¿El origen de los sujetos no heterosexuales es biológico o social (nace o se hace)?

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¿El origen de los sujetos no heterosexuales es biológico o social (nace o se hace)?

La definición de homosexualidad expuesta por la real academia española, define a este grupo de individuos como personas con una orientación sexual inclinada hacia personas de su mismo sexo, pero en ningún momento se hace alusión a un posible origen de esta.

Existen diversos puntos de vista acerca del origen de la orientación de sexual, tanto si puede ser un proceso que se origina junto con el feto en el desarrollo intrauterino o si es un comportamiento aprendido durante la infancia por una exposición a experiencias que orienten su sexualidad. Existen dos modelos importantes:

• El modelo de Troiden: intenta explicar cómo las vivencias que experimentan los individuos homosexuales influyen sobre su autodefinición acerca de su sexualidad y el proceso que estos individuos tienen que cursar para poder aceptar su identidad.[1]
• El modelo de Martin: Expone que la homosexualidad no sale de la nada y que en realidad es un proceso influido por eventos emocionales y conductuales que condicionan su aparición. Martin lo define como un proceso que inicia durante la infancia con sentimientos de ser diferente al resto y evoluciona con el paso del tiempo con el reconocimento propio,  divulgación, aceptación y experimentación.[1]

Apoyando los modelos de Martin y Troiden, el analista Mercado en el año 2000 planteo la teoría acerca de cómo la construcción social que existe alrededor de este grupo de personas homosexuales afecta el reconociendo propio de su inclinación sexual. Hizo la comparación de personas que se desarrollan en un entorno donde la sociedad es más abierta y tiene una mayor aceptación y otra sociedad donde el contexto social, religioso e incluso político desaprueba estas prácticas. En el último las personas homosexuales vivían reprimiendo su sexualidad, o en secreto tendían a ser abiertos respecto a sus preferencias, pero esto de una manera u otra afectaba el desarrollo en la aceptación y reconocimiento propio de estos individuos, a diferencia de las personas que viven en un ambiente social que acepta y los reconoce. [1]

Hasta el momento hemos comentado solo el papel que tiene el entorno social sobre el desarrollo de la homosexualidad, pero un artículo publicado por la IVIC en Caracas, Venezuela, deslumbra la importancia de factores genéticos sobre la orientación sexual humana. [2]

La homosexualidad parece tener una incidencia mayor en el sexo masculino que en el femenino y al mismo tiempo tiende a existir una mayor asociación familiar de homosexualidad en los integrantes del sexo masculino a comparación de los integrantes de sexo femenino.

Bailey y Pillard hicieron una estimación de la heredabilidad de la homosexualidad, determinando que la frecuencia de la homosexualidad en general es de 4-10% y la identificación de que un hermano gemelo sea homosexual es de 0,31-0,74 en masculinos y 0,27-0,76 en hembras, sugiriendo de esta manera que un factor genético esta implicado. Pero a pesar de estos datos es importante mencionar que el desarrollo de una orientación sexual es de carácter multifactorial, previamente mencionamos como el ámbito social participaba. [2]

¿Los sujetos  no heterosexuales merecen adoptar, casarse y tener los mismos derechos?

México se encuentra en el segundo lugar a nivel mundial en el número de niños y niñas huérfanos de padre y madre o alguien familiar que cuide de ellos, con un número aproximado de 1.6 millones de menores sin familia. Claramente existe una problemática, y existen parejas homosexuales que están dispuestos a otorgarle a estos menores un hogar propio. La Asociación Americana de Psiquiatras en noviembre de 2002 presento un comunicado que apoyaba abiertamente la adopción por parte de parejas o individuales homosexuales de menores. Este comunicado fue respaldado por asociación por numerosos estudios que ponían de manifestó que los niños que eran adoptados por parejas homosexuales a comparación de parejas heterosexuales presentaban exactamente el mismo nivel de desarrollo tanto como emocional, cognitivo, social y sexual. [3]

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