Informe de cuentos
anitacansecoInforme3 de Noviembre de 2016
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ESCUELA NORMAL DE SINALOA
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Literatura infantil y creación literaria
-Literatura infantil: Cuentos infantiles-
Profesora: María Cristina Plascencia Medina
Alumna: Ana C. Canseco Rubio
Lic. Educación Preescolar
3°A
25/Octubre/2016
INTRODUCCIÓN
La literatura infantil tiene como concepto toda aquella producción que tenga su contenido primordialmente con un toque artístico y como destinatario principal al niño. Éste contenido para los niños no representa que tienen que aprender algo, sino más bien lo ven como experiencias y vivencias extraordinarias con las que puede jugar e interactuar a través de su imaginación llamando su atención, entreteniendo, instruyendo y educando a la vez, así es como la literatura contribuye en el desarrollo integral del niño mucho más significativamente, y a su vez, fomenta la pasión por la lectura.
Existen diferentes tipos de la literatura infantil, como las canciones, las rimas, la poesía, las fábulas, etc. Pero en ésta ocasión se hablará un poco sobre los cuentos infantiles.
Los cuentos infantiles son una narración breve donde se presentan hechos reales o ficticios, cuenta con tramas y temáticas sencillas que no dejan de ser de gran interés e intensidad para el niño, que en ocasiones son usadas para transmitir enseñanzas. Los cuentos tienen muchos beneficios, y pueden ofrecerle al niño muchos aprendizajes siempre y cuando se utilicen y se narren de una manera adecuada, dejando que el niño se interiorice en el drama y haga sus propias hipótesis y deducciones.
CUENTOS INFANTILES
El hábito de contar cuentos se ha ido trasmitiendo de generación en generación, lo cual se debe a los numerosos beneficios que aportan los cuentos a los niños.
Los cuentos infantiles deben tener una narración clara y una sencilla comprensión, ya sean orales o escritos. Por lo común, aparte de que el lenguaje usado comúnmente es sencillo, el lenguaje suele ser lúdico, ya que permite el juego con la palabra y el tono de voz al momento de interpretar emociones y reacciones de los personajes que conforman el cuento. Esto ayuda a desarrollar la capacidad de comprensión del niño, a aumentar su nivel de imaginación/fantasía y la capacidad de deducción de hechos. En el caso de los cuentos escritos, es muy importante que sean muy ilustrativos para darle al niño la facilidad de entendimiento de lo que va pasando durante todo el cuento e imaginar los escenarios plasmados. Además, ayudan al niño identificarse con lo que ellos sienten, pueden ofrecerles ayuda e ideas para resolver sus problemas, ya que algunos de los cuentos proporcionan puntos de referencia sobre la conducta que hay que tener en la vida con situaciones reales de la vida diaria plasmadas en una narración llamativa y motivante para los niños que aunque pueda sonar ficticia o mágica, si pasa en la vida real. Muchos cuentos infantiles también hablan de sucesos y aspectos reales de la vida, de luchas o temas fuertes, pero dándoles una forma que las hacen menos aterradoras de lo que en realidad son.
Es por eso que los cuentos son un muy buen material didáctico en el aula sobre todo en Preescolar, mostrando aprendizajes, valores y experiencias que los mismos niños viven día con día. Sin embargo, el uso de cuentos en el aula es decisión de la maestra, ya que este método de enseñanza no es evaluable.
Sin embargo, así como aporta beneficios, puede ser que no aporte nada y esto no depende del cuento, sino de la persona que decide narrarlo. Influye muchísimo el saber contarlo y el tono de voz, pero el peligro se presenta en el momento que él cuenta los cuentos empieza a explicar y desenvolver la trama y moraleja del cuento, privando a los niños de desarrollar su capacidad deductiva y limitando sus límites de pensamiento e imaginación. Y así como es muy común usar los cuentos en Preescolar, es muy común también presenciar éste error, porque se tiene la idea de que el niño no podrá entender lo que el cuento realmente quiere expresar sin dejar que el infante haga conciencia de lo que está viendo o escuchando. Tiene que quedar bien claro que un cuento se cuenta, no se explica, de lo contario se pierde la eficacia educativa. Es evidente que tampoco se trata de dejar el niño en agonía si no entiende absteniéndose de explicarle el significado de algunas palabras que causen conflicto en su entendimiento o no contestar preguntas e inquietudes espontáneas al estar narrando el cuento, sino se trata de evitar la explicación del sentido central del cuento respetando las interpretaciones personales.
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