DE NOSOTROS DEPENDE

“De nosotros depende”.

¿Cómo somos?, ¿Cómo nos ven los demás?, ¿Tendrá que ver la personalidad con lo que realmente llevamos dentro?, son peguntas cuyas respuestas conocemos pero que sin embargo, nos cuesta expresar, identificar y detallar; no estamos completamente claros de quienes somos realmente y que sorpresivamente se nos enfrente con dichas interrogantes nos pone nerviosos puesto a que muy pocas son las veces en las que diagnosticamos en que tipo de personas nos hemos convertido a través del tiempo; el autoconcepto es la imagen que tiene cada persona de sí misma, resaltando que dicho termino tiende a confundirse en ocasiones con la autoestima, que no es más que la valoración de nuestra manera de ser.

De igual forma, Alta o baja la autoestima influye directamente en el autoconcepto, la percepción de nuestra persona depende del valor que le demos a al ser que día a día vamos cultivando; Abrahán Maslow identifica las necesidades humanas en una jerarquía que describe principalmente las necesidades de aprecio de un individuo por cuenta propia o por responsabilidad del entorno, entonces ¿dependerá de nosotros o de los que nos rodean el nivel de autoestima que tengamos?, Maslow afirma que el aprecio se debe generar desde la persona misma (el amor propio, la confianza en sí mismo, la pericia, la suficiencia entre otros) y el respeto y la estimación se recibe por parte de otras personas (el reconocimiento y la aceptación).

De acuerdo a lo anterior, es válido agregar que todos los seres humanos tenemos una imagen mental de quienes somos, el aspecto que tenemos, en que somos buenos y cuáles son nuestras debilidades, además, gran parte de ese autoconcepto está basado en la interacción con otros y nuestras experiencias vitales, ¿Qué concepto tengo de mí? Una buena pregunta, si posee una autoestima alta o buena estaría fácil de responder, usted será el mejor, solo hay que cuidar que dicha actitud no le permita caer en el “ego”, si por el contrario no goza de buena autoestima quizás tenga problemas para identificarse; hay que mantener siempre la seguridad de lo que somos, pero no se debe molestar a otros ni opacar sus habilidades ¡CUIDADO!

De igual forma, no debemos permitir que ninguna otra persona afecte nuestra autoestima con juicios externos, ya que al ser influyente en el autoconcepto y este a su vez ser dinámico (evoluciona y cambia) y se retroalimenta positiva o negativamente por el entorno social, siendo determinantes las opiniones o valoraciones de las personas, hay que identificar cuando las críticas y las sugerencias son constructivas para sacarles provecho y enriquecer el autoconcepto. ¿Funciona el auto cocimiento en nuestra vida? ¿Conlleva al alcance del “éxito”? Ana Muñoz escritora del blog ¿Qué es el éxito? Define el mismo como “el alcance de las metas deseadas”, conocernos a nosotros mismos y saber de qué somos capaces sin duda contribuye a ello.

Por otra parte, según Ana Muñoz “lo más importante no es tener éxito en una determinada cosa que hagamos, sino lograr una sensación de éxito a nivel general, en tu vida como un todo”, por tanto el éxito nos conduce a tener una vida satisfactoria incluso a pesar de nuestros posibles fracasos en cosas concretas. ¿Hay que fracasar para conseguir el éxito? El refranero popular dice que “todos los caminos llevan a Roma”, sin embargo, no sabemos que nos deparan esos pasajes; si de algo hay que estar claros, es que con miedo a fracasar no se triunfa y el éxito está del otro lado del miedo, otro escritor Carlos Cobián en su monologo “Éxito y fracaso: 2 caras de la misma moneda” comenta que “fallar es parte del proceso de aprendizaje que nos llevará a conseguir mejores resultados. Esto se aplica tanto al ámbito personal como laboral, donde el éxito

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