Cuento De Cienciaficcion

Segregacionista

Isaac Asimov

El cirujano levantó la mirada, sin expresión alguna.

-¿El hombre está preparado?

-Preparado es un término relativo –contestó el ingeniero médico-. Nosotros estamos preparados, él está inquieto.

-Siempre lo están… Es una operación seria. Lo veré aquí mismo. En un lugar pequeño e íntimo y puede resultar confortante.

El cirujano oprimió un botón y la puerta de doble hoja se abrió enseguida. El paciente entro en su silla motorizada, con la enfermera caminando al lado.

-Puede retirarse, enfermera- le indicó el cirujano-, pero aguarde afuera. La llamaré. Le hizo una señal al ingeniero médico, quien se marchó con la enfermera. La puerta se cerró. El hombre de la silla los miró por encima del hombro mientras salían. Era un paciente de alta prioridad y recibía buenos cuidados… Pero parecía de mal humor.

-¿Empezamos hoy?- preguntó.

El cirujano asintió con la cabeza.

-Esta tarde, senador.

-Entiendo que llevará semanas.

-La operación en sí, no, senador. Pero hay varios elementos secundarios a considerar. Se deben llevar a cabo renovaciones circulatorias y ajustes hormonales. Son procesos delicados.

-¿Son peligrosos, doctor?

-Todo es peligroso –dijo sin rodeos-. Nos tomamos tiempo para que sea menos peligroso. Debo pedirle que tome una decisión. Se le puede proporcionar uno de estos dos tipos de cibercorazón; de metal o de…

-¡Plástico! ¿Ésa es la alternativa que iba a ofrecerme, doctor? ¿Plástico barato? No quiero eso. He elegido ya. Quiero metal. Me han dicho que la elección depende de mí. ¿no es así?

El cirujano asintió con la cabeza.

-En la práctica, el paciente elige aun cuando las alternativas de procedimiento no tienen el mismo valor, como en este caso.

El senador entrecerró lo ojos. -¿Me está diciendo que el corazón de plástico es mejor?

-Depende del paciente. En mi opinión, en el caso de usted lo es.

-El corazón humano que tengo ahora dentro del pecho está agotado, aunque aún no he cumplido los sesenta. No quiero otro similar, gracias. Quiero algo mejor.

-Todos queremos algo mejor para usted, senador. El cibercorazón de fibra dará mejor resultado.

-¿Y no ocurre lo mismo con el de metal?

-Sí. El ciber metálico es de aleación de titanio y…

-¿Y no se gasta? ¿Y es más fuerte que el plástico, o la fibra o como quiera usted llamarlo?

-El metal es físicamente más fuerte que el plástico, pero la fortaleza mecánica no es punto a discutir.

Esa fortaleza mecánica no constituye un beneficio, pues el corazón está bien protegido.

El

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