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MARTÍN DE BRAGA De correctione rusticorum

Carlos Izquierdo VillanuevaEnsayo30 de Enero de 2016

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MARTÍN DE BRAGA

De correctione rusticorum

Carlos Izquierdo Villanueva

Aldán Martinez Puga

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ÍNDICE

Introducción…………………………………………………………………………….3

Biografía………………...………………………………………………………………4

Gallaecia…………………………………………………………………………………5

Monasterio de Dumio……………………………………………………………………6

Conversión del Reino suevo……………………………………………………………..7

I Concilio de Braga………………………………………………………………………9

Arzobispo de Braga……………………………………………….................................10

II Concilio de Braga……………………………………………....................................11

Muerte…………………………………………………………………………………..12

Obra……………………………………………………………………………………13

De correctione rusticorum……………………………………………………………………..13

Sententiae Patrum Aegipteorum……………………………………………………………….16

Formula vitae honestae…………………………………………………………………………16

Otras obras suyas……………………………………………………………………….16

Influencia en el pensamiento de su época……………………………………………17

La parte de Aldán

Bibliografía


INTRODUCCIÓN

En el siguiente trabajo monográfico sobre el obispo Martín de Braga, encontraremos una breve biografía con los hechos más importantes de la vida del santo, su obra principal como escritor eclesiástico, la influencia que ejerció en el pensamiento de su época y finalmente nos detendremos en analizar un fragmento de su obra De correctione rusticorum, objeto principal de esta monografía.

Son diversos los nombres con los que se conoce a Martín de Braga (Panonia, actualmente Hungría, entre 510 y 512 d.C – Braga, entre 579 y 580 d.C.); Martín de Dumio, Martin Dumiense o Santo Martiño son unos ejemplos. Fue un obispo católico, teólogo y escritor eclesiástico hispano de origen panónico, llamado el “Apóstol de los suevos”. Su obra eclesial y literaria presenta un cristianismo adaptado a los diferentes grupos de población, la preocupación por transmitir valores procedentes de la Antigüedad clásica; la predicación de un cristianismo ortodoxo en tiempo de herejía; y su relación con los reyes suevos. Es una base sobre la que Leandro e Isidoro de Sevilla construyen su ideal episcopal.


BIOGRAFÍA

Martín nace en el seno de una familia romana, influyente y acomodada, en la antigua región de Panonia, una provincia del Imperio romano en Europa Central limitada al norte por el río Danubio. En la actualidad correspondería en su mayor parte a la mitad occidental de Hungría y a Croacia, Serbia, Bosnia-Herzegovina. Eslovenia, Austria y Eslovaquia parcialmente. Panonia, pese a ser un territorio muy alejado de la Gallaecia compartía con ella ciertas semejanzas; en el pasado se instalaron en ambas zonas gentes procedentes de pueblos celtas y en la tardoantigüedad, germanos de origen suevo, por lo que se pueden apreciar ciertas tradiciones culturales y lingüísticas paralelas entre estos territorios tan distantes.

El Dumiense ingresa muy joven en el clero y poco después viaja a Palestina, situamos la fecha de llegada hacia el año 535 d.C., a visitar los Santos Lugares, encontramos referencias a este viaje a oriente en escritos de su coetáneo Gregorio de Tours, allí queda hondamente impresionado ante la visión de los escenarios de la vida y pasión de Cristo. En el itinerario a oriente el paso por Constantinopla constituía una etapa, por lo que es verosímil que pasara un tiempo en la capital bizantina. En Palestina se asienta para permanecer durante varios años residiendo, y allí además de recibir una oportuna formación entra en contacto con el floreciente movimiento monástico que se estaba desarrollando en las montañas de Judea y con el eremitismo del desierto.

Palestina en estos tiempos destacaba por el nivel con el que arraigaron a un mismo tiempo la doctrina cristiana y la cultura clásica, tras una profunda y larga tradición helenística, además que constituía junto con las vecinas Siria y Egipto el foco principal de monacato durante el Imperio. De este modo su acción posterior estaría marcada plenamente por su estancia monacal en Palestina.

A la etapa que vivió en Palestina, se debe también su amplia formación humanística, sumada a la práctica del griego y del latín que ya conocía. Mucho más resaltable es el sello que la patrística oriental, en especial la de los Padres Egipcios, dejo impresa en el pensamiento del joven Martín. Al mismo tiempo que la vida ascética que practicaban los monjes y anacoretas en Palestina se convertía en un ideal, que posteriormente tendría la oportunidad de poner en práctica en tierras gallegas.

Gallaecia

Se despide de Tierra Santa en plena efervescencia del Imperio Bizantino de cara a Occidente. Durante su viaje se establece algún tiempo en la Galia y llega a la Gallaecia en torno al 550 d.C. desembarcando probablemente en Portucale, al mismo tiempo que llegaban de la Galia las reliquias de San Martin de Tours solicitadas por el rey de los suevos Carriarico con el fin de lograr, por intervención del santo, la curación de su hijo. No conocemos la razón por la que Martín decide trasladarse a Gallaecia, a la que en un principio se refiere como Finis Terrae. Tal vez, haciendo un ejercicio especulativo, sea porque el Reino de los Suevos era un reino independiente de Roma y fuera del catolicismo, cuya clase dominante era en gran parte cristiana arriana. Por entonces la antigua ciudad romana de Bracara Augusta, la actual Braga en Portugal, pasa a convertirse en la capital del reino suevo. Conviene recordar que Braga ya había sido la capital de la provincia romana de Gallaecia.

El Reino suevo fue fundado por el pueblo germánico de los suevos, que le presta el nombre, en la primera mitad del siglo V tras haber penetrado en la península ibérica junto a vándalos y alanos en el 409 d.C. Este hecho se enmarca dentro del proceso a gran escala conocido como “invasiones bárbaras”, caracterizado por las migraciones masivas de los pueblos denominados básbaros por griegos y romanos que ocuparon violentamente o mediante acuerdos políticos grandes extensiones del Imperio Romano de Occidente. El Reino suevo se estableció en la antigua provincia romana de la Gallaecia, probablemente en el momento de asentarse aún continuaran procesando el paganismo, pero siendo rey Requiario (o Rechiario) se convirtió al cristianismo y con él la mayor parte del reino. Esta muestra de inteligencia política, pues debía gobernar una región mayoritariamente cristiana, fue posteriormente imitada por los demás pueblos recién llegados a la península. La presencia de la cruz en las monedas suevas parece indicar que esta conversión se produjo alrededor del año 449 d.C. De este modo podemos observar la modernidad del pueblo suevo al adaptarse a los modelos organizativos y culturales de los galaicos-romanos acogiendo su propia religión. Orosio da cuenta del progreso suevo al afirmar: "fueron los primeros entre los bárbaros que cambiaron la espada por el arado" confraternizando así con los galaicos-romanos que les podían preferir a ellos antes que a la fuerte presión tributaria del Imperio de Occidente

A este nuevo reino la documentación se refiere como Regnum Suevorum, o también con el calificativo de gallego, Regnum Galliciensis, tal y como nos muestran las monedas conservadas. Posteriormente el rey Requiario fue derrotado en el 456 d.C. por las tropas del rey visigodo de Teodorico, con lo que comienza un período de oscuridad para Gallaecia que durará casi cien años.

Así mismo los visigodos, conscientes de la importancia de los mecanismos ideológicos, se apresuraron a evangelizar las nuevas tierras conquistadas, y dada la superioridad visigoda y el decaimiento de los reyes suevos, estas tierras pasaron a profesar el arrianismo, una corriente cristiana considerada herética. Pese a estar doblegado por el poder visigodo, el reino Suevo logro conservar gran parte de su independencia política, capaz por ello de actuar por cuenta propia en el contexto internacional.

El arrianismo es un conjunto de doctrinas cristianas expuestas por Arrio (Libia, entre 250 y 256 d.C. – Constantinopla, 336 d.C.), un asceta, presbítero y sacerdote de Alejandría, probablemente de origen bereber, que sostenía que Jesús era hijo de Dios, pero no Dios mismo. El arrianismo fue condenado como herejía en el Primer Concilio de Nicea (325 d.C.) y ratificado en el Primer Concilio de Constantinopla (381 d.C.).

Monasterio de Dumio

Tras trabajar durante varios años como presbítero y como monje funda el monasterio de Dumio en el 555 d.C. cerca de la capital Bracara Augusta, junto a la iglesia que tras la conversión al catolicismo del rey suevo Carriarico dedico a san Martín de Tours.

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