Marco jurídico de los residuos sólidos en Panamá

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Índice

1.        Introducción        4

1.1 Objetivos        4

1.2 Antecedentes        4

1.2.1 Marco jurídico de los residuos sólidos en Panamá        4

1.2.2 La gestión de residuos sólidos en la Universidad Tecnológica de Panamá        5

1.3 Compostaje de FORSU        6

2. Propuesta de tratamiento de residuos        8

2.1 Planta de compostaje        8

2.1.1 Esquema básico de la planta        8

2.2 Implantación de la recogida selectiva        10

2.3 Programa de concienciación ambiental        11

3. Coste aproximado de implantación y explotación del sistema de tratamiento propuesto        11

3.1 Planta de compostaje        11

3.1.1 Fase de construcción        12

3.1.2 Fase de explotación        12

3.2 Recogida selectiva        13

3.2.1 Fase de implementación        13

3.2.2 Fase de explotación        14

3.3 Programa de concienciación ambiental        14

4. Bibliografía        15

1. Introducción

1.1 Objetivos

El objetivo principal de este proyecto es el diseño de un sistema de gestión y tratamiento de residuos orgánicos generados en el entorno de la UTP mediante tecnologías ambientalmente sostenibles y económicamente viables.

1.2 Antecedentes

1.2.1 Marco jurídico de los residuos sólidos en Panamá

Si bien es cierto, el Poder Ejecutivo ha emitido varios Decretos para hacer frente a temas específicos, como lo son los rellenos sanitarios y los residuos peligrosos, y el Poder Legislativo ha emitido leyes que han tocado algunas aristas del problema en la Ley General del Ambiente, el país carece de una ley general de residuos que venga desarrollar los principios de la normativa en términos técnicos, científicos y económicos; que integre principios modernos de responsabilidad ambiental, civil y penal y aclare las inconsistencias actuales en sector institucional y corporativo.

La República de Panamá establece, a partir de 1999, que la totalidad de los municipios de Panamá tienen la responsabilidad por el manejo de los residuos sólidos, realizando las tareas de recolección, transporte, tratamiento y eliminación. Algunos municipios han transferido esta responsabilidad, total o parcialmente, a la empresa privada.

Actualmente la gestión privada de residuos tiene una gran dependencia de los rellenos sanitarios, que presentan múltiples problemáticas como son la ocupación del suelo, la generación de olores, la contaminación del subsuelo e importantes emisiones de efecto invernadero a la atmosfera entre otros. Además con los rellenos sanitarios se entierran «recursos valiosos», se pierden beneficios económicos potenciales, se dejan de crear puestos de trabajo en el sector de la gestión de residuos y se empeora la salud humana y el ambiente, prueba de esto está en que el vertedero de Cerro Patacón, hoy día alberga 50m más de altura de residuos sólidos urbanos de lo que permite su capacidad y las empresas privadas que los manejan solo se limitan a cobrar por tonelada de residuo sólido que reciben.

Las causas podrían estar en la falta de políticas de prevención en la generación de residuos, falta de incentivos para encontrar posibilidades diferentes a los vertederos y falta de adecuadas infraestructuras de gestión.

Actualmente se dispone de tecnologías ambientalmente mas adecuadas, que permiten revalorizar los residuos así como minimizar su impacto ambiental y reducir la cantidad final de residuos que se gestionan mediante rellenos sanitarios. Para optimizar la gestión de los residuos será necesaria la aplicación de nuevas políticas de gestión de las basuras combinando instrumentos jurídicos, administrativos y económicos; y es allá hacia donde la Republica de Panamá debería dirigirse como país.

1.2.2 La gestión de residuos sólidos en la Universidad Tecnológica de Panamá

La Universidad Tecnológica de Panamá surge a partir de la antigua Facultad de Ingeniería de la Universidad de Panamá, que en 1975 pasó a ser el Instituto Politécnico y, ante la necesidad de un nuevo modelo de Universidad, se transforma en la Universidad Tecnológica de Panamá mediante la Ley 18 de 13 de agosto de 1981.

