LA TECNICA, EL HABITAR Y EL CONSTRUIR, EL USO DE LA LINGÜÍSTICA EN LA RESOLUCION DE PROBLEMATICAS

BAILON V.

TEXTOS:

CONSTRUIR, HABITAR, PENSAR. M. HEIDEGGER

EL MITO DEL HOMBRE ALLENDE LA TECNICA. J. ORTEGA Y GASSET

LA TECNICA, EL HABITAR Y EL CONSTRUIR, EL USO DE LA LINGÜÍSTICA EN LA RESOLUCION DE PROBLEMATICAS

        Los autores a grandes rasgos en cada uno de sus textos no pretenden definir los términos técnicos ni arquitectónicos, sin embargo, desde sus respectivos campos de estudios intentan responder a una serie de interrogantes que van surgiendo a lo largo de los textos.

Heidegger pretende dar un espacio para pensar sobre el habitar y el construir. De esta forma se forjan las preguntas centrales del texto que son: ¿Qué es lo que significa habitar? Y, ¿en qué medida el construir pertenece al habitar?

        En cambio, Ortega y Gasset plantean los orígenes de la técnica, el pensamiento, la inteligencia e incluso la libertad.

        Si bien el hombre construye para habitar, donde se respeta la relación de un medio por un fin. Solo se logra habitar por medio del construir. Pero una morada en toda regla, ¿nos garantiza un pleno habitar? Podemos decir que estas afirmaciones son falsas en cierta forma, ya que siguiendo el esquema medio-fin del construir para habitar, estamos desfigurando las relaciones presentes en el significado de dichos términos. Esta distorsión de las relaciones existentes entre estas dos entidades se encuentra sustentada por la caracterización que el lenguaje provee a las palabras. “La explicación de la esencia de una cosa, viene de la esencia del propio lenguaje”. Aquí se nos presenta la hipótesis de que brindar una especial atención al uso del lenguaje, nos llevaría a clarificar también la esencia de las cosas a las que esta se refiere.

        Antes de pasar a definir el hecho de construir y su relación con el habitar es imperativo hacer un acercamiento a las ideas de Ortega y Gasset que nos dan una vista bastante extendida del hombre como un ser pensante, inteligente y fantasioso. Si bien el enfoque, aunque tiene un especial énfasis en los orígenes etimológicos, tiende más a una corriente behaviorista o conductista, partiendo del análisis del comportamiento, entendiendo este como una interacción entre individuo y su ambiente físico, abarcando ámbitos biológicos y sociales.

        En el texto se nos define a la técnica como una necesidad del hombre y esta se asocia a la creación. Dando pie a la pregunta ¿Por qué y para qué? ¿Por qué y para qué la aspiración de crear un nuevo mundo? Estableciendo que el hombre crea tanto por utilidad (herramientas) como por disfrute (arte). El hombre por su propia evolución, es un ser que no pertenece a este mundo natural, no se amolda ni acomoda a este. Este ser pese a estar metido en la naturaleza no forma parte integral de ella.

        A través de un relato se nos presenta la idea de como el primer hombre se desliga de su contraparte animal, encontrando súbitamente una gran riqueza de imágenes en su interior, fantasías y lo que se podría considerar como los primeros bosquejos de un intelecto o conciencia. Por primera vez un ser se encontraba ante dos visiones totalmente opuestas, el instinto o la conciencia o fantasía, por ende la capacidad y necesidad de elegir se hacía tangible. El hombre por necesidad debe ser un animal elector. Aquí es pertinente mencionar las raíces de algunos términos a los que el autor hace mención para asegurar la comprensión de estos y la relación que tienen entre sí.

        El elegir o escoger proviene de “Eligere” y aquel al que elige “Elegens” O “Elegans”. El Elegans deriva en la palabra elegante, que no es más que aquel que elige pero elige bien. También se hace un énfasis en la similitud entre la agudización del término Elegans a Intellegans con la raíz de la palabra inteligencia “Intelligentia”. Otra cualidad intrínseca del ser humano que surge de la misma necesidad de elegir. El hecho de que el hombre pueda elegir le otorga la misma libertad, que quizás sea un concepto terrible para muchos, debido a las responsabilidades que esta acarrea consigo, pero a su vez el más alto privilegio del ser.

        Así pues la inteligencia, la técnica y la libertad misma provienen de un hecho común, de aquellos primeros pensamientos y fantasías del hombre primitivo. Que visto desde este punto se podría definir que el mismo pensamiento en sí es un hecho fantástico.

Los deseos del hombre se rigen por la fantasía, no tienen nada que ver con los instintos ni mucho menos con la naturaleza. La construcción y el pensamiento parten de estos mismos deseos del ser humano.

Aunque Ortega y Gasset nos dan un paneo general, la construcción o el construir en el caso de Heidegger se encuentra estrechamente ligado más que a la técnica, al habitar en sí mismo, aquí es donde el autor analiza la evolución sincrónica del lenguaje, la etimología y el significado de las palabras, expresando el gran peso que se le da al lenguaje, entonces indagando por las palabras originales y su concepto más alla de una mera traducción, ofrece una posible vía de alcanzar el entendimiento.

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