LA ENFERMEDAD, LA MEDICINA Y LA SANIDAD EN ROMA, HASTA ANTES DE GALENO

LA ENFERMEDAD, LA MEDICINA Y LA SANIDAD EN ROMA, HASTA ANTES DE GALENO

En el año 146 A. C. la medicina griega emigra a Roma, aunque los romanos no veían con buenos ojos los médicos de esos entonces, dándoles poca credibilidad. Los romanos confiaban principalmente en las hierbas medicinas y los medios simples domésticos.

En esos años los pueblos primitivos de Roma eran dominados por los guerreros del norte, lo que provocó una mezcla de culturas, a la cual llegaron los Estrucos.

Los Etrucos (800 – 500 A. de C.)

Raza oriental, que se asentaron en el norte y centro de Italia, dando origen a los primeros grupos humanos que surcaron las azules aguas del Mar Tirreno. En la antigua Etruria se desarrollaron a través de los Lucumones o sea de sus Sacerdotes “predestinados”; ideas médicas mágicas que en mucho recuerdan a los arúspices caldeos con sus adivinaciones por medio de la observación de las vísceras o “extispicium”. En esta cultura se realizaron varios estudios de anatomía principalmente en las ovejas de las cuales se les estudiaba el hígado, estructura que les servía de referencia para la adivinación de enfermedades.

Hacían trabajos muy buenos con metales, como el oro y el cobre, con los que hacían prótesis dentarias.

Existían demonios afrodisiacos, representados como jóvenes mujeres con alas, que tenían la función de protectoras en el parto, oros llamados “febris” que producían la fiebre. Al igual que los demonios existían dioses como; Apolo y Marte, protectores de la salus; Castor y Pólux, gemelos hijos de Leda que eran dioses saludables; Carna, divinidad romana, Mutus y Tumutus, relacionados con la concepción femenina y la fecundación masculina; Priapo, dios de los bosques y de la fertilidad; Lucina, diosa protectora de la menstruación y de los partos. Y algunas Diedades secundarias relacionadas con la fecundidad y las relaciones sexuales; Uterina, Cunina, Mena y Rumina.

La educación en la medicina era por parte de los padres de familia que eran los depositadores de la medicina empírica y las madres las mejores auxiliares para los partos.

Los precursores

Asclepíades de Bitinia (en el siglo II A. de C.), describió la teoría de corpuscular; pequeños corpúsculos circulaban en el organismo a través de los canalículos o poros y que estos eran los que conservaban la vida.

Asclepíades, no creía en la fuerza curadora de la naturaleza y combatió esta idea; se estatuyeron en cambio terapias mecanofísicas e higiénico-dietéticas.

Se propago la escuela metódica, después de Asclepíades se presentó en el horizonte médico romano, Temisón de Laodicea, que dividió la patología en estados de tensión “strictus” y estados de relajación “laxus”, de tal manera que al primero correspondían todos aquellos estados de contracción o de constipación y al segundo en cambio la parálisis y estados de relajación.

Sorano de Efeso, “príncipe de los metódicos”, fundador de la obstetricia y de la ginecología, quien escribió el libro de las enfermedades de la mujer, decía que el útero humano no puede tener una movilidad independiente del resto del cuerpo, decía que la matriz estaba conectada a través de membranas del gas que hacía adelante con la vejiga, atrás con el recto y a los lados y atrás con los huesos pélvicos. Sostenía que la boca del útero se encontraba en el centro de los órganos genitales femeninos.

Describió los vasos y nervios, el útero y también los ovarios, dijo que la matriz no era esencial para la vida ya que en algunos casos podría extrerse sin causar la muerte.

Diagnosticaba que cuando el embarazo se veían las mamas caídas y contraídas, se produciría el aborto, describía las membranas fetales e igualmente enumeraba 4 vasos en el cordón umbilical.

Su obra se trató ampliamente de la metritis crónica, la mola, el desplazamiento uterino y el prolapso, en su libro se encontraban prohibiciones en relación con el aborto y consejos para la atención obstétrica y así recomendaba la defensa del perineo y el vaciamiento de la vejiga con sondas metálicas, que se usaban desde esta época. También describió con exactitud técnica de la embriotomía, que era una operación que se practicaba en casos de gravedad de la mujer embarazada. Asimismo consejos para el tratamiento de la sección del cordón umbilical, con doble ligadura en el recién nacido; así como la necesidad de lavarle los ojos con aceite al neonato, las normas

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