Energia luminosa y sonora

Energía Luminosa[pic 1]

La energía luminosa es la energía que genera y transporta las ondas de luz. Cuando la luz se traslada actúa como una onda electromagnética o como una partícula debido a que puede interactuar con otras materias. 

El sol es la principal fuente de luz que existe y transmite una importante cantidad de energía luminosa capaz de mantener el desarrollo de la vida en el planeta Tierra. Sin embargo, existen otras fuentes de energía luminosa, como el fuego o los rayos láser. Por otro lado, las ondas electromagnéticas que emite la energía luminosa son detectadas por el sentido de la visita, pero existen las ondas ultravioletas, que no son visibles y que también transmiten energía pero resultan nocivas para salud de los seres vivos, causando en muchos casos, enfermedades de la piel.

Existen dos tipos de energía luminosa:

• Energía Luminosa Natural: Energía transmitida por el sol.
• Energía Luminosa Artificial: Energía que se genera a través del uso de otras energías

Algunos ejemplos de Energía Luminosa:

• La energía que transmite el sol, es aprovechada por las plantas y luego transformada en energía química la cual ayuda al proceso de la fotosíntesis.
• Una vela genera iluminación con una llama de fuego con la cual se puede iluminar  cualquier tipo de espacio oscuro.
• Una bombilla transmite energía luminosa por medio de un proceso de energía eléctrica.
• Las linternas que utilizan baterías proporcionan energía luminosa a través de un proceso químico que genera electricidad y a su vez iluminación.

Energía Sonora[pic 2]

La energía sonora es la energía que transmite las ondas sonoras. La forma en que se produce y se propaga dicha energía se basa en un foco sonoro que genera energía vibracional. Las partículas del medio que rodean a dicho foco sonoro transmiten esa energía mediante su movimiento en forma de energía cinética y mediante cambios de presión en forma de energía potencial.

Las ondas sonoras necesitan un medio para propagarse, puede ser aire, agua o un cuerpo sólido. Este medio debe tener la propiedad de ser elástico, ya que el avance de las ondas sonoras a través de él se produce debido a movimientos de compresión y expansión. Si el medio es rígido estos movimientos no se producirían, por lo que las ondas sonoras no se moverían y la energía no se propagaría.

La intensidad acústica permite calcular la energía acústica teniendo en cuenta la medida de la superficie que atraviesa el sonido, la intensidad de dicho sonido o intensidad acústica y el tiempo durante el cual se va a producir dicho sonido. Por otro lado, la densidad de energía acústica o energía acústica por unidad de volumen representa la cantidad de dicha energía que se encuentra en una unidad de volumen determinado. Finalmente, La transformación de esta energía acústica es la responsable de poder emplear gran cantidad de dispositivos. Por ejemplo, los micrófonos o los altavoces son la mejor representación de cómo podemos hacer uso de este tipo de energía.

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