Oligoelementos

Cobre

Funciones

La principal función del cobre es formar parte de diversas enzimas (oxigenasas) que se caracterizan por participar en reacciones en las cuales se produce el oxígeno molecular o especies similares (radicales superóxido), formándose normalmente agua o peróxido de hidrógeno como producto de la reacción.

• Ayuda al transporte del hierro.

• Interviene en la formación de hemoglobina, glóbulos rojos y diversas enzimas.

• Participa en la degradación de hidratos de carbono, lípidos y proteínas.

• Interviene en la asimilación de la vitamina C por parte del cuerpo.

• Formación de colágeno

• Oxidación del hierro

El cobre trabaja con el hierro para ayudarle al cuerpo a la formación de los glóbulos rojos. También ayuda a mantener saludables los vasos sanguíneos, los nervios, el sistema inmunitario y los huesos.

Absorción y Transporte

La absorción del cobre tiene lugar en el intestino delgado, entrando por transporte activo, que para esto debe transformarse con una sola valencia e ingresa con el transportador CTR1 , en la superficie mucosa de las células ingresa por difusión facilitada por el transportador de metales divalentes En el interior de las células intestinales capaces de absorber el cobre, los iones Cu+2 se encuentran unidos a la metalotioneína (almacenador de cobre) frente a la que muestran una mayor afinidad que el zinc. Se cree que la cantidad de cobre que se absorbe depende de la cantidad de metalotioneína en las células mucosas. En total, se absorbe entre el 25% y el 60% del cobre aportado.

El cobre es liberado al torrente sanguíneo por transporte pasivo o activo de este el 90% del cobre absorbido es incorpora a la ceruloplasmina plasmática. El resto se une a la albúmina, transcuperína y otras proteínas plasmáticas. El cobre es transportado al hígado a través de la vena porta. En los hepatocitos, el cobre es captado por las metalotioneínas para su almacenamiento o se incorpora a varias cuproenzimas. Las metalotioneinas cargadas de cobre son almacenadas en los lisosomas de los hepatocitos, evitando de esta manera la toxicidad propia del metal libre ionizado. Cuando es necesitado, el cobre es de nuevo incorporado a la ceruloplasmina y excretado al plasma.

El cobre en exceso es eliminado por vía biliar y excretado en las heces.

La absorción aparente y la excreción biliar del cobre se ven reducidas cuando se produce una gran ingesta de hierro. Algunos aminoácidos y el citrato incrementan la absorción de cobre, mientras que

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