ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Mi Identidad


Enviado por   •  2 de Marzo de 2014  •  1.698 Palabras (7 Páginas)  •  324 Visitas

Página 1 de 7

Mi identidad como hijo de Dios

Formado para servir a Dios

“Me hiciste con tus propias manos;

tú me diste forma”.

Job 10:8 (NVI)

“El pueblo que yo me he formado

contará mis alabanzas”.

Isaías 43:21 (PAR)

Dios formó a cada criatura de este planeta con un área especial de habilidades. Algunos animales corren, otros saltan, otros nadan, otros se encuevan, y otros vuelan. Cada uno tiene un papel particular a jugar, basado en la manera en que fueron formados por Dios. Lo mismo pasa con los seres humanos. Cada uno de nosotros fue diseñado de manera única, formado para hacer ciertas cosas.

Antes de diseñar un nuevo edificio, lo primero que se pregunta un arquitecto es: “¿Cuál será su propósito? ¿Cómo será usado?” La función intenta siempre determinar la forma del edificio. Antes que Dios te hiciera, decidió qué rol quería que jugaras en la tierra. Él planeó con exactitud cómo quería que lo sirvieras, y te formó para esa tarea. Eres de la manera que eres, porque fuiste hecho para un ministerio específico.

La Biblia dice: “Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras”. La palabra poema viene del griego que significa “hechura”, “artesanía”. Eres una obra de arte hecha a mano por Dios. No eres hecho en una línea de producción, ni ensamblado ni producido en cantidades industriales. Eres un diseño hecho a la medida, una pieza original. Dios deliberadamente te hizo y te formó para que le sirvieras de cierta manera que hace que tu ministerio sea único. Con sumo cuidado mezcló un cóctel de ADN con el que te hizo. David alabó a Dios por ese increíble cuidado personal y lo detalla: “Tú hiciste todo lo delicado, las partes interiores de mi cuerpo y las uniste en el vientre de mi madre. ¡Gracias por hacerme maravillosamente complejo! Tu hechura es prodigiosa”. como Ethel Waters dice: “Dios no hace chatarra”.

Dios no sólo te formó antes que nacieras, sino que planeó cada día de tu vida para apoyar su proceso para formarte. David continúa diciendo: “Cada día de mi vida fue grabado en tu libro. Cada momento fue organizado antes de que el día pasara”. Eso quiere decir que nada de lo que pasa en tu vida es irrelevante. Dios usa todo eso para formarte para que ministres a otros y te forma para servirlo a él. Dios no desperdicia nada. Él no te daría habilidades, intereses, talentos, dones, personalidad y experiencias a menos que tenga la intención de usarlos para su gloria. Si identificas y entiendes esos factores puedes descubrir la voluntad de Dios para ti.

La Biblia dice que eres “maravillosamente complejo”. Eres una combinación de muchos factores diferentes. Para ayudarte a recordar cinco de esos factores, hice un acróstico sencillo con la palabra FORMA (indistintamente usaré cualquier sinónimo de esta palabra).

En este capítulo y el próximo estudiaremos esos cinco factores y le daremos seguimiento, te explicaré cómo descubrirlos y usarlos.

CÓMO TE FORMA DIOS PARA TU MINISTERIO

Siempre que Dios nos da una asignación, nos equipa con lo que necesitamos para cumplirla. A esta combinación de aptitudes se le llama moldear o dar FORMA:

Formación espiritual

Oportunidades

Recursos

Mi personalidad

Antecedentes

FORMACIÓN ESPIRITUAL

Dios le da a cada creyente dones espirituales para usarlos en el ministerio. Son habilidades especiales dadas por dios a los creyentes para servirle. La Biblia dice: “El que no tiene el Espíritu no acepta lo que procede del Espíritu de Dios”. No puedes obtener los dones espirituales o merecerlos, ya que son regalos. Son una expresión de la gracia de Dios para ti. “Cristo ha repartido generosamente sus dones en nosotros”. No puedes escoger los dones que quieras tener; Dios es quien los determina. Pablo explica: “Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte a cada uno según él lo determina”.

Puesto que Dios ama la variedad y quiere que seamos especiales, no nos dio el mismo don a todos. Por otra parte, ningún individuo recibe todos los dones. Si los tienes todos, no tienes necesidad de otro, y eso podría estropear algunos de los propósitos de Dios; Él nos enseña a depender unos de otros.

Tus dones espirituales no se te dieron para tu propio beneficio sino para el de otros, así como los de ellos son para tu beneficio. La Biblia dice:”A cada uno se le da una manifestación especial del Espíritu para el bien de los demás”. Dios lo planeó así para que tuviéramos necesidad unos de otros. Cuando usamos nuestros dones juntos, todos nos beneficiamos. Si otros no los usan, no los disfrutas, y si no usas los tuyos, ellos tampoco se benefician. Ese es el motivo por el que se nos manda descubrir y desarrollar nuestros dones espirituales. ¿Has invertido tiempo en descubrir cuáles son tus dones espirituales? Un don sin descubrir no vale nada.

Olvidar esas verdades básicas acerca de los dones, siempre causa conflictos

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.2 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com