El autismo. EL ALUMNADO CON AUTISMO

1. INTRODUCCIÓN

Para la elaboración de este trabajo, hemos elegido para su comprensión, explicación y profundización en el ámbito educativo,  el autismo, pues encontramos una gran labor de dificultad el entender como es la vida de personas con problemas y deficiencias en el área de la comunicación y de relación con otras personas, así como el estudio sobre los procesos psicológicos y los trastornos profundos en su desarrollo.

No nos resulta innovador que el autismo se esté convirtiendo hoy en día en un tema principal de investigación dentro de la Psicología evolutiva y no sólo dentro de la Psicopatía, puesto que todo diagnóstico clínico debe basarse en la observación de la conducta de los niños con las características que nombraremos a continuación, y además  en una interpretación rigurosa de su significación.

Por otro lado  hablaremos de las barreras, herramientas e instrumentos necesarios para su detención, influencias que tienen las etiquetas hacia estos alumnos en la acción educativa, las soluciones hacia los cambios a realizar sobre esta NEAE para avanzar hacía una escuela para todos, su desarrollo a lo largo de la etapa escolar primaria. Analizaremos el papel que tiene el centro, los docentes, el grupo de liderazgo, así como la relación de las familias y el contexto, para finalmente profundizar en un estudio detallado sobre las diferentes áreas del currículum idóneo para alumnos con autismo, para poder concluir en que cada alumno es único y diferente, y el papel que nos ofrece la educación inclusiva.

1. EL ALUMNADO CON AUTISMO

Ésta NEAE incluye a una gran variedad de personas  que presentan características similares como la comprensión ingenua dentro de las relaciones sociales, y su comportamiento es la suma de las distintas dificultades de adaptación, comúnmente presentan dificultades de comunicación, socialización o poca flexibilidad mental, aunque se pueden presentar en diferentes grados, a continuación exponemos su definición y características de la manera más clara y sencilla, para su fácil comprensión.

1. Definición

El autismo está actualmente considerado como un Trastorno Generalizado del Desarrollo (TDG). Constituye una perturbación grave de la comunicación social, la conducta y el desarrollo cognitivo. Suele aparecer en edades tempranas (antes de los tres años) y se da con más frecuencia en varones que en mujeres. El autismo no se considera una enfermedad, sino un síndrome, así como un conjunto de síntomas capaces de perjudicar la comunicación y las relaciones sociales y afectivas del individuo. Sin embargo, hay que señalar que el autismo presenta un conjunto de síntomas poco frecuentes. Suele aparecer aproximadamente en unos cuatro casos de cada 10000.

El niño autista no es capaz de realizar un procesamiento normal de la información que recibe o de usar el lenguaje con sentido. Casi la mitad de los niños autistas son mudos y aquellos que hablan, realizan sucesivas repeticiones de lo que escuchan. En estos niños predomina una actitud y expresión ausente o perdida, la cual no es de carácter voluntario.

En 1943, el psicólogo infantil Leo Kanner describió a los niños autistas, siendo el primero en considerar el autismo como un síndrome distinto a la esquizofrenia. Llegó a tal conclusión gracias al estudio detallado que realizó sobre los casos de 11 niños con características peculiares. Tras describir estos casos, Kanner comentó las características comunes especiales que todos esos niños tenían y principalmente dichos rasgos podían ser clasificados en tres aspectos:

        1. Las relaciones sociales -> Incapacidad del niño autista para poder relacionarse con normalidad con las personas y situaciones. Existe una gran soledad en el niño, la cual es difícil romper. Además, se presenta una alteración importante en el uso de comportamientos no verbales, una ausencia de la capacidad para compartir con otros individuos entretenimientos, intereses y objetivos y una falta de reciprocidad social o emocional.

        2. La comunicación y el lenguaje -> Deficiencias y alteraciones en la comunicación y el lenguaje, así como ausencia total del lenguaje en algunos niños autistas o uso un tanto raro de él en aquellos que lo poseen. Además, pueden aparecer alteraciones como la ecolalia, es decir, la repetición de emisiones o la inversión de pronombres personales.

        3. La invariancia del ambiente -> Con esto se hace referencia a la poca flexibilidad y a una notable resistencia a cualquier variación del medio, presentando el niño autista una adhesión inflexible a rutinas. Además, se presentan patrones de conducta estereotipados y repetitivos, una capacidad imaginativa limitada y una preocupación permanente por partes de objetos.

Este autismo, considerado como el autismo clásico, es un trastorno incluido dentro de lo que se llama Los Trastornos del Espectro Autista (TEA). La Clasificación Internacional de enfermedades de la Organización Mundial de la Salud, identifica cinco trastornos en total considerados como TEA:

        1. Trastorno Autista: Incluye la forma de autismo clásica, es decir, el autismo propiamente dicho y el que ya hemos definido anteriormente.

        2. Síndrome de Rett: Es más frecuente en niñas e implica un desarrollo de movimientos manuales estereotipados, una mala coordinación de los movimientos del tronco y una pérdida de habilidades manuales previamente adquiridas. Además, el desarrollo del lenguaje expresivo y receptivo se ve gravemente afectado.

        3. Trastorno desintegrativo de la infancia: Tras un desarrollo aparentemente normal, se produce una pérdida significativa de funciones previamente adquiridas, en al menos dos de estas áreas: lenguaje expresivo o receptivo; control intestinal o vesical; habilidades sociales o comportamiento adaptativo; habilidades motoras; juego.

        4. Síndrome de Asperger: No implica alteraciones formales del lenguaje y se asocia con un buen desarrollo cognitivo. Con este síndrome se dan síntomas como patrones de conducta, intereses y actividades restringidas, repetitivas y estereotipadas y una alteración cualitativa de la interacción social.

        5. Trastorno generalizado del desarrollo no especificado: Incluye aquellas formas de aparición del trastorno que no cumplen los criterios de los otros trastornos generalizados.

Todos estos diagnósticos forman lo que se denomina Trastornos del Espectro Autista (TEA).

1. Desarrollo del alumnado con autismo.

En este apartado tratamos el desarrollo del autismo como un trastorno de orígenes diversos, pero que en la mayoría de los casos puede deberse a una formación incorrecta del sistema nervioso en el periodo más importante de la formación de la neurogénesis. Al fin y al cabo es una alteración biológica causada por el desarrollo psicológico.

A continuación analizaremos el desarrollo en niños de los 0 a los trece años, siendo el primero el desarrollo normal de un niño sin autismo y el segundo padeciéndolo. En el primer caso desde los 8 meses manifiesta un interés activo por los objetos, a finales de su primer año de vida puede relacionarse intencionadamente con otras personas y objetos, utiliza gestos y vocalizaciones, en su segundo año de vida comienza a decir palabras sueltas y se hace notar de manera activa en el entorno familiar, además tiene la capacidad de andar. A los 18 meses se producen los primeros mundos imaginarios, como llevar a la boca de una muñeca la cucharita vacía para darle de comer. Las transformaciones evolutivas y del desarrollo que se producen entre esa edad y los cuatros años son sorprendentes, pero cuando hablamos de un niño autista estos procesos observamos que han sido alterados, pues a una chica que se le diagnostica autismo a los 3 años, no parecen haberle notado sobre el año y medio gestos ni vocalizaciones para pedir algo, entre los 18 y los 24 meses esta chica tendía a aislarse y se encerraba en sí misma, se balanceaba una y otra vez sin parar, no respondía cuando la llamaban, se mostraba indiferente hacía otras personas, no se relacionaba con los demás ni inventaba mundos imaginarios; la ausencia de estas declaraciones simbólicas es uno de los síntomas más claros a la hora de diagnosticar autismo. Desde los 18 a los 54 meses los niños autistas padecen un aislamiento del mundo que les rodea mucho más fuerte que a cualquier otra edad, se observan en ellos emociones incomprensibles, sufren alteraciones y conducta. Por otro lado decir el aislamiento que se observa durante la infancia se va sustituyendo por la poca habilidad funcional dentro de la relación con otras personas. También fuera del desarrollo normal de un niño encontramos que durante la adolescencia se pueden dar episodios de depresión, insomnio  o trastornos alimentarios, pero es preciso decir que no en todos los casos con autismo encontramos estas características de la adolescencia.

Cuando las personas autistas reciben la ayuda necesaria su vida adulta resulta ser más satisfactoria.

Dentro del desarrollo motor de los niños autistas encontramos que se produce a la misma vez que cualquier niño, simplemente que pueden variar algunas características  como un retraso en el control de los esfínteres, autolesiones, andar de manera diferente por ejemplo de puntillas y estar con la cabeza inclinada, como digo no tienen por qué darse en todos los niños autistas.

1.  LA INCLUSIÓN DEL ALUMNADO CON AUTISMO EN LA ESCUELA PRIMARIA: BARRERAS Y PALANCAS PARA SU APRENDIZAJE Y PARTICIPACIÓN

2.1. Instrumentos/ herramientas para detectar las barreras.

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