Actualmente, la UTP cuenta con una área de 60 hectáreas de bosques protegidos donde se encuentran 4 edificios que albergan las distintas facultades, oficinas administrativas y cafeterías. Su demanda estudiantil se ha incrementado de 5,735 estudiantes en 1981 hasta alcanzar 18,502 en el 2012. Además, cuenta con una planta docente de 1,575 profesores, 30% a tiempo completo y 1,975 administrativos.

Este gran incremento de demanda estudiantil ha comportado a su vez un gran incremento en la generación de residuos, especialmente de la Fracción Orgánica de los Residuos Solidos Urbanos (FORSU)  generados en las cafeterías, se estima una producción mensual de 30 toneladas de residuos orgánicos. Actualmente la gestión de estos residuos es realizada por la empresa URBALIA  y consiste en el depósito de estos residuos en el relleno sanitario de Cerro Patacón, esta gestión tiene un elevado coste aproximado de 17 $/t FORSU, además del gasto en combustible (215 $/mes) debido a la recogida y transporte de la FORSU al relleno sanitario

Tomando en cuenta lo anterior, la UTP  se plantea opciones alternativas de tratamiento que incluyan una importante mejora ambiental así como una minimización de los gastos generados. La UTP con este esfuerzo se posiciona como un importante motor para el cambio hacia una gestión sostenible de los residuos sólidos urbanos en Panamá .

1.3 Compostaje de FORSU

De entre las diferentes tecnologías disponibles actualmente, los procesos biológicos se presentan como la opción más apropiada para el tratamiento de la FORSU debido a los reducidos impactos ambientales, en comparación a procesos físico-químicos (incineración) o al depósito en rellenos sanitarios o vertederos, y a los bajos costes de instalación y operación.

De entre todos los procesos biológicos que se aplican en la actualidad a nivel industrial para el tratamiento de la FORSU, el compostaje es la opción más utilizada debido a:

• que es la tecnología más sencilla y robusta
• el bajo consumo energético y de recursos
• los bajos costes de instalación y operación en comparación al resto de tecnologías biológicas (digestión anaerobia)
• que los residuos orgánicos se valorizan, obteniendo como resultado del tratamiento una enmienda orgánica (compost) que puede utilizarse como fertilizante orgánico

El compostaje se define como un “proceso de descomposición y estabilización biológica aerobia de substratos orgánicos, bajo condiciones que permiten el desarrollo de temperaturas termófilas, del cual se obtiene un producto estable, libre de patógenos y semillas, que puede ser aplicado de forma beneficiosa al suelo”.

Este proceso se lleva a cabo en 4 etapas consecutivas:

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Que se corresponden con las siguiente operaciones:

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Existen diferentes tecnologías aplicadas al compostaje, que varían en costes de operación e inversión pero también en el tiempo de operación necesario para obtener un material estable. Entre estas tecnologías se encuentran de menos a más intensivas y de más a menos costes de inversión y operación:

1. Pilas estáticas
2. Pilas volteadas
3. Pilas pasivas aireadas
4. Trincheras
5. Túneles

Tanto las trincheras como los túneles se consideran como los tratamientos más avanzados tecnológicamente y se utilizan en aquellas zonas donde se produce una gran cantidad de residuos orgánicos y donde además no hay disponibilidad de suelo lejos de las poblaciones y por lo tanto los procesos de compostaje deben llevarse a cabo en espacios confinados y con un tratamiento de los gases generados para evitar molestias a las personas que habitan cerca de esas áreas.

Las pilas estáticas suponen la tecnología más simple y con menores costes de operación. Sin embargo, el proceso de compostaje no es del todo efectivo, en primer lugar porque se producen áreas de anaerobiosis (ausencia de oxígeno) con las consecuentes emisiones de olores y gases de efecto invernadero y en segundo lugar el proceso se puede extender durante más de 3 meses.

Mediante la utilización de pilas volteadas o pilas pasivas aireadas se consiguen unos resultados muy similares en términos de eficiencia del proceso, es decir, considerando el tiempo de necesario para llegar a tener un material estable, pero los menores costes de instalación y operación de las pilas volteadas, convierten a esta tecnología en la más apropiada y recomendable para el tratamiento de la FORSU generada en pequeñas poblaciones o comunidades (1).

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