituyó el pelo de caballo por hilos de seda e introducía franjas de lino que remojaba en solución antiséptica de ácido carbólico dentro del tubo.

[pic 5]

William Halsted (1852-1922), cirujano norteamericano considerado como uno de los padres de la cirugía moderna, usó goma natural de la planta gutapercha, la cual cubría a una mecha de gasas de algodón. Los materiales utilizados hasta estos años incluyeron madejas de lino, gasa, huesos de buey descalcificados, huesos de ave de corral, caucho o hule, gasa enrollada dentro de una lámina de hule o goma, tubos de vidrio, tubos de metal e, incluso, aorta de buey. Para mejorar el sistema de drenaje dentro de los tubos, se introducían también pelos de caballo, catgut y cuerdas de lana en forma de pabilos.

[pic 6]

Jan Mikulicz (1850-1905), que nació en la actual Ucrania, condenó la utilización de tubos y cualquier forma de irrigación a través de ellos.

Introdujo un nuevo tipo de dren hecho de una lámina fenestrada de goma llena de tiras largas de gasa impregnadas con tintura de iodo. Las secreciones eran absorbidas por la gasa, pero la recomendación de Lister para el uso de este objeto era para obliterar espacios muertos.

En nuestros días, el uso de este taponamiento, ya sea con gasas o compresas, es para empaquetar espacios con fines hemostáticos.

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