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Las Funciones Didacticas


Enviado por   •  12 de Diciembre de 2012  •  2.876 Palabras (12 Páginas)  •  824 Visitas

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Las funciones didácticas

Osmar Carvajal Gabela

osmar@eaeht.tur.cu

El proceso de enseñanza es un complejo sistema en el que cada uno de los elementos que lo componen desempeña un papel en correspondencia con el lugar que ocupa en el todo y con las relaciones que se establecen entre ellos. También puede analizarse cada elemento como una parte o subsistema del sistema mayor. Por eso podemos estudiar el sistema de objetivos, el sistema de contenidos, el sistema de métodos, el sistema de medios y el sistema de evaluación.

Las características del proceso no se corresponden con la suma de las características de sus elementos, sino con las de las relaciones integradoras de ese complejo conjunto.

El proceso de enseñanza es algo más que la integración de la enseñanza y el aprendizaje, es la integración sistémica y holística de todos los elementos y sus relaciones. Todos los elementos que integran este proceso se relacionan entre sí, pero el objetivo tiene el carácter rector porque él determina el resto de los elementos y las relaciones entre ellos.

Ahora nos ocuparemos de las funciones didácticas, otro aspecto que ha sido abordado por diferentes autores y podemos encontrarlo en diversas fuentes de información, con el propósito de argumentar su importancia para dirigir el proceso de enseñanza. Consideradas como tareas que reflejan la relación legítima entre los eslabones o fases del proceso de enseñanza, las funciones didácticas son tareas que expresan la lógica y el ritmo de dicho proceso.

En la consulta bibliográfica realizada se pudo constatar que las funciones didácticas están asociadas o relacionadas con:

La lógica del proceso de enseñanza.

El aspecto interno del método de enseñanza.

Las formas de organización del proceso de enseñanza.

Las funciones didácticas y la lógica del proceso de enseñanza

La lógica del proceso de enseñanza es dinámica y contradictoria. El aprendizaje del contenido se produce o no, en dependencia del comportamiento de los diferentes elementos que intervienen en cada uno de los eslabones de dicho proceso.

Sabiendo que el eslabón es un elemento constitutivo del proceso de enseñanza, que se caracteriza por el tipo especial de actividad cognoscitiva de los educandos que se produce, analicemos la lógica de este proceso a partir de sus eslabones.

El carácter procesal del proceso de enseñanza puede comprenderse a partir del análisis de cada uno de los eslabones y de las relaciones entre ellos, lo que se muestra en el esquema siguiente:

El primer eslabón es la preparación del educando para aprender el contenido. Esto demanda que se garantice que el educando tenga posibilidad y disposición para aprender. El educando ha de reconocer el problema, tomar conciencia de las tareas que debe ejecutar y experimentar la necesidad de ejecutarlas. Para que esto suceda, ha de afrontar una situación problémica que acapare su atención, que lo motive y lo mantenga interesado a interactuar con el objeto de aprendizaje. En este sentido la orientación hacia el objetivo desempeña un importante papel.

Este eslabón es muy importante para asegurar que el educando asuma una actitud positiva ante la ejecución de las tareas que garantizarán la asimilación consciente del contenido.

El segundo eslabón es la comprensión del contenido por el educando. Esto demanda que se garantice que el educando realice las acciones que le permitan representarse o entender lo que debe aprender.

El educando ha de ejecutar las tareas que le permitan comprender los nuevos conceptos, leyes, teorías, fenómenos, procesos y hechos propios del objeto de estudio, así como las relaciones entre ellos. Para que esto suceda, ha de razonar, utilizando los procesos básicos y operaciones lógicas del pensamiento. La comprensión del contenido por el educando no garantiza que este pueda reproducirlo.

Este eslabón no sólo contribuye a la comprensión del contenido por el educando, sino que favorece el desarrollo de sus procesos cognoscitivos, afectivos y volitivos, al interactuar con el objeto de aprendizaje.

El tercer eslabón es la fijación de lo comprendido por el educando. Esto demanda que se garantice que el educando realice las acciones que le permitan grabar lo comprendido, pero a un nivel reproductivo. Para lograrlo, estas acciones han de ser similares a aquellas que facilitaron la comprensión.

El educando ha de ejecutar las tareas que le permitan fijar y perfeccionar los conocimientos asimilados, así como las habilidades y actitudes inherentes a la profesión que estudia. Para que esto suceda, ha de repasar, realizar ejercicios y analizar lo estudiado desde diferentes ángulos, hasta que logre la integración del sistema de contenidos aprendidos.

La fijación del contenido por el educando sólo garantiza que este pueda reproducirlo en situaciones de aprendizaje similares a las utilizadas para la comprensión.

Este eslabón garantiza la retaguardia, desde el punto de vista didáctico, en la medida en que las tareas propicien la consolidación del aprendizaje.

El cuarto eslabón es la aplicación de lo fijado por el educando. Esto demanda que se garantice que el educando realice las acciones que le permitan grabar lo fijado, pero a un nivel productivo. Para lograrlo, estas acciones han de ser diferentes de aquellas que facilitaron la fijación.

El educando ha de ejecutar las tareas que le permitan aplicar lo aprendido, aproximando el proceso docente a la vida, a la actividad laboral. Para que esto suceda, ha de utilizar libremente lo aprendido en la ejecución de tareas teóricas y prácticas con un alto nivel de independencia, hasta que logre la sistematización del sistema de contenidos aprendidos.

La aplicación del contenido por el educando garantiza que este pueda emplearlo en situaciones de aprendizaje diferentes de las utilizadas para la comprensión y la fijación.

Este eslabón favorece el desarrollo de su competencia laboral, en la medida en que afronte la solución de problemas propios de su profesión.

El quinto eslabón es la evaluación de lo “aprendido” por el educando. Esto demanda que se garantice que el estudiante realice las acciones que le permitan demostrar si es capaz de reproducir (reconocer o recordar en situaciones

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