Esa noche fría y tormentosa, Hayley que tan solo era una pequeña miro al cielo

Esa noche fría y tormentosa, Hayley que tan solo era una pequeña miro al cielo, al ver una estrella grande que solo iluminaba para ella, pensó en la vida; luego de eso llego a la conclusión de que la vida no es como la sociedad la pinta, sino como cada uno de nosotros queramos pintarla. A medida que pasaba el tiempo, ella fue queriendo mostrar su pensamiento pero como él era contrario a lo que la sociedad planteaba, la consideraban “loca”. Pasaron los años, aunque ya no era tan pequeña como antes, ella no desistió y siguió viendo la vida como un cuento de hadas, donde ella siempre iba a ser la princesa y la dueña de su mundo, la que consideraba la vida como lienzo que sería pintado solamente por ella, por sus pensamientos, sus tristezas e inclusive sus alegrías demostró al mundo que no se necesita estar “loca” para convertir su mundo en un cuento de hadas en que solo una persona puede empezarlo y al mismo tiempo darle el fin que considere mejor para él.

CAPITULO 1 (UN NUEVO COMIENZO)

Era una mañana fría de agosto, el sol apenas estaba por salir y ella ya estaba despierta. Realmente no había podido dormir en toda la noche solo de pensar que el día siguiente se convertiría en otra pesadilla. Esta situación se presentaba cada año, cada primer día de clases, cada último día de vacaciones, era una situación que no tenía solución. Pues Hayley odiaba volver al tormento de su vida. La consideraban la loca, la fea, la que nadie quería solo por tener un pensamiento diferente. Esa mañana antes de comenzar su pesadilla, tomo un cuaderno viejo y en él empezó a escribir:

“12 de agosto. Hoy terminan las vacaciones y un nuevo año escolar comienza. Un nuevo año de sufrimientos, de humillaciones y de torturas. Sé que ya bastante tiempo no escribía, pero realmente nada ha cambiado, sigo siendo la misma “loca” de siempre, la que sueña con príncipes azules, sirenas y gatos voladores, la que no deja de pensar que la vida es como una cuento de hadas. Para empezar este año he pensado en dejar de ser “loca”, seré una de esas chicas que solo piensa como la sociedad lo quiere; en maquillaje, peinados y chicos, básicamente esa será la “vida” que ahora llevare. Tratare de encajar en la sociedad, buscar amigas, asistir a lo que ellos llaman “fiestas” que para mí solo son reuniones de desubicados. Bueno básicamente empezare este año con un pensamiento diferente en la escuela pero con otro muy diferente fuera de ella.”

El reloj marco las 6 de la mañana. Ella como no era raro de su primer día, dejo que el tiempo pasara, corrió al armario y saco del el mismo uniforme que llevaba el año anterior. Tomo un poco de jugo de naranja, y salió hacia el auto.

CAPITULO 2 (BIENVENIDA)

Como todos los años, los padres de Hayley decidieron dejarla en la puerta de la escuela. Para ella eso no era lo más grato y mucho menos ese año que quería cambiar su forma de ser frente a sus compañeros. Al salir del auto, ella solo pensaba en que la tierra se la comiera, así que camino lo más rápido posible con la cabeza agachada, pero esto no pudo con las burlas de sus compañeros. En el pasillo como ella llevaba la cabeza agachada no vio que tropezó con un chico; sus libros resultaron todos en el suelo, al querer levantar sus libros vio junto a ellos una mano que le brindaba ayuda, levanto su cabeza y se dio cuenta que era “el chico más lindo de la escuela”. Hayley no supo que hacer simplemente quedo impactada con la mirada de él, pues ella nunca había creído poder encontrar el amor pero esta vez su mundo dio vueltas como sucedía en sus fantasías. Inmediatamente ella se levantó de un salto, pues se moría de la pena; por otro lado el muchacho se levantó y le dijo:

-¿Estas bien?- dijo el muchacho

-No te preocupes estoy bien, gracias- contesto ella con la voz un poco vibrante.

-¿No te he visto antes?- le pregunto el muchacho

-Sí, hemos sido compañeros de curso desde primero- contesto

-Nunca había visto los hermosos ojos que tienes, ¿Hayley? ¿Verdad?- dijo el muchacho

-Sí, esa soy yo- contesto con la voz tímida

-Bueno hablamos luego- dijo el muchacho partiendo del lugar.

