TEORIA GENERAL DE SISTEMAS

PASADO

PRESENTE

FUTURO

La teoría de la información en el pasado era principalmente objetiva, y se dividía en los dos significados del término latín    “informatio”, sobre todo el de sentido ontológico, que define la interpelada palabra como acción de dar forma a algo material, y el de sentido epistemológico, que le define como la acción de comunicar conocimiento a una persona. Esto se afirma porque en algunos textos de la filosofía latina clásica medieval, el termino “informatio” tiene un uso técnico y una relación explicita a las nociones griegas tan cargadas de contenido filosófico, como es eidos (idea), y también términos relacionados como es el caso de typos (impresión) o prólepsis (representación).

La teoría de la información en el presente es preponderantemente subjetiva, por lo cual personas de diferentes ámbitos han presentado distintos conceptos, lo que ha generado una extensa discusión, por lo que hay una búsqueda de una teoría unificada y objetiva de la información.

Es importante mencionar que, en el presente, en el ámbito social, la información es vista cada vez más como algo elemental para el funcionamiento de la sociedad junto al capital, el trabajo y las materias primas, también que cada vez se relaciona más con el internet y los aparatos tecnológicos, realmente no hay un teoría concreta, pero sí una tendencia, cuestionada por varios autores, a relativizar, e incluso a eliminar el aspecto subjetivo.

La teoría de la información en el o para el futuro, es objetiva. El ser (pensado verbalmente), se da. Lo que es, se da como forma en el caso de procesos naturales o, como “oferta de sentido” en el caso de sistemas psíquicos y sociales. Información es, en ambos casos, “Un resorte” de selección, el concepto moderno, está enraizado etimológicamente en términos como idea, forma, y también significa “decir algo a alguien”, es decir, en el concepto de logos, y con él, en el nacimiento mismo de la filosofía, en cuanto que el Sócrates platónico  sustituye el esquema heterónomo subyacente al concepto de mensaje por un método basado en decirse y darse razones mutuamente, en vez de simplemente dejare decir algo por el otro.