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Aristoteles

girasolbella19 de Noviembre de 2012

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Aristóteles

(- 384 a - 322)

BIOGRAFÍA (-384 a -322)

Aristóteles nació en el año 384, en Estagira, una pequeña ciudad situada al norte del mar jónico, es decir, en la esfera de influencia Macedónica (actual Macedonia). Hijo de médico, y por ello predispuesto a la observación y ciencia natural, Su padre, Anicónico, fue médico del rey Amintas III de Macedonia, hecho que explica su relación con la corte real de Macedonia, que tendría una importante influencia en su vida.

En el año 367, cuando Aristóteles tenía 17 años, su padre murió y su tutor Proxeno de Atarneo lo envió a Atenas, por entonces un importante centro intelectual del mundo griego, para que estudiase en la Academia de Platón. Allí permaneció por veinte años.

En el año 347, Tras la muerte de Platón, Aristóteles dejó Atenas y viajó a Atarneo y a Aso, en Asia Menor, donde vivió por aproximadamente dos años bajo la protección de su amigo y antiguo compañero de la Academia, el tirano Hermias, quien era gobernador de la ciudad. Bajo su influencia, Hermias suavizó su política reformando su constitución. Paralelamente; Además se casó con Pythias, la sobrina de Hermias, con quien tuvo una hija.

En el año 345, Cuando Hermias fue asesinado, Aristóteles viajó a la ciudad de Mitilene, en la isla de Lesbos, donde permaneció por dos años. Allí continuó con sus investigaciones junto a Teofrasto, nativo de Lesbos, enfocándose en zoología y biología marina.

En el año 343, el rey Filipo II de Macedonia convocó a Aristóteles para que fuera tutor de su hijo Alejandro, de 13 años, futuro heredero del trono; Aristóteles viajó entonces a Pella, por entonces la capital del imperio macedonio, y así fue como el gran filósofo se convirtió en el tutor del futuro Alejandro Magno, durante, tres años. No sabemos hasta qué punto el maestro influyo en su discípulo

REGRESO A ATENAS Y CREACION DEL LICEO

En el año 335, Cuando muere Filipo, Alejandro sube al trono, y Aristóteles regresó a Atenas y fundó su propia escuela, el Liceo (llamado así por estar situado dentro de un recinto dedicado al dios Apolo Licio). A diferencia de la Academia, el Liceo no era una escuela privada y muchas de las clases eran públicas y gratuitas. A lo largo de su vida Aristóteles reunió una vasta biblioteca y una cantidad de seguidores e investigadores, La mayoría de los trabajos de Aristóteles que se conservan son de este período.

En el año 323, Cuando Alejandro murió es probable que Atenas se volviera un lugar incómodo para los macedonios, especialmente para quienes tenían las conexiones de Aristóteles. Tras declarar (según se cuenta) que no veía razón para dejar que Atenas pecara dos veces contra la filosofía (en referencia a la condena de Sócrates), Aristóteles dejó la ciudad y viajó a Calcis, en la isla de Eubea, tierra de su madre, donde murió al año siguiente, en el año 322, por causas naturales a los sesenta y dos años de edad.

EL CONOCIMIENTO ARISTOTELICO

Aristóteles, en principio, era un naturalista (como en gran parte lo habían sido los primeros filósofos): lo pintoresco de algunas de sus explicaciones sobre animales, plantas o planetas no debe oscurecer el merito de su voluntad de autentica observación científica, a pesar de su falta de formalización matemática.

OBRAS DE ARISTOTELES

Aristóteles escribió cerca de 200 tratados, sobre una enorme variedad de temas incluyendo lógica, metafísica, filosofía de la ciencia, ética, filosofía política, estética, retórica, física, astronomía y biología. Aristóteles transformó muchas, si no todas, las áreas del conocimiento que tocó. Es reconocido como el padre fundador de la lógica y de la biología, pues si bien existen reflexiones y escritos previos sobre ambas materias, es en el trabajo de Aristóteles donde se encuentran las primeras investigaciones sistemáticas al respecto.

Entre muchas otras contribuciones, Aristóteles formuló la teoría de la generación espontánea, el principio de no contradicción, las nociones de categoría, sustancia, acto, potencia, etc. Algunas de sus ideas, que fueron novedosas para la filosofía de su tiempo, hoy forman parte del sentido común de muchas personas.

METAFÍSICA

Teniendo en cuenta las declaraciones del propio Aristóteles en el comienzo de la Ética a Nicómaco, donde dice que se debe preferir la verdad a la amistad, lo que si parece cierto es que después de una época platónica, Aristóteles se separó de su maestro: la teoría de las ideas no le pareció consistente.

De hecho, encontramos una crítica de ésta en los libros A, M y N de la Metafísica. En los dos últimos habla el filósofo de los platónicos en tercera persona, poniendo de manifiesto su voluntad de ruptura.

Sin embargo y pese a las profundas diferencias entre ambos filósofos, Aristóteles no perderá la visión dualista de la realidad aunque sí echará por tierra la transcendencia absoluta del mundo platónico de las ideas: el chorismós o abismo existente entre las esencias eternas e inmóviles y la realidad siempre cambiante del mundo.

No obstante, Aristóteles no suprime ese abismo, sino que lo introduce en el interior mismo de los seres terrenales (del mundo sublunar), quedando a salvo del azar y la contingencia el mundo supralunar: esa región celeste y etérea absolutamente ordenada y regular.

CRÍTICAS A LA TEORÍA DE LAS IDEAS DE PLATÓN

En su juventud, Aristóteles fue discípulo de Platón en la Academia de Atenas. Aristóteles construyó un sistema filosófico propio. Previo a ello, sometió a crítica la teoría de las Ideas de su maestro. Para intentar solventar las diferencias entre Heráclito y Parménides, Platón había propuesto la existencia de dos dimensiones en la realidad: el Mundo sensible y el Mundo inteligible. Para Aristóteles, el mundo no tiene compartimentos. La crítica aristotélica se centrará fundamentalmente en el carácter separado y trascendente de las ideas platónicas. Fue platón y no Sócrates (que se limitó a buscar y definir la esencia de las cosas, para poder conocerlas a través del lenguaje) el que otorgó una existencia absolutamente separada a las esencias, denominándolas ideas:

"Pero Sócrates no atribuía existencia separada a los universales ni a las definiciones. Sus sucesores, en cambio, los separaron, y proclamaron ideas a tales entes, de suerte que les aconteció que hubieron de admitir, por la misma razón, que había Ideas de todo lo que se enuncia universalmente."

Aunque Aristóteles no reduce la filosofía a la física, ya que afirma la existencia de seres no sensibles (esencias), sí renuncia al carácter trascendente y separado de las ideas, ya que éstas, en última instancia, deben explicar los acontecimientos y seres del mundo en que vivimos, si se quiere construir una ciencia (episteme) que nos incumba y no sólo una idea de la ciencia.

Por ello, las esencias (que otorgan la necesidad y permanencia que lo sensible no posee) deben ser inmanentes a las cosas mismas si queremos reconocerlas como tales y que cumplan su función: determinar a las cosas a ser esto o lo otro. Si las ideas se encontraran separadas no podrían determinar a las cosas de ninguna manera, por ser trascendentes a ellas. Además, los conceptos platónicos de imitación y participación tampoco explican realmente nada y añaden mayor confusión al asunto. Se trata de hacer ciencia, no de crear bellos mitos.

La teoría de las ideas tampoco cumple su función explicativa de la realidad, porque ellas, en su eternidad inmóvil son incapaces de explicar la existencia del movimiento y del cambio de los seres, y mucho menos, de ser causa de ellos. Efectivamente, al platonismo se le presenta el siguiente problema: si las ideas son eternas e inmóviles, cómo dan razón de los cambios y movimientos a los que están sometidos los seres de este mundo, sobre todo teniendo en cuenta que éste mundo nuestro no es más que una copia e imitación de aquel. Mala copia es este mundo ya que asume atributos que el original no posee: el movimiento, el cambio, la pluralidad.

Si se trata de hacer ciencia sobre el mundo que nos interesa, en el que vivimos, las ideas no satisfacen su función causal. Por ello, Aristóteles asegura que es imposible que las esencias de las cosas estén separadas de las cosas mismas. Las ideas son quimeras, hipóstasis de lo sensible mismo. Y, por lo tanto, podemos prescindir de la teoría platónica de las ideas porque más que explicar la realidad, la complica.

Sin embargo, Aristóteles no se separa del todo de su maestro: al igual que Platón, admitirá la existencia de seres no sensibles, las esencias, pero esta vez inmanentes (inoculadas) dentro de las cosas singulares como su "forma" para formar, junto con la materia, un compuesto unitario: la substancia. En ello consiste la teoría hilemórfica de Aristóteles: introducir el mundo ideal platónico dentro de nuestro propio mundo, como un coelemento de éste, sin que perdamos nuestra unidad. Esto tiene la ventaja de que podemos hacer ciencia de lo que es inmutable y universal sin perdernos en las alturas: solo hay ciencia de las esencias, pero éstas se encuentran en las cosas mismas: lo universal se halla subsumido en lo particular en un vínculo íntimo que nos permite la unidad del hombre con la naturaleza y el privilegio de su conocimiento.

LA METAFÍSICA ARISTOTÉLICA

La Metafísica Aristotélica comprende una serie de tratados

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