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El maltrato psicologico de un hombre hacia una la mujer.


Enviado por   •  22 de Noviembre de 2015  •  Ensayos  •  1.362 Palabras (6 Páginas)  •  224 Visitas

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Diany L. Sánchez Álvarez

P00499005

Literatura y comunicación: Poesía y Teatro

GESP 1102

El maltrato psicologico de un hombre hacia una la mujer.

        En este ensayo se estará discutiendo diferentes temas que abarcan el maltrato psicológico de un hombre hacia una mujer. Para poder entender de que se trata este tema primero debemos conocer el significado de maltrato psicológico. El maltrato psicológico es un tipo de comportamiento frecuente de carácter físico, verval, activo o pasivo, que atenta a la estabilidad emocional de la víctima, de forma continua y sistemática. Su objetivo es hacer sufrir a la víctima mediante la amenaza, culpabilización, desprecio o humillación aprovechando el amor o el cariño que esta siente hacia su agresor. El maltrato psicológico es un tipo de maltrato que es difícil de reconocer y evaluar ya que la gravedad se estima por su frecuencia e impacto psicológico causado a su víctma. Muchas personas lo asocian con las malas relaciones de parejas, el maltrato psicológico puede darse en diferentes ámbitos tales como: de pareja, de familia o de trabajo.

        Durante mi niñez viví rodeada de diferentes tipos de maltratos, entre ellos el maltrato físico, que se me hizo fácil identificarlo y el maltrato emocional que para esa etapa de mi vida no lo entendía. Recuerdo cuando escuchaba a mi padre gritarle a mi madre, tirar lo primero que encontrara de frente e incluso recuerdo en una ocasión que lo ví arrancando un lavamanos y tirarlo en el patio como si fuera una caja de zapatos, en ese momento me sentí atemorizada, temblaba de pies a cabeza y solo corría hacia debajo de mí cama y allí me quedaba dormida. En otra ocasión nos sentó en la sala, es un recuerdo que todavía tengo claro en mi mente, mi hermano y yo corrimos para ponernos a salvo. A través de mi adolescencia en el barrio donde me criaba la mayoría de mis amigos eran varones y cada vez que mi papá llegaba del trabajo si me encontraba jugando o hablando con alguno de ellos me gritaba que lo que tenía en la casa era una perra en celos. Cuando ya fuí adulta me caso y de ahí si que fue mi calvario. La persona que parecía ser la que me ayudaría y me protegería resultó ser una copia fiel y exacta de mi papá. En los primeros años de relación, dentro de las situaciones no era tan difícil pero cuando fueron pasando los años empezó a empeorar. Yo no entendía que era lo que estaba pasando pues era a lo que estaba acostumbrada desde niña. Cuando comienzo la relación yo dependía de él para todo: teléfono, transportación, económicamente y hasta para tener un techo (hogar). Claro todo estaba bien porque yo dependía de él, pero llegó el momento en el que yo deseaba ser independiente y desde ese momento en el que comenzaron los problemas recuerdo que yo salía a buscar empleo y no recibía respuesta ninguna, claro en número que tenía en la aplicación era de su celular. Al poco tiempo comienzo a trabajar y tenía dos momentos libres: uno de 15 minuto y otro de media hora, en esos momentos mi celular no se podía quedar sin carga o sin señal porque eran motivos para discusión. Yo no podía resolver mis asuntos ni tan siquiera hablarle a mi madre que me cuidaba a mis hijas porque el ya pensaba que eracon un hombre. Empecé a darme cuenta de que algo no era normal. Al pasar el tiempo me dan la plaza y él no se alegró, al contrario él tenía dos vehículos y hacía lo imposible para que yo no pudiera llegar al trabajo. Con todo y eso no me doy cuenta de que mi esposo lo que pretendía era controlar todo lo que e tratara de mí, vivía en tensión en todo momento. Cuando él me llevaba al trabajo iba orando por todo el camino para que al llegar no encontrarme ningún compañero del sexo opuesto porque sabía que era motivo para una pelea cuando llegara a la casa. Aún así sigo sin darme cuenta de que era lo que estaba pasando, olía mi ropa, me contaba el tiempo que hablaba por teléfono, escribía las millas de mi carro para luego verificar cuanto marcaba, tenía que pedir permiso para todo incluso para ir a ver a mi madre y llegaba a los lugares para asegurarse de que era cierto que yo me encontraba en el lugar.

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