ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Ensayos Geniales


Enviado por   •  7 de Noviembre de 2013  •  3.847 Palabras (16 Páginas)  •  355 Visitas

Página 1 de 16

¿EXISTE UN PRIMER MOTOR LLAMADO DIOS?

La búsqueda de una Causa Primera que explique el ser y el obrar contingentes de todas las cosas de este mundo es precisamente la búsqueda de Dios, puesto que por Dios entendemos el ser que es causa de sí mismo y origen primero de cuanto existe.

Algunos sostienen que a Dios se le conoce de un modo directo, inmediato: que Dios se hace patente a nuestra experiencia.

Otros creen que a Dios se puede llegar por la fe, pero no por la razón. La fe es para ellos un modo de saber, pero no racional ni basado en la razón, sino completamente ajeno a ella.

Otros, afirman que Dios no es evidente (en esta vida), pero tampoco es inasequible para la razón. Según ellos, la existencia de Dios es demostrable racionalmente. Tal es la posición ortodoxa católica. Si Dios fuera evidente (como para los ontologistas), la fe carecería de todo mérito moral; si fuera inasequible a la razón (como para agnósticos y fideistas), la teología no podría ayudarse de la razón ni ésta nos conduciría a la verdadera causa de las cosas.

VERDAD FUNDAMENTAL Y COMPROBABLE

La existencia de Dios es la verdad fundamental de la religión, el punto de partida. No tendría siquiera sentido hablar de la fe, de la religión o del dogma sin antes dejar sentada esta verdad. La razón humana, con su sola fuerza, sin ayuda de lo sobrenatural, puede llegar a demostrar la existencia de Dios, y a deducir muchas de sus perfecciones.

Ciertamente no podemos comprender a Dios, pues siendo infinito, no puede abarcarlo el limitado entendimiento humano; pero podemos conocerlo.

Lo anterior es, además, verdad de fe. El Concilio Vaticano I afirma que "La misma Santa Madre Iglesia sostiene y enseña que Dios, principio y fin de todas las cosas, puede ser conocido con certeza por la luz natural de la razón humana partiendo de las cosas creadas" (Const. dogm. Dei Filius, c. 2, Dz. 1785).

Necesidad de querer conocer a Dios

El querer conocer a Dios es necesario para llegar a conocerlo. No basta tan sólo aplicar la inteligencia, sino que se requiere, además, de rectas disposiciones morales (buen comportamiento cara a Dios), pues de lo contrario es imposible conocer a Dios.

Aunque la existencia de Dios es una verdad que puede ser conocida por todos los hombres, sin embargo, en su conocimiento "el entendimiento humano encuentra dificultades, ya a causa de los sentidos o imaginación, ya por las concupiscencias derivadas del pecado original. Y así sucede que, en estas cosas, los hombres fácilmente se persuaden de que es falso o dudoso lo que no quieren que sea verdadero" (Pío XII, Enc. Humani Generis, 12-VIII-1950, Dz. 2305).

Conocimiento natural de Dios a partir de las criaturas

Por ser Dios infinito en toda perfección, no lo podemos conocer directamente, sino que deducimos su existencia por medio del mundo y de las cosas creadas, que nos llevan al conocimiento del Creador.

Así dice San Pablo: "En efecto, las perfecciones invisibles de Dios,.... a saber: su eterno poder y su divinidad, se han hecho visibles a la inteligencia, después de la creación del mundo, a través de las cosas creadas" (Rom. 1, 20).

La fe confirma la existencia de Dios, y además nos lo propone como el autor del orden sobrenatural.

DEMOSTRACION RACIONAL DE LA EXISTENCIA DE DIOS

La existencia de Dios no es de evidencia inmediata para nosotros, sino que es fruto de un proceso discursivo, de un razonamiento.

Para Santo Tomás, la distinción filosofía/teología descansa en la separación entre orden natural y sobre- natural.

El orden de conocimiento natural procede de la razón humana, da lugar a la filosofía y tiene carácter demostrativo

El orden sobrenatural procede de la revelación y de la fe y es un conocimiento oscuro; algunas de sus verdades están al alcance de la razón, y otras la exceden.

Ambos conocimientos provienen, en último término, de Dios, por lo que entre ellos no puede haber contradicción.

Entre las dos esferas de conocimiento cabe la colaboración, dando lugar a la teología: la revelación puede orientar a la razón y le permite evitar errores; la razón le sirve a la fe para aclarar y defender los misterios de la revelación.

Algunas creencias nunca podrán ser demostradas por la razón y otras sí, como los preámbulos de la fe (existencia de Dios e inmortalidad del alma).

Habrá dos tipos de teología:

La racional o natural, que llega a Dios utilizando una capacidad ligada a la naturaleza humana, la razón.

La teología cristiana o sobrenatural: su fundamento es la doctrina revelada y la fe, pero usa también de la razón para conseguir un orden científico como arma dialéctica.

EL PROBLEMA DE SU DEMOSTRACIÓN.

Podríamos pensar que Dios puede ser perceptible directamente por la razón, al modo como vemos las verdades del tipo "los triángulos tienen tres lados"; a estas proposiciones las denomina Sto. Tomás evidentes en sí mismas; en ellas el predicado se incluye en el sujeto pues en la esencia de sus objetos se encuentra la propiedad referida en la proposición.

Son, además, evidentes para nosotros cuando las vemos como verdaderas con solo comprender el concepto sujeto. Si la existencia de Dios se incluyese en su esencia, entonces podríamos captar la verdad de la proposición “Dios existe” con la mera comprensión del término "Dios".

Algunos filósofos (San Anselmo por ejemplo) creerán que se puede mostrar la existencia de Dios basándose en ese supuesto (el "argumento ontológico"), en donde Santo Tomás mantendrá, por el contrario, que no cabe una argumentación de ese género porque la esencia de Dios no nos es dada con la misma claridad que por ejemplo, la esencia del triángulo. Ello quiere decir que la proposición "Dios existe" no es evidente para nosotros, aunque sea evidente en sí misma (pues es verdad que la existencia se incluye en la esencia de Dios).

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (23 Kb)  
Leer 15 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com