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El plomo


Enviado por   •  27 de Abril de 2014  •  Monografías  •  5.212 Palabras (21 Páginas)  •  310 Visitas

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El tema en estudio es conocer todo lo más relevante sobre el plomo, desarrollando las diferentes etapas a través de la hioria, sus características e información más relevante.

El plomo es un elemento químico de la tabla periódica, cuyo símbolo es Pb (del latín plumbum) y su número atómico es 82 según la tabla actual, ya que no formaba parte en la tabla de Dmitri Mendeléyev. Este químico no lo reconocía como un elemento metálico común por su gran elasticidad molecular. Cabe destacar que la elasticidad de este elemento depende de la temperatura ambiente, la cual distiende sus átomos, o los extiende.

El plomo es un elemento químico que no interviene en ningún proceso metabólico esencial en las reacciones bioquímicas de los seres vivos. Su presencia en la superficie terrestre no es muy importante. Aunque presente en la composición de unos 200 minerales, sólo en tres de ellos se encuentra en suficiente cantidad como para formar depósitos.

Sus especiales propiedades físicas han contribuido a que sea empleado en numerosos procesos industriales y actividades humanas. En consecuencia, hoy en día se encuentra más extendido y en cantidades mayores de lo que sería su distribución natural.

En estado natural, el plomo posee 4 isótopos estables, aunque en total se conocen 27 isótopos de plomo. Es importante mencionar que se trata de un elemento tóxico y peligroso para la salud, resultando mortal si se inhala, se ingiere o si existe una intensa y prolongada exposición a determinadas formas del elemento. Si bien se lo puede encontrar en la naturaleza, esto es algo excepcional y es raro hallarlo en sus fuentes, siendo minerales como la galena (PbS) la más común, de la cual se lo extrae mediante un complejo proceso de tostado. En menor medida, también ocurre en minerales como la anglesita y la cerusita.

PLOMO

Representa el 1,4x10-3% en peso de la corteza. Se encuentra nativo en algunos minerales férricos de Suecia y en yacimientos auríferos. Entre sus minerales destaca la galena, que forma cristales cúbicos de gran tamaño.

Es un metal blanco azulado, brillante, muy blando, muy maleable, dúctil y un pobre conductor de la electricidad y el calor. Al aire forma rápidamente una capa protectora de color gris de carbonato básico que impide la corrosión posterior: las tuberías de plomo usadas por los romanos para sus baños todavía están en uso; por eso mismo se usa en recipientes para líquidos corrosivos (ácido sulfúrico). Finamente dividido se inflama espontáneamente al aire.

El agua ataca al plomo en presencia de oxígeno; sin embargo las aguas duras forman un recubrimiento de carbonato básico insoluble. Fenómenos de pasivación se producen con los ácidos sulfúrico y fluorhídrico diluidos. El ácido sulfúrico concentrado, nítrico diluido, clorhídrico, ácidos orgánicos y las bases en caliente atacan el plomo. Pasivado se utiliza para el transporte de ácido sulfúrico concentrado. En caliente se combina con el azufre y los halógenos.

Puede endurecerse por adición de pequeñas cantidades de antimonio u otros metales.

El plomo es un metal pesado de densidad relativa o gravedad específica 11,4 a 16 °C, de color plateado con tono azulado, que se empaña para adquirir un color gris mate. Es flexible, inelástico y se funde con facilidad. Su fusión se produce a 327,4 °C y hierve a 1725 °C.

Las valencias químicas normales son 2 y 4. Es relativamente resistente al ataque del ácido sulfúrico y del ácido clorhídrico, aunque se disuelve con lentitud en ácido nítrico y ante la presencia de bases nitrogenadas. El plomo es anfótero, ya que forma sales de plomo de los ácidos, así como sales metálicas del ácido plúmbico. Tiene la capacidad de formar muchas sales, óxidos y compuestos organometálicos.

Otra característica del plomo, conocida ya desde la antigüedad, es su propiedad como agente tóxico. En efecto, el plomo es uno de los metales más tóxicos que se conocen, produciendo en los humanos una enfermedad denominada saturnismo, cuya incidencia hoy en día, conocida su toxicidad y tomadas las medidas oportunas, se ha reducido notablemente. La intoxicación por plomo en especie animales se denomina plumbismo. La exposición a este metal se debe a las emisiones de desperdicios de minas de plomo, contaminación industrial, plomos de pesca, pinturas y tintes que se vierten a las aguas y al procedente de las emisiones de los automóviles.

Por su carácter de tóxico inespecífico, una vez en el sistema circulatorio se distribuye en tejidos blandos (riñón e hígado principalmente), afectando a la mayoría de los procesos fisiológicos, sistema nervioso y muscular. Todo ello hace que la detección de la enfermedad sea difícil, pasando en ocasiones desapercibida o atribuyéndose a otras causas ajenas a la ingestión de plomo.

HISTORIA

El plomo es un metal de unas características únicas, que le hacen ser muy apreciado, cuando no insustituible, para ciertas aplicaciones. Se puede afirmar que la historia de la Humanidad está bastante ligada al descubrimiento y desarrollo de las aplicaciones de este metal.

Los alquimistas asociaron el plomo con Saturno, y lo representaron con el mismo símbolo que este planeta: una guadaña; recordemos que el gran sueño de los alquimistas (la "Gran Obra") era la transmutación de metales "innobles" y corrientes, entre ellos el plomo, en un metal "noble" como es el oro. El actual símbolo químico del plomo, Pb, deriva del nombre latino "plumbum".

Su utilidad es conocida desde la antigüedad; la civilización egipcia ya lo utilizaba, alrededor de los años 5.000-7.000 a. J.C., para vitrificar vasos. Durante la época romana se empleaba para las conducciones de agua y fabricación de numerosos objetos, y en la Edad Media en la construcción de edificios. Pero fue a partir de finales del siglo XIX, gracias al descubrimiento de sus propiedades, cuando se extendió su uso en las industrias.

Desde hace varios siglos también son conocidas sus propiedades como metal tóxico. Ya en el siglo II d. J.C., el médico y poeta griego Nicandro describió algunos efectos adversos de la exposición al carbonato de plomo (Landrigan, 1990; Miller et al.,1990). El padre de la moderna medicina laboral, Bernardino Ramazzini (16631714), en su obra "De Morbis Articum Diatriba" (1713), ya describe la enfermedad profesional de los pintores que

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