Alejarse del hogar...

Alejarse del hogar…

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El abuelo un hombre de campo sabio, tranquilo y muy vivaz, el cual utiliza un sombrero con un estilo muy personal diariamente ve como su nieto “Diego” adolescente de 13 años va cambiando con cada año que cumple. Estos cambios van perfilando una rebeldía propia de la etapa que vive y como esos cambios intervienen en la relación de su nieto con su madre.

Diariamente al ir a su faena diaria cerca de casa y de la escuela donde estudia su nieto, se encuentra  a ciertos “amigos” de Diego. Escucha muy sagazmente cuando hablan entre ellos de como Diego debe independizarse, que ya no es un niño y que debe enfrentarse a su mama.

El abuelo al estar prevenido del hecho, busca a su hija (madre de Diego) para contarle de la situación, ella conscientemente escucha cada palabra que su padre le dice sobre lo que se le avecina con Diego.

La madre preocupada le pide a gritos a su padre que la ayude con su hijo, no sabe cómo manejar la situación con un niño de 13 años rebelde y con ganas de alejarse del hogar.

Por un lado intervienen en los pensamientos de Diego los consejos de sus “amigos”, por otro lado el sentimiento de represión que siente por parte de su madre, la cual decide todo por él, esto según su punto de vista.

El abuelo, muy sabio y prevenido descubre a Diego cuando trata de escaparse, lo consigue con bolso en mano y unas ganas terribles de irse de su hogar. Lo toma con un abrazo fuerte, se sientan en un árbol caído y le pregunta ¿Sabes la diferencia entre lo que es un hogar y una Casa? ¿Sabes por qué las aves pueden volar?, pues hijo escúchame con atención lo que tengo que decirte y te lo diré con mucho amor.

Al alejarte de tu casa solo dejas un espacio físico donde habitas, comes, duermes, etc. Al alejarte del hogar dejas tus relaciones con tus seres amados,  como tu madre y yo, el hogar es el lugar de donde tus pies pueden alejarse, pero no tu corazón. Realmente es perder el alma.

Lo otro Diego es que las aves se preparan para emprender su vuelo, no vuelan solo por el hecho de que tienen alas, lo hacen conscientemente al saber que ya están preparadas.  Cuando imprudentemente quiere volar antes de tiempo, la caída puede lesionarle de por vida. No te adelantes a tu tiempo. Tu madre y los que te amamos sabemos que no es tu tiempo de volar ni de alejarte del hogar, esto lo harás cuando conscientemente y emocionalmente estés preparado Además, el pajarito que se lesiona no solo no puede volar sino que no regresa al nido.

Diego con lágrimas en los ojos agradece con un abrazo las enseñanzas de su abuelo, busca a su madre, la abraza y le dice que la ama, que en algún momento de su vida se alejara de casa, pero no de su hogar.

El abuelo satisfecho viendo la escena tan conmovedora se retira a sus aposentos y Diego agradecido por tan especial enseñanza.

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