Lectura de Isabel Solé: leer, comprender y aprender

Lectura de Isabel Solé: leer, comprender y aprender.

En la lectura de Isabel Solé “leer, comprender y aprender” puedo resumir que somos capaces de aprender de forma autónoma siempre que tengamos motivación, interés y conocimientos previos sobre el tema que leemos, además de que el texto se adapte a nuestras necesidades.

Cabe mencionar que el esfuerzo cognitivo que realiza el lector es básica durante la lectura pero también son imprescindibles: una estructura lógica, coherencia en el contenido y una buena organización del texto que se lee, para llegar a la comprensión lectora. También es importante destacar que se le atribuye un significado a lo que se lee según los conocimientos previos de los que posee cada lector.

Para que alguien se implique en la lectura ha de sentirse capaz de leer y comprender el texto y por ello se sentirá motivado. Para una lectura motivadora es necesario:

- Conectar con los intereses del lector.

- Responder a un objetivo.

Existe también un conocimiento significativo, acuñado a Ausubel (1936) aprender algo equivale a formarse una representación, un modelo propio, de aquello que se presenta como objeto de aprendizaje; implica poder atribuirle significado al contenido en cuestión, en un proceso que conduce a una construcción personal, subjetiva, de algo que existe objetivamente. Aprendemos a medida que vamos leyendo – si ocurre- porque, como lector, dispone del conocimiento previo relevante, que le permite comprender e integrar la información que encuentra (Ausubel hablaría aquí de significatividad psicológica), y porque ésta posee un cierto grado de claridad y coherencia (Ausubel lo definiría como significatividad lógica) que facilita su ardua tarea. Sin embargo estas condiciones no son nada sin su disponibilidad para ir a fondo, para mostrar esa disponibilidad, se necesita encontrarle sentido a leer un texto, saber para que lee, debe encontrarse motivado para esa actividad concreta.

Es por eso que muchas personas leen textos durante toda su vida por diversas razones, a veces más por obligación que por gusto, y es raro encontrarse con personas a los que se pueda preguntar qué entendiste de dicho libro o texto y que te puedan responder claramente lo que comprendieron y el conocimiento que obtuvieron. Porque la mayoría lo que hace es un resumen a manera de memorización.

La lectura es un proceso mediante el cual el lector pone mayor atención a las letras para descifrar lo que dice el texto pero en el que también se presenta el proceso de comprensión para el que el lector dispone de dos maneras distintas para hacerlo:

1.- puede leer y comprender casi automáticamente

2.- el lector no comprende

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