A los pocos segundos de que el chico se fuera de ahí, la rodeo un grupo de chicas que habían observado cuando conversaba por unos minutos con él. Las chicas comenzaron hacerle muchas preguntas a Hayley, todas a la vez: ¿Qué te dijo? ¿Tiene linda voz? ¿Son algo? … Finalmente ella les respondió con una sola oración: “Él es hermoso”. Cuando las chicas se dieron cuenta que ella había cambiado inmediatamente acogieron a Hayley como una de ellas y durante el tiempo que hablaron antes de que la campana sonara, Hayley ya hacia parte de ellas.

Al parecer el nuevo año escolar de ella había empezado muy bien, nuevas amigas y mucho más importante por primera vez había experimentado el amor a primera vista.

CAPITULO 3 (¿VERDAD?)

Hayley se sentía feliz, pues tenía amigas y un nuevo amor. Durante todo el día ella no hizo más que pensar en Joseph, así se llamaba él, el amor de su vida. Durante todas la clases solo miraba por la ventana y en su cabeza creaba todo un mundo de fantasías junto a él. Cuando sonó la campana ella estaba preparando todo para irse cuando de repente Joseph apareció y le dijo:

-¿Qué vas hacer hoy?- dijo el muchacho

-Nada- respondió con la voz vibrante- creo que me iré a mi casa

-¿Quieres que te lleve?- pregunto

-No estaría mal- respondió emocionada- Vamos

Hayley organizo sus cosas lo más rápido posible y salió del aula para encontrarse con Joseph. A la salida de la escuela las amigas de Hayley la estaban esperando, pero ella con una sola señal les indico que se iría con él. Durante en camino a la casa de Hayley, el chico no dejaba de mirarla hasta un punto en que ella se intimido, entonces Joseph para romper la tensión, decidió hacerle una pregunta que dejo a la chica en shock:

-¿Tienes novio?

Inmediatamente la chica abrió los ojos y con una voz dulce le respondió:

-No y tú ¿tienes novia?

-No- le respondió- pero me gusta una niña y la tengo junto a mí ahora

Hayley no supo que decir, simplemente su fantasías se destruyeron y convirtieron en realidad, no hubo palabra alguna del tema hasta llegar a casa de ella. Justo en frente de la casa, antes de despedirse Joseph le dijo:

-Te llamo más tarde

-Claro- respondió- mi número es 5432124

Joseph lo único que hizo fue guardar el numero en su teléfono móvil, después de eso se cruzaron las miradas y finalmente se despidieron.

-Chao, te cuidas- dijo Joseph

-Chao, igual tu- respondió Hayley

Y finalmente la última mirada lo dijo todo, la conexión que tenían ellos dos era única, tan natural, tan tierna y suave. Hayley ya iba camino a la puerta pero sus miradas nunca se desviaron hasta que ella cerró la puerta.

Ese había sido el mejor día de su vida, de su corta vida. Para ella su mundo de fantasías se había hecho realidad, ella no podía pedir más; era la persona más feliz del mundo.

CAPITULO 4 (TRAICION)

Era una mañana cálida, como era habitual ella estaba despierta, tomo su cuaderno viejo y comenzó a escribir:

“13 de agosto, al parecer será una día soleado. Todas mis fantasías se convirtieron en realidad el día de ayer, me hizo bien cambiar de vida al parecer, nunca pensé que el amor llegara a mí y que me enamoraría a primera vista; que mis sueños y fantasías se hicieran realidad. Hoy pienso repetir el día de ayer y si puedo mejorarlo mucho mejor.”

Rápidamente tomo su uniforme, tomo un vaso de jugo como lo había hecho el día anterior y salió corriendo hacia la escuela.

Al llegar a la escuela, vio algo que la destrozo, simplemente su mundo de fantasías se había convertido en miles de pedazos. Joseph no era la persona que pensó, ella siempre había sido una de tantas con las que estaba jugando. Sin rencor pero con tristeza, Hayley camino hacia la escuela con la cabeza agachada; cuando casi llegando a la puerta, Joseph se dio cuenta que ella se había visto todo, un simple beso que le cambio la vida. Joseph lo único que hizo fue caminar hacia ella, la tomo del brazo y solo le dijo:

-No es lo que parece- dijo con la voz tímida- es solo una amiga.

Inmediatamente una lagrima broto por la mejilla de la joven, su corazón se hizo pedazos, su alma dejo de tener el color rosa que siempre tenía, dejo de ser la niña inocente que había sido. Hayley no supo más que hacer sino salir corriendo.

En ese momento solo pudo pensar que el amor era lo peor que había experimentado en su joven vida.

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