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AUTISMO.


Enviado por   •  5 de Septiembre de 2012  •  Informes  •  2.128 Palabras (9 Páginas)  •  368 Visitas

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En el primero periodo se consagra exclusivamente a la discusión de la noción de retraso, considerado como el único trastorno mental infantil. Esquirol crea esta noción con el nombre de idiocia. La define como un estado donde las facultades intelectuales no se manifiestan nunca. Por lo que respecta a la locura, distingue la locura propiamente dicha del adulto y una enfermedad congénita o adquirida tempranamente en la infancia (que es la idiocia). Paul Moreau de Tours, por ejemplo, escribió "De la folie chez les enfants" (1888), donde afirmaba que la locura presenta en el niño las mismas características que en el adulto.

Saute de Sanctis introdujo el cuadro de dementia precocissima y lo diferenció de la demencia precoz del adulto. El propio Lacan utilizó esta nomenclatura en un caso presentado en un niño de 8 años.

El tercer período se funda la clínica psiquiátrica del niño. Bercherie señala que la noción moderna de psicosis infantil proviene de la introducción de Bleuler del diagnóstico de esquizofrenia, que substituye al de demencia precoz kraepeliniano.

El "autismo infantil" de Kanner introdujo el término "autismo infantil precoz" para nombrar los casos de retraimiento en niños menores de un año4. A pesar del parecido con la esquizofrenia infantil. El innatismo que postula no es orgánico sino que constituye un déficit intelectual tienen "una expresión facial asombrosamente inteligente". Y añade en la causalidad la relación particular con sus padres (padres obsesionados por detalles pero poco afectivos). El afecto tiene que ver con la madre.

El autismo tiene que ver con la imposibilidad de establecer conexiones ordinarias con personas y situaciones desde el inicio mismo de la vida, y por su "inclinación a la soledad autista, alejando todo lo externo que se acerca al niño". Actúan como si las personas de su entorno no estuvieran. Se aíslan como no estuvieran las personas. Consideran el exterior es vivido como una amenaza, como una intrusión.

Los autistas no hablan, o bien balbucean un soliloquio ininteligible; manipulan objetos en forma estereotipada y rechazan cualquier intrusión en su "juego"; Las coordenadas espacio-temporales están alteradas: se golpean, no tienen noción del peligro, actúan como si carecieran de cuerpo. Cualquier cambio introducido en su rutina, los desespera, les produce una crisis. Tienen una capacidad de memoria impresionante, ellos no entienden los chistes, ya que para ellos no tienen sentido.

Desde la creación del "autismo" por Bleuler6 para nombrar el retraimiento en el propio mundo imaginario de la esquizofrenia. Se considera que en general los tratamientos que producen una salida del encierro autista ocurren en psicosis cuyo "autismo" nombraba más bien su desconexión con el mundo exterior, se trataría de un autismo secundario.

A veces se asocia el autismo a distintas afecciones orgánicas: la esclerosis tuberculosa de Bourneuille, la rubeola congenital, el síndrome del x-frágil, encefalías, entre otras. A través de distintas perspectivas (estudios orgánicos, neurofisiológicos, neurobioquímicos, anatómicos y genéticos), el origen orgánico. De acuerdo al tipo de definición de autismo que se utilice varían los resultados de la búsqueda de una etiología orgánica.

El DSM III (1981) abandona la noción de psicosis en la infancia dada la rareza de la evolución de las patologías precoces de la infancia hacia las formas de psicosis adultas. Crean "Trastornos generalizados del desarrollo" para nombrar las desviaciones del desarrollo de numerosas funciones psicológicas fundamentales implicadas en la adquisición de aptitudes sociales y del lenguaje. Entonces predominan el criterio adaptativo y el enfoque terapéutico educacional.

En 1987 este esquema es revisado y se proponen dos tipos de TGD: el trastorno autista y el TGD no específico que toma como criterio diagnóstico el trastorno comportamental.

El DSM IV establece 5 items para el TGD: trastorno autista, trastorno de Rett, trastorno desintegrativo infantil, trastorno de Asperger y trastorno generalizado del desarrollo no específico.

El trastorno autista es un déficit y su proporción sexual. Sólo se manifiesta en mujeres, el desasceleramiento del crecimiento craneal, pérdida de habilidades manuales intencionales previamente adquiridas, y aparición de una marcha y unos movimientos del tronco pobremente coordinados. El trastorno denominado "síndrome de Heller", "dementia infantilis" o "psicosis desintegrativa". El trastorno de Asperger no presenta un retraso del desarrollo del lenguaje como en el autismo.

En estas clasificaciones la inmixión para homogeneizar el tratamiento en busca de conductas adaptativas y eficaces para el desempeño social.

Distinguen el autismo de la psicosis: dado el fracaso masivo de la metáfora paterna en el autismo no hay Otro ni objeto a -lo que equivale a decir que no hay una inscripción de la falta, se vuelve extensión del goce materno. El niño autista se encuentra en relación a un Otro masivo y total, por lo que queda un lazo, no hay división "cuerpo a cuerpo". El Otro se reduce a una ausencia. También falta la imagen especular. El niño "está por entero en el sitio del objeto a en tanto que no especularizable". El psicótico, en cambio, tiene un objeto y un Otro; pero ese objeto está incorporado en lo real. El autismo, es el sujeto que está en más.

Diferencian el lugar del niño para la madre del autista y la del psicótico. En la psicosis el niño ocupa un lugar en el fantasma materno: voces, la mirada tiene que ver con la invasión materna. En la psicosis el niño ocupa un lugar en el fantasma materno; en el autismo no: el niño es un objeto autoerótico, La salida del autismo es por el lado de la paranoia o de la debilidad.

El autismo infantil precoz es una esquizofrenia desencadenada tempranamente. Lo considera como una "forma extrema de la esquizofrenia", forma extrema en el sentido de variante de la esquizofrenia, sin que se pueda hablar de una diferencia cualitativa de estructura entre esquizofrenia y autismo.

Para Colette Soler es que no existen autismos puros. Deben ser más bien considerados como un polo, "un rechazo de entrar en la alienación, deteniéndose en el borde", que hace que los autistas aparezcan como "significados del Otro" (hablan por ellos y buscan un sentido a su conducta). De este modo, la psicosis en el niño se manifiesta siempre como forma mixta, puede aparecer desde diferentes